Mi oscuridad favorita | FreenBecky (+18) || TERMINADA

14. El pasado duele

Los días fueron avanzando, así como también mi relación con Freen fue floreceriendo como así nuestras muestras de cariño se mostraban cada vez más.

Con el pasar de los días, estábamos más juntas, a raíz de ello, mi comportamiento y sentimientos hacia ella iban cambiando, sabía que iba a acabar mal.

Lo mismo me pasó con Irina, comenzó todo de una hermosa forma, acabando en una ruptura tan dolorosa que me hizo creer que el amor no era para mí.

Veréis. Irina fue mi primer y único amor, la conocí a inicios de secundaria.
Era una muchacha de nacionalidad española, que se había mudado hace poco a a Inglaterra junto a su familia.
Me fleché de ella al primer instante que la vi.
Rubia de estatura alta, rasgos occidentales, ojos claros como el mar, con un cuerpo muy atlético.
Fue un trabajo difícil poder llegar hasta ella, puesto que no le gustaba socializar, a diferencia de a mí, que continuamente conversaba con aquel que se me cruzase.

Gracias a un golpe de suerte, ambas fuimos emparejadas para realizar un trabajo en conjunto, momento que aproveché para poder acercarme más a ella, conociéndola mucho mejor.
Mi corazón, directamente supo que ella estaba destinada a estar conmigo, era una chica avariciosa y lo sabía, por lo que, no dudé en intentar conquistarla.

Una noche de ensueño, en la que la invité a cenar a mi casa, conociendo a mis padres, confesó que siempre había estado enamorada de mí, mi corazón sufrió un gran alivio al saber que ambas sentíamos lo mismo, mi primer beso fue justo debajo de la luz de la luna con ella.

Pasaron los días, semanas, meses y años.
Ambas teníamos 18 años, por lo que estuvimos saliendo por 4 largos años, hasta que me enteré de la peor forma de su infidelidad.

Era nuestro aniversario, hacíamos 4 años desde que la pedí salir aquel día bajo la hermosa luna que hizo de testigo, del gran amor que tenía por ella.
Me preparé durante toda la mañana con gran ilusión, compré sus chocolates favoritos, un hermoso ramo de flores, haciendo una reserva en el mejor restaurante de la ciudad.

Sabía que ella estaba ocupada con sus estudios, por lo que quise sorprenderla, fue una buena idea, llegar a su casa a modo de sorpresa, fue una de las mejores ideas que pude pensar.
Los nervios me carcomían por dentro, quería que fuera un día perfecto, mi corazón iba a salirse al mismo momento que abrí la puerta de su casa, sabía que guardaba una llave debajo de la alfombrilla.

Entré en silencio, escuchando a lo lejos unas risas vergonzosas, al unisono que escuchaba suspiros y gemidos.
Mi mente no pudo reaccionar, no quise pensar en algo racional, entré a su cuarto con rapidez y algo de brutalidad.

La pillé acostándose con un tipo de su universidad, mi mundo se cayó en ese mismo instante. Quise recriminarla, insultarla, pero mis palabras no quisieron salir.
Mis lágrimas no tardaron en salir, Irina se giró para mirarme, su rostro demostraba gran arrepentimiento, pero el de aquel tipo no, mostraba supremacía e incluso mamarracheo.

[Recuerdo de Becky]

-I...Irina, ¿qué crees que haces?- pregunté afligida.

-Amor... yo, ¡puedo explicártelo, no es lo que crees!- rápidamente se tapó con una manta, acercándose hasta mi lado.

Tomó mi mano, a lo que rápidamente yo, se la aparté de manera brusca.

-¿Qué no es lo que creo?- pregunté riéndome.- Pensaba que me querías Irina, pensaba que al menos te importaba algo, y que no terminarías siendo como todos- mi voz poco a poco iba cortándose a medida que mis lágrimas iban aumentando.