xxix. en este mundo que se derrumba

1.4K 190 71
                                        











𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐗𝐗𝐈𝐗
════════════════════
𝐄𝐍 𝐄𝐒𝐓𝐄 𝐌𝐔𝐍𝐃𝐎
𝐐𝐔𝐄 𝐒𝐄 𝐃𝐄𝐑𝐑𝐔𝐌𝐁𝐀








── Lo'aks p.o.v

—¿A dónde quieres ir?— Le pregunto notando como apretaba su agarre en mi cintura. Llevábamos unos minutos volando en mi Ikran y había notado que estaba especialmente callada hoy.

—A nuestro lugar—. Desde hace ya unos días me había dado cuenta de que su estado de ánimo había cambiado y no para bien.

Estaba muy callada y no se veía tan emocionada ante cualquier cosa como normalmente lo hacía. Tenía mis sospechas sobre porqué estaba actuando así, pero no quería afrontarlo.

Tan solo quedaba una semana.

Una puta semana y Tahlía se iría de aquí. No quería pensar en eso, porque necesitaba disfrutar al máximo mis últimos momentos con ella. Pero sabía que era algo que le estaba mortificando en estos momentos y como su pareja debía de hablarlo con ella para ayudarla.

Y siendo sincero, hablarlo también me ayudaría a mí. Aunque me costara admitirlo, cada día era más difícil. Porque todo comenzaba a volverse demasiado real y no quería creerlo.

Iba a quedarme solo. De nuevo.

Intento ignorar todo esto durante unos segundos para hacer lo que ella me había pedido, llevarla a nuestro lugar. Sería de las últimas veces que podríamos disfrutar nuestra compañía ahí, por lo que también estaba de acuerdo con pasar nuestra tarde en ese lugar.

Aunque solo necesitaba estar con ella. No importaba donde.

No tardamos mucho en llegar y me costaba admitir que me dolía el hecho de que durante todo el trayecto, a penas hubiéramos cruzado palabra alguna. Odiaría que así fueran mis últimos momentos junto a ella.

Cuando bajo del Ikran, ayudo a Tahlía a hacer lo mismo. Ella tan solo me sonríe vagamente para comenzar a caminar al árbol que colgaba del acantilado. Suspiro pesadamente y me limito a seguirla, esperando que pudiéramos hablar al respecto de lo que estaba pasando.

Al momento en el que subo al lugar en el que solíamos pasar tanto tiempo, me siento a su lado, dejando caer mis pies por el vacío al igual que ella. Había algo tan liberador en la brisa que siempre pasaba por ese lugar. Me costaba explicarlo. Era casi tan increíble como pasar el tiempo con ella. Casi.

Noto como su mirada se pierde en el horizonte y comienzo a armarme de valor para preguntarle que le estaba sucediendo. Sabía que era. Pero no quería que lo dijera. Porque eso solo hacía que todo dejara de ser una pesadilla y se volviera en mi presente.

—Tai... ¿estás bien?— La tomo de la mano, entrelazando sus dedos con los míos para demostrarle que estaba ahí para ella.

Suspira pesadamente mientras se mueve un poco para pegarse más a mí. Al momento en el que su hombro choca con el mío, apoya su cabeza en mí, apretando el agarre en mi mano mientras se preparaba para contarme el como se estaba sintiendo.

—Perdón por estar tan distante—. No la culpaba porque sabía que así como todo esto era duro para mí, también lo era para ella. Me dolía verla así de desanimada y era aún peor el no saber que hacer para que se sintiera mejor.

𝗡𝗢𝗩𝗢𝗖𝗔𝗜𝗡𝗘, lo'akDonde viven las historias. Descúbrelo ahora