Capitulo 13

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Tom

—Eleana— tenia tanto miedo, mis manos temblaban un poco, no sabía que decir, a pesar de que lo repase tantas veces, tenerla frente a mi, su simple presencia alteraba todos mis sentidos— quiero explicarte todo, al menos lo que recuerdo...

—Se rápido Tom, no tengo todo el día— simples palabras dolían como los mil demonios, su tono tan cortante, lo cague todo y no se como solucionarlo, ni siquiera se porque o como paso todo, los recuerdos borrosos de la fiesta nublaban mi mente.

—Ayer... no tengo idea de qué pasó, Criss me aclaro un poco las cosas pero de verdad no tengo idea de porqué lo hice, jamas te lastimaría y...— me interrumpió.

—¿Jamas me lastimarías, estas seguro? Recuerdo haberte visto ayer junto a una chica, muy agustos besándose, sin importarte mi simple presencia, creo que eso es suficiente para lastimarme Tom— estaba tan molesta y con razón, pero no entiendo ni yo mismo el porqué lo hice.

—Eleana, no se qué pasó, todo estaba bien y simplemente todo comenzó a distorsionarse, sonara tonto y estupido pero juraba que tú eras la chica— mi voz temblaba, jamas me había pasado nada igual, este nerviosismo en mi cuerpo, en mi voz.

—Si suena estupido Tom, si eso es todo...— no podía ser todo.

—dame una oportunidad Eleana, por favor, solo te pido una, entiendo que estes molesta conmigo, yo mismo estoy molesto conmigo pero de verdad te amo, te amo con todo mi ser, cada vez que te veo no puedo evitar sonreír, esta sensación de alivio cuando estoy contigo... por favor— parecía pensarlo, cruzo sus manos y al fin bajo sus gafas de sol, dándome acceso a esos hermosos ojos que me hipnotizan.

—Yo me sentía de la misma manera Tom, pero créeme que de verdad no dejo de repetir esa imagen de mi cabeza, no esperes que por un pequeño discursito todo este bien porque no será así, si eso es todo ya me voy— pude sujetarla del brazo antes de que comenzara a caminar, dolía tanto verla de esta manera conmigo pero estaba en todo su derecho y no merezco menos que esto.

—Déjame llevarte a tu casa— era lo menos que podía hacer, quería seguir rogando por su perdón pero simplemente seria una perdida de tiempo, debo dejarla pensar las cosas y esperaré lo que tenga que esperar, sin dejarla contestar nos dirigimos al coche, parece que el picnic no resulto tal como esperaba, Bill tenía razón, no sería fácil.

Entro al coche y cerré la puerta del copiloto enseguida yo subiendo del lado del conductor, durante el camino luchaba con la necesidad de poner mi mano en su pierna como de costumbre, unir nuestros labios para que encajaran a la perfección, sentir sus manos en mi rostro, todo eso no estaba y seguro tardarían un tiempo en regresar... si es que lo hacían.

Al llegar a su casa se bajo sin decir una palabra, quería correr detrás de ella y repetirle cuanto la amo y cuanto la necesito en mi vida, era todo para mi, jamas había llegado a amar tanto a una chica como a ella, jamás había amado a una chica, todo se basaba en las noches juntos pero con ella todo cambio, llego a mi vida y todo mi mundo dio vueltas por ella, ella era mi tierra y yo su fiel seguidor... la luna.

Eleana

Note como Tom permaneció fuera de mi casa unos minutos mas después de que me baje, no sabía como tomarme todo esto, sus palabras sonaban tan sinceras, el hecho de no poder abalanzarme contra sus labios, sentir sus manos tocar como de costumbre, sonaba tan sincero pero no sería así de fácil, primero debo descubrir que fue lo que realmente paso en la fiesta, y ya se con quien obtener respuestas.

Llame a Criss, sería mi cómplice.

—Hola Criss— contesto al instante.

—¿Todo bien— sonaba preocupado, seguro se preguntaba que paso con Tom.

Junto a ti | Tom kaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora