EL OMEGA DE UN MAFIOSO (En Edición)

4.‐ Destinados

En este momento la familia de Loan y Freud estaban en una limusina, Dos hermanos estaban algo incomodos durante el viaje.

Hace un par de horas, Loan estaba gritando de emoción viendo un vestido de tono lila, este vestido era perfecto para su hija, simplemente era hermoso y encajaba con la personalidad de su hija.

La mujer puso el vestido en una caja color amarillo con listón blanco y subió las escaleras para llegar a a la habitación de su hija. Cuando recibió permiso para entrar vio como la niña estaba sentada en un tocador maquillandose, la Beta al ver esto pensó "Mi hija esta dispuesta a maquillarse, aunque ya es hermosa, se arregla para conocer a el 'príncipe de la mafia', es tan tierna".

Esther noto a su madre y le pregunto enojada .– ¡Oye! ¿Que carajo quieres mamá? ¿Acaso no ves que estoy demasiado ocupada arreglandome? –.

Loan asintió y dejo la caja en la cama de su hija para luego explicarle emocionada .– Mi pequeña, elegí este vestido porque pensé que era perfecto para ti, por favor pruebatelo –. La niña dejo de maquillarse y vio la caja, se levanto y tomo la caja para irse a su vestidor.

Loan estaba feliz de que su hija allá decidido probarse el vestido, pero no estaba preparada para ser reprochada por su buen acto.

Cuando la niña salio, vio que no traía el vestido y que su cara mostraba una expresión de inconformidad, Loan no comprendía la razón, así que pregunto amablemente .– Mi niña ¿que paso? ¿Por qué la expresión? –.

Esther la miro de arriba a abajo y luego la aventó. Despues, le grito furiosa .– ¡¡¿ACASO QUIERES QUE ME VEA COMO UNA MENDIGA?!! ¡¡NO PIENSO VER A EITHAN CON ESA COSA A LA QUÉ LLAMAS VESTIDO PUESTA!! ¡¡¿QUIERES AVERGONZARME O ALGO ASÍ?!! –. Loan estaba sorprendida, se levanto del suelo y salio a toda prisa de aquella habitación.

Freud en cambio, fue con Min y Lucia, para ellos era algo simple. Lucia vestiría un vestido amarillo mostaza, zapatos amarillos y un cinturón rojo. Min luciría un traje blanco con zapatos con zapatos algo gastados de tonalidad gris casi llegando a oscura.

Freud tomo las vestimentas y se dirigió al sotano.

Min aun tenia a Lucia dormida y cobijada con su camisa de tela, no paso mucho tiempo para que escuchara pasos cada vez más cerca de la puerta, Min por instinto, guiándose por el olor, abrazo a su hermana tratando de protegerla de cualquier cosa que estuviera afuera.

La puerta siendo azotada hizo que se alertará más, la voz de Freud salio diciendo .– Aver niños, les traigo ropa, ustedes saldrán hoy, pero ni se les ocurra decir alguna palabra ¿entendido?, vistanse rápido, los quiero listos en 20 minutos –. Dicho esto salio.

Min despertó a Lucia y le repitio lo que Freud había dicho. Lucia ayudo a Min a vestirse y luego ella se puso su vestido. Freud como dijo fue por ellos en 20 minutos y los saco del sótano, les dijo que fueran a sentarse, para Lucia que había estado afuera toda su vida no era raro sentarse en un sillón, pero para Min sentarse en uno era simplemente algo raro, extraño, y cómodo, claro no estaba relajado...

No paso mucho tiempo para que Esther bajara las escaleras, la joven vestía un vestido azulado decorado con unos cuantos colores difuminados que hacían resaltar el azul, adornos dorados y en sus pies tenia tacones bajos de color rojo opaco.

Un largo tiempo después salieron todos y Min por primera vez subió a un vehículo, era raro, si, pero era una sensación extrañamente buena.

Ahora estaban en una limusina en donde iban los cinco.

Durante todo el camino Lucia no se acerco a sus padres, en cambio, se quedo acurrucada en las piernas de Min, se sentía protegida a su lado.

Cuando llegaron a su destino, Loan ordeno que llevaran a Min y a Lucia por la puerta trasera, donde entraban los trabajadores.