Mi oscuridad favorita | FreenBecky (+18) || TERMINADA

49. Una buena noticia

Tambaleé nerviosa el test de embarazo entre mis manos, al igual que mi madre permanecía a mi lado de forma tensa y nerviosa.

Habían pasado 1 año y 7 meses desde que Freen decidió de forma estúpida, entregarse a la policía sabiendo que el rango de años de su sentencia podía ser muy amplio.
Aún así, pude perdonarla de manera muy divertida.

Fue sencillo, ya que los primeros 2 meses tuve que dejarla con las ganas múltiples veces, sabiendo cómo es ella, se enojó mucho, aunque no se quejó, ya que sabía que era su culpa.
Aún así, nunca estuvimos separadas, los momentos que mantuvimos juntas, aunque fueran mínimos y de corto periodo, los supimos sacar valor hasta la última gota.

Mi objetivo de quedarme embarazada nunca se esfumó.
Y de alguna forma u otra, quería sorprender a Freen con aquel emocionante momento que nos uniría a ambas aún más.

No podía imaginarme de una manera mejor.
Sosteniendo entre mis brazos a mi pequeña criatura, mientras Freen acariciaba su diminuta cabecita con una mirada cargada se emoción, que gritaba amor en todos los sentidos.

Aunque no fue un recorrido fácil, ya que únicamente dejó 6 de sus óvulos en aquella clínica médica de uso privado.
Los intentos de quedarme en cinta empezaron a las pocas semanas en las que Freen entró en prisión.

Todos aquellos intentos fracasaron estrepitosamente, sin resultados, no pude quedarme embarazada con los últimos 4 óvulos.
Quise rendirme, puesto que mis estados de ánimo andaban por los suelos.
No podía tener a mi hermosa pelinegra junto a mí lado, ni tampoco servía para quedarme embarazada de vuelta.

Algo que me hizo temer, fue mi estrepitoso aborto intencionado por culpa de Non.
Sabiendo que la posibilidad de que fuera estéril era muy alta, las emociones nunca se esfumaron, ya que al hacerme la prueba, todo marcaba con tick verde, por lo que la posibilidad aquella era prácticamente mínima.

Volviendo al presente, aquí y ahora.
Alentada por mi madre, a no rendirme nunca en mis propósitos, decidí intentarlo una última vez para sacarme de dudas, durante más de 2 semanas, la culpa carcomía mis venas y las enrojecía de un rojo vívido y flameante.

Así que decidí probar suerte por última vez, momento en el que ahora, tras 1 semana después de la inseminación artificial, me encontraba hecha un manojo de nervios frente a aquella prueba que decidiría entre dos grandes sentimientos.

La felicidad máxima, tener una criatura de vuelta, entre mis brazos, sin la culpa inmensa de saber que ese bebé fue el gran proyecto entre el amor de 2 mujeres que se amaban, y que eso las uniría aún más.

O en cambio, la tristeza y todos aquellos sentimientos negativos, sintiéndome tan penosa por no poder realizar el gran sueño de ambas. Un simple fallo, y todo mi mundo se vendría abajo.

Mi madre me sacó de mis pensamientos, tomando el test aún sin resultados, entre sus manos.

-Debes estar tranquila, mi amor, verás que sale un hermoso positivo- sonrió entre dientes.

-No estoy tan segura mamá... Durante 1 año y 7 meses he intentado por todos los medios quedarme embarazada sin resultado alguno... Mis esperanzas son casi nulas- susurré en un estado de letargo.

-¡Ese no es el pensamiento, hija!- exclamó sorprendiéndome.- Tienes que ser optimista, no por ese bebé que posiblemente se desarrolla en tu interior, si no por tú hermosa prometida, quién espera impacientemente salir para poder verte- suscitó en tono de optimismo.

-Tienes razón... Seguro que es un positivo, no voy a darme por vencido- sonreí tiernamente.

Los minutos restantes fueron una completa tortura para ambas, esperando aquel resultado que parecía nunca llegar, no hasta que mi madre tomó con rapidez el test, sin dejarme mirar.