37.- Hablar

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Al pasar cinco días del suceso, Min seguía en un estado... horrible.

Sus ojos contenían ojeras que eran muy notorias gracias a su piel que se volvió más pálida de lo normal. No tenia apetito y cada noche Eithan tenia que consolarlo por media hora para lograr que descanse.

Esto obviamente preocupa mucho a Eithan que ya a llamado a un doctor personal para que revise a Min. Las noticias fueron las esperadas.

Min estaba muy mal de salud. Al no ingerir alimentos ni bebidas regreso al estado en que lo encontró.

Eithan estaba realmente preocupado, cuando el doctor se fue, él entro a la habitación y vio a Min que estaba recostado y completamente cobijado.

Probablemente no se sintió muy cómodo con la revisión y opto por dormir. Eithan se acerco a él y le descubrio la mayoría del cuerpo.

Su higiene es la única cosa que no se vio afectada, se baña demasiado seguido llegando incluso a bañarse tres veces por día, se siente sucio por la culpa de haber matado a alguien.

No tiene ni las minima idea de que hacer, elegiría una opción de sacarlo a una cita por una plaza o algo, pero en su estado probablemente se pondría demasiado nervioso y terminaria llorando.

Eithan no sabia como ayudarle y se sentía inútil. Ahora realmente quiere desquitar su frustración con alguien.

Elegiría la familia de su amado para matar, pero no puede mover a su gente sin antes saber la decisión de su pareja. No podía matar a esa estúpida familia si es que no sabia si es realmente lo que Min desea.

Era un maldito inútil que no sabia lidiar con esto, no comprendía y no era tan empatico con Min en este estado. No comprende como se siente el impacto de matar a alguien.

Sintiendose mal, acaricio la mejilla de Min esperando alguna respuesta.

La respuesta fue la mano del menor que tomo la suya y la acerco más a su rostro.

.– ¿P-pasa algo? –. Pregunto Min, su tono de voz era realmente apagado y demostraba su estado psicológico que tenia ahora.

Eithan no nego el contacto y dejo su mano acariciando el rostro del menor.

.– Nada realmente.... ¿quieres hablarlo? –. Al escuchar la pregunta, Min se quedo completamente callado y solo suspiro.

Esa pregunta era repetida todos los días y sentía que la pregunta lo invadía por lo que siempre buscaba evitarla.

.– Q-quizas más tarde... –. Respondio nervioso mientras jugaba con la mano del Alfa.

Eithan capto como la pregunta lo incomodaba, pero era su responsabilidad como novio cuidarlo.

Eithan dejaba que su mano fuera utilizada como un juguete anti-estres, realmente no le molestaba.

.– Querido, ¿deseas bajar un rato? –. Esta pregunta era completamente inocente y con ámbito de querer que Min se tomara un tiempo para dejar de pensar en eso.

Min dudo un momento antes de negar.

Ante esto, Eithan mostró una sonrisa .– Comprendo –. Aunque Min no pudiese ver aquella sonrisa, sintió la comprensión y empatia del mayor. No lo culpaba, Eithan no sabia como se sentía y en cierto grado empezaba a entender el porque de estos sentimientos del contrario.

.– V-voy a dormir un m-momento –. Dijo Min antes de volver a cubrirse.

.– Si, descansa querido –. Eithan se fue de la habitación para no molestarlo.

Al salir, se encontró una Alfa que lo miraba directamente a los ojos.

Eithan la ignoro y fue a su oficina que no estaba muy lejos de la habitación. La Alfa lo siguió por detrás y lo miraba fijamente.

EL OMEGA DE UN MAFIOSO (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora