TIEMPO DE ADVERSIDADES |KiriBaku|

|CAPÍTULO 24|

PESADILLA

Era de noche, Kirishima se encontraba en el laboratorio de Chiyo pues su segunda ronda de medicamento estaba por empezar, la doctora había permitido esta vez que Bakugo le acompañase ya que su asistente, Momo, iba a estar a cargo del soldado aún en cama por el disparo en su abdomen. A la pequeña anciana no le caía nada mal que el rubio le asistiese si algo malo ocurría.

─Bien querido, recuéstate completamente, por favor, prepararé el medicamento. ─Chiyo le ofreció asiento a Bakugo justo a un lado del híbrido. ─No tardaré mucho.

Kirishima acató la orden y miró al rubio con una pequeña sonrisa. ─Gracias por venir, Bakugo.

Este estaba entretenido observando con algo más de atención el laboratorio, en definitiva era mucho más pequeño que el de AFO. ─No deberías agradecer si me quedo dormido.

Eijirou lanzó una risotada que hizo el corazón de Bakugo saltar, maldita sea ¿Cómo alguien podía lucir malditamente lindo con tan sólo reír? El pelirrojo llevaba puesto el bozal, por supuesto, pero a pesar de eso sus ojos grandes se achicaban cuando una sonrisa solemne invadía su boca, y eso a Bakugo le encantaba demasiado. ─Siempre te quedas dormido tan temprano, Bakugo. Yo nunca pude lograrlo ¿Cómo lo haces?

─Si vas a mantener un cuerpo saludable tienes que dormitar al menos ocho horas de sueño, si no es de esa manera todo el entrenamiento se estancará. ─El cenizo miró con atención cada reacción del otro, hasta el más mínimo gesto le parecía interesante.

─Vaya, vaya. Es como si ya conocieran sus propios horarios de sueño ¿Eh? ─Chiyo se acercó a ellos y mandó una mirada circunspecta al cenizo, este desvió los ojos de inmediato chasqueando la lengua.

─¡Sí! ─Kirishima se veía feliz. ─Bakugo y yo dormimos juntos siempre, no tolera el desvelarse, excepto cuando-

─¡¿Está listo el medicamento?! ─El cuestionamiento de Bakugo sonó tan brusco que Eijirou le miró sorprendido, sin embargo, Chiyo sonrió con mera burla tomando asiento en su silla para proceder con el medicamento.

─No es necesario que hagas una escena, sé perfectamente que ustedes tienen una conexión que va más allá de amistad ¿O me equivoco?

─¿M-Más que amistad? ─Kirishima se colocó inquieto de repente, con su mirada pidiendo más respuestas, más palabras.

─No veo en qué parte eso es importante para el entrenamiento. ─Bakugo casi arrastró las palabras con los dientes.

─Bueno, para empezar el tener relaciones sexuales para Kirishima significan cambios en su sistema y anatomía ¿Sabías eso? Creo que no. ─La pequeña anciana preparó la primera jeringa con bastante rapidez, la hacerlo decidió seguir con su sermón. ─Tal vez el tener sexo hizo que su poder se activara, o tal vez sus células de dragón estén pidiendo más de ese placer para poder lograr una reproducción en masa, aunque está más que claro que eso es imposible. Tal vez el tener relaciones sexuales hizo que estas marcas de aquí. ─La anciana señaló unas leves y casi imperceptibles marcas rojas en el cuello de Ei. ─Como si fuesen algún tipo de membrana para otorgarle más fuerza a su cuerpo ¿Las habías notado?

Bakugo se comió sus palabras cuando miró más de cerca y, en efecto ¿En qué momento había llegado esas pequeñas marcas ahí?

Kirishima parecía bastante desconcertado, su cara lo expresaba perfectamente bien. ─No quiero dejar de hacer esas cosas con Bakugo, yo de verdad…

─Al parecer no hay nada de malo, por el momento todo va bien en tu cuerpo, si hubiera detectado una anormalidad debido a las relaciones sexuales ya habría alzado la voz a Yoichi para separarles inmediatamente.