29.-

166 27 3
                                    

Pasaron bastantes días, meses...
¿Me atrevería a decir que años?

TaeHyung pasó sus cumpleaños completamente solo con JungKook.
Y se podría decir que fueron todo el día besos.

Igual JungKook, pero su familia quería sacarlo de aquella habitación donde permanecía todo el día con el castaño.

Dejando de lado esos temas, ambos chicos ya tienen 18 años, casi 19, y ya era hora de entrar a la universidad.
Los dos soñaban con ser grandes modelos, prometieron cumplir ese sueño juntos.

Sus corazones al fin se habían dado cuenta realmente de lo mucho que se aman, cuán enamorados pueden estar del otro.
Lamentablemente no todo era de color rosa.
Todos los días pasaban por burlas, e incluso llegaron a mandarlos al hospital nuevamente.
¿Tan difícil es para el mundo creer que dos chicos pueden tener una "historia" de amor?

Ambos no entendían.

[...]


12 de febrero del 2017.


―Listo, ¿Tae?―Preguntó, nervioso.

―Listo, estoy listo.―Se tapó con ambas manos el rostro, sin querer ver la computadora.

A los dos el mismo día les llegó un correo con el pase a la universidad.
¿Quién pasaría?
¿Los dos, o sólo uno?

JungKook dio click al correo de TaeHyung, abriéndolo.
Y efectivamente, él había pasado el examen de ingreso.

El pelinegro saltó emocionado y feliz por el castaño.
―¡TaeHyung pasaste!―Dijo entusiasmado, pero con miedo a que él no haya logrado ingresar.

―¡Ahora abre el tuyo!―Mencionó, nervioso aún.

Al abrirlo, sus ojos se iluminaron.

Los dos habían logrado ingresar a la misma universidad.

Se abrazaron, saltaron de alegría y emoción, de paso, unos cuantos besos.
Ambos estaban realmente felices por el otro.

JungKook sujetaba con posesión la pequeña cintura del menor, mientras aprisionaba sus labios en un fuerte beso.
TaeHyung por otro lado mantenía sus brazos alrededor del cuello de JungKook, poniéndose de puntitas al ser más bajo.
El pelinegro en eso alzó al menor,
cargándolo, para luego sentarse en la orilla de la cama y hacer que el castaño esté en su regazo.
Sin romper el beso, ambos dejaron salir pequeños suspiros y quejidos, ya que el aire les faltaba.

Entiendan, ya tienen 19 años casi, es normal que a veces sus hormonas se dispersen...

Pero ninguno de los dos sabe las consecuencias que traería tal cosa.

Aún no es el momento, y ambos están conscientes de ello, porque en primer lugar, no son nada.
Los dos son tan ciegos y tan cobardes que no se atreven a dar el siguiente paso.
Solo querían quedarse así como están, dándose puros besos y uno que otro roce.

Al finalizar dicho beso, se quedaron viendo, para luego sonreír un poco avergonzados, no tanto, porque ya era costumbre.

Al fin, empezarían con la universidad.

¿Pasarán cosas buenas?
¿Conocerán gente nueva y buena?

[...]

10 de Marzo del 2017.

―¡Oh mierda! Maldita sea...―Maldijo entre dientes el pelinegro, al ver que su desayuno se estaba esparciendo por todo el suelo.

Your Beauty Never Scared Me // KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora