Capitulo 8

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Eleana

Ya en la escuela junto con Samara, varias chicas las cuáles iban muy bien arregladas, relucientes y casi perfectas se acercaron a ella para charlar, todos querían un poco de la atención de Samara, me sentía un poco fuera de lugar cuando eso pasaba.

—Elana, te estaba buscando— mi salvador Criss.

—Criss— dije saludándolo—¿ya tienes tiempo aquí?

—Hace como 10 minutos llegue— ambos caminamos a nuestros casilleros— vamos— nos dirigimos al salón de clases.

Al pasar 6 minutos al fin llegó Samara la cual estaba rodeada de chicas preciosas y pude escuchar un poco de su conversación.

—Hay un nuevo chico, se llama Tom, recién lo conocí ayer y es un guapo!— dijo moviendo las manos con exageración— además creo que es famoso y toca en una banda, eso no importa tanto pero seguro tiene mucho dinero— todas empezaron a gritas en un tono moderado, no podía creer que de verdad Samara quisiera algo con Tom.

—¿Crees que te haga caso?— dijo una chica con duda.

—Obviamente si, ¿no ves con quien hablas?— hizo una cara de desagrado, Samara a veces podía ser un poco... ¿pick me?

—Cierto, lo siento— dijo la chica bajando la cabeza.

—Okey chicos, todos a sus asientos— dijo la maestra dando inicio a la clase.

(...)

—te diría de ir por un helado pero de nuevo tengo que ayudarle a mi madre— dijo Criss— ¿mañana al final de la escuela vamos?

—Si claro, mañana— ambos nos despedimos y Criss se fue.

Estaba a la espera de Samara ya que iría a mi casa, en cuanto pude sentir a unas manos muy familiares siendo apoyadas por detras en mi cintura uniendome a su cuerpo, era Tom.

—Hola dulzura, ¿me extrañaste?— susurro en mi oído, no esperaba que viniera a mi escuela, jamas le dije donde estudiaba ¿o si?

—¿Qué haces aquí?— voltee para toparmelo de frente — no sabía que vendrías.

—Mmm, estaba dando una vuelta y no resistí el venir por ti— dijo con una sonrisa.

—¡¡Tom!!— pude escuchar esa pequeña voz muy conocida, Samara.

Llego corriendo a brazos de Tom, empujándome y aparatándome, sin vergüenza alguna lo abrazo, Tom permaneció quieto, se miraba incómodo, volteó a verme pidiendo ayuda.

—Samara, démosle un poco de espacio a Tom— dije separándola ligeramente intentando no verme grosera.

—Tom no sabía que tenías tantas ganas de verme— comenzó a juguetear con su cabello.

—Ahhh, en realidad vine a ver a Eleana— maldije en mi interior esperando la reacción de Samara.

—Ah — dirigió la vista hacia mi, escaneándome de arriba hacia abajo con cara de desprecio, realmente comenzaba a caerme mal— seguro pueden reprogramar lo que tenían que hacer y puedes salir conmigo— comenzó a hacer berrinche sin dejar de mirar a Tom, sujetándolo del brazo y agitándolo un poco.

—Lo siento, no lo creo...— dijo Tom, ya bastante incomodo.

—Te veo en mi casa Samara— Tome a Tom de su brazo libre y lo jale junto a mi, ambos comenzamos a caminar agradeciendo el fin de esa situación.

(...)

—A esa chica Samara le gustas, lo sabes ¿cierto?— dije mientras Tom tenia la vista fija en el camino, iríamos a su estudio ya que tenía que practicar con los chicos,

Junto a ti | Tom kaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora