𝐎𝐌𝐄𝐆𝐀𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 𝐊𝐀𝐓𝐒𝐔𝐊𝐈 𝓟𝓡𝓔𝓓𝓔𝓢𝓣𝓘𝓝𝓐𝓓𝓞 𝓟𝓔𝓡𝓕𝓔𝓒𝓣𝓞

Capitulo 40

Katsuki se despedía de ti, no estaba alegre con tu ida, quería que te quedaras, lastima no se le ocurrió amarrarte a la cama, pero cada día estaban más cerca de estar junto.

—Katsuki... Por favor ya sueltame —No tenía pensado dejar de apretarte en sus piernas.

—No quiero —mordio tu hombro —. Promete que volverás, sin importar nada, volverás, juralo por tus bolas.

Suspiraste y acariciaste la espalda de Katsuki.

—Juro por mis... Bolas que volveré.

Katsuki se bajo de ti y te quedo viendo esperando algún beso de despedida, no sabías que tanto te miraba, te acercaste y le diste un beso leve a inicios, pero comenzó siendo intenso cuando Katsuki lo decidió.

—Espera si no me voy a quedar, es de despedida —él no estaba satisfecho —. Ahora si debo irme, vendré el día de la ceremonia, sin falta.

Katsuki solo te vio irte, espero unos minutos en la entrada del dormitorio como si fueras a regresar diciendo “¿Sabes que?, hagamos un bebé ahorita”.

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Dos meses después

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Katsuki no había recibido ni una llamada, tampoco iba a llamarte, jamás, no no no, eso no era muy dominante de su parte, así que debía aguantar y esperar, Katsuki pasaba sus ratos libres entres las sábanas reviviendo algún recuerdo tuyo.

Se estiraba sobre ella como si fuera un gato, quedó viendo el baño, se levantó decidido a darse amor propio, además solo se masturbaba cuando le daba el celo desde hace rato.

Al ver tu cepillo de dientes recuerda que te habías cepillado con el, lo tomó sin dudar, lo olía por que aun tenia feromonas, se bajo los pantalones y subió su tracero hacía arriba, comenzó a meterse los dedos mientras lo olía, se frotaba contra las sábanas el miembro, cuando se vino seguía deseando más, agarro el mango del cepillo y se lo metió, movía sus caderas cuando lo dejaba adentro como queriendo que se moviera como tú lo hacías.

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Estabas firmando algunos documentos, estabas un tanto triste, ya dentro de unos meses mas terminaría de hacer unos exámenes pero cuando tu abuela te vio apta para manejar el negocio así que te lo dejo para ponerte a prueba, todo había estado planeado...

—Uy... —hiciste un movimiento involuntario acompañado de un gran escalofrío, tus escoltas que estaban leyendo una revista te quedaron viendo tras eso.

—¿Se siente enferma? —Le pregunto Thierry.

—Mmm... No no, es que me dio algo así como rarito —Le respondiste.

—¿segura? —Insistió.

—Segura.

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Katsuki estaba haciendo una lista en su rato libre, de varios nombres que le gustaban, necesitaba que su hijo tuviera el mejor nombre del mundo.

Katsuki había recolectado ciento dos nombres, algunos franceses por ti y otros japoneses.

Especialmente deseaba que el primer hijo fuera niño para elegir el nombre que le habías dicho hace un tiempo, ya había pensado que quería hacer un álbum de todos los hijos que llegarán a tener.

Había estado pensando en tantas cosas que quería hacer después del matrimonio que había olvidado que al día siguiente tendría su ceremonia, los meses habian pasado volando.

Estaba emocionado, necesitaba verte ya.

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Cuando Katsuki estaba en la ceremonia miraba hacia todos lados esperando verte, pero nada, sus padres estabas ocupados así que no vendrían, como la mayoría de los que estaban serian solo ellos, por que también sus padres solo tenían tiempo para el trabajo.

A Katsuki no le molestaba pues sus padres hasta ahora le habían fallado.

Mientras daba el discurso de despedida al final molesto por que no llegaste dijo “Ojalá todos se vayan al diablo ” que casi decía que se fueran a la mierda pero se abstuvo quería guardase las palabras para regañarte.

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En la fiesta de graduación no estaba muy feliz que se diga, los estudiantes bailaban y tomaban, Katsuki solo estaba sentado bebiendo junto a Uraraka, Jiro, Momo, Estaba Toga también, que resulta que no la odiaba por que al final de cuentas decía que te montaba él y nadie más, a pesar de su insistencia tampoco vio que la quisieras.