Capitulo 69

2.6K 385 31
                                    

Después de que Camie se fue y terminará la entrevista dejando a Mitsuki con las pistas suficientes de tu trabajo, armo un problemon.

—¡No permitiré que mi hijo se quede aquí con alguien que tiene un trabajo que pondría en riesgo su vida y la de su cachorro! —Mitsuki camino por los pasillos hasta bajar los peldaños con enfado.

Se topo con Masaru y él estaba confundido.

—¡Nos llevamos a Katsuki! —ordenó sin dejar que le impidiera.

—Pero... —Quiso tener dudas su pareja.

—Señora Bakugo, Katsuki no estará en riesgo conmigo, él estará bien, si le conté acerca de mi trabajo es por que no quiero hacer peor el entendido...

—¡ No me interesa!, crie a Katsuki con todo mi esfuerzo, no permitiría que alguien como tú le arrebate su vida, puede que este marcado por ti ____ —se dio la vuelta para dirigirse a ti —. Pero hay formas de lidiar con eso.

Eso hizo que tu corazón se hundiera más en tu pecho.

Masaru estaba aun más confundido, especialmente el por qué su esposa se llevaría a su hijo.

—Mitsuki —quiso hablar Masaru.

—¡Katsuki! —le grito Mitsuki y él apareció a paso lento por el embarazo.

—Nos iremos a Japón de nuevo, estaras lejos de ____.

Katsuki sentía como si lo que se hubiera comido le fuera hacer daño.

—¡¿Qué?! ¡No!

—No me interesa, te iras con nosotros, el trabajo de esa alfa —te señaló —. Ella es un criminal.

Masaru se medio sorprendió, obviamente no todo era pulido, debía haber algo.

—No puedo permitir eso —Se te escucho más firme —. Katsuki es mi pareja y esta embarazado, no puedo dejarlo solo.

—Oh... Si puedes ____, si puedes, mucho omegas marcados pueden vivir sin sus alfas.

Katsuki toco su panza preocupado.

—Mitsuki, no deberíamos ser nosotros quienes tomemos la decisión —Masaru quería defenderte.

—No, Masaru... Cariño, yo siempre hago lo que tú dices, pero esta vez no, no puedo permitirlo, no me interesa lo peligroso de esa alfa, si incluso es un Dios o algo, yo protegeré a mi hijo y a mi nieto.

Tu expresión parecía pálida por sus palabras.

—No... No puedo dejar que se lleven a Katsuki.

Katsuki estaba intentando no alterarse, afectaría su embarazo que tanto deseo.

—¡Ya cállense! —grito Katsuki en su último intento de control, comenzó a respirar agitado —. Me quedaré donde quiera... Con quien quiera.

—Katsuki deberías sentarte —quisiste llevar a Katsuki a un sofá por lo cansado que se miraba.

Mitsuki interfirió y prefirió hacerlo ella.

—Esta mierda estresara a mi bebé, así que si van a discutir háganlo en el patio, a una manzana de largo de la mansión, aunque me intenten separar de esa alfa —te señaló —. Seguiré con ella.

Sonreíste aliviada.

Mitsuki no estaba convencida y se llevaría a Katsuki aunque le pusieras un arma en la nuca, cosa que jamas harías.

Katsuki pidió agua y mientras le ibas a traer te acompaño Masaru.

—Deberías dejar que se lleve a Katsuki, se le pasará en un tiempo y estarás con él —opino Masaru.

—No puedo... Él está embarazado y no quiero dejarlo.

—será un tiempo corto, en un mes...

—Es mucho, Katsuki estaría en su quinto mes de embarazo.

—____ déjame ayudarte con este problema.

Masaru haría lo que fuera para volver a dejarlos juntos, discutir más lo haría complicado.

Suspiraste... No había de otra, Masaru tenía razón, pero dejar que se lleven a Katsuki era lo mejor.

Mientras Mitsuki hablaba con Masaru en los jardines, tú le decías a Katsuki que debían pasar por esto.

—Pero esa bruja exagera, no quiero irme de casa —se molesto más.

—Cariño... Hazlo por Katsuki y Katsuhi.

Mirandote de esa forma no podía negarse.

.

.

.

.

Al final se terminaron separando, cortando toda comunicación, en la casa de Francia estabas desesperada, aguantando irrumpir la casa de Mitsuki, Masaru se contactaba contigo para decir que Katsuki estaba bien.

Aunque el mes paso, Mitsuki no parecía dejar a Katsuki, tenía escoltas por toda la casa, Katsuki salía solo con Masaru y Mitsuki.

—¡Demonios no puedo estar lejos mucho tiempo! —pateaste el sofá de tu oficina y Thierry estaba ahí acompañandote, Aime estaba en Japón de infiltrado en los escoltas.

—Iré a Japón —decidiste ir.

Katsuki estaba en casa peleando como todos los días con sus madre, acerca de ese encarcelamiento que le tenían.

Al final nunca lograba nada y terminaba en su habitación abrazando la almohada, queriendo que fuera tu.

«_____» quería llorar de tanto que te extrañaba, su bebé últimamente estaba inquieto también.

Masaru se las había arreglado para llevarle unas prendas a Katsuki y que este no se sintiera solo, él comprendía lo difícil del embarazo.

—_____ —no solo creí que estaba protegido entre esas telas, sino que aveces se excitaba.

.

.

.

.

Katsuki estaba en su habitación acostado, aburrido, sin un teléfono porque Mitsuki no permitiría que comunicaran a sus espaldas.

En eso una piedra entro por la alcoba de su habitación con una nota.

Katsuki se levantó de inmediato y la recogío, con mucho esfuerzo.

“Estoy afuera :D ”

Aime se las había arreglado para quitar a los escoltas de ahí.

Katsuki se asomó por la alcoba y te vio, algo en él se alivio, hasta sintió el alivio de su bebé.

Querías subir, pero no sabias si podías trepar.

Katsuki tenía pensado hacerte entrar por la puerta sin que nadie lo notará, pero vio como retrocedias para correr y trepar.

Cuando menos espero estabas intentando subir sin soltarte de la baranda, le parecía cómico ver a su alfa trepar cuando sus fuertes eran el vóleibol y béisbol.

—Jesús... —decías en voz baja —.me cuesta subir —intentabas subir un pierna en la baranda.

Katsuki vio que te pusiste roja de la fuerza que empleabas.

Al subir caíste al suelo, golpeado tu cabeza con el contrato, pero era un alivio aflojar el cuerpo, por un momento creíste que te estirparias los testículo.

«Carajo me duele el abdomen» te quejabas del dolor en tu mente

Katsuki estaba viéndote en el suelo.

Ya en pie te llevo a la cama para que no te vieran.

—sorpresa —Sonreíste aun cansada.

Katsuki sonrió sin decir nada y te beso cuando se sentó en tu regazo.

𝐎𝐌𝐄𝐆𝐀𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 𝐊𝐀𝐓𝐒𝐔𝐊𝐈 𝓟𝓡𝓔𝓓𝓔𝓢𝓣𝓘𝓝𝓐𝓓𝓞 𝓟𝓔𝓡𝓕𝓔𝓒𝓣𝓞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora