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El día estaba muy bonito, y ambos chicos estaban con un gran humor.
A pesar del dolor de trasero enorme, gigantesco que Jisung tenía, se sentía muy bien y con energías mayores a las comunes que tenía diariamente.
Minho estaba más que feliz; había tenido una increíble y por sobre todo muy especial noche. Haber sido la primera vez de su Jisung lo tenía muy contento.
Ahora cocinaban juntos el almuerzo, y se abrazaban constantemente en busca de saciar sus aún necesitadas bocas.
Jisung estaba recargado contra el lavaplatos, mientras Minho le comía los labios con hambre.
Mientras el arroz recién se cocinaba, Han envolvió sus brazos en el cuello de Lee para tenerlo cerca.

—¿Te sigue doliendo?

—Un poco mucho. —Rió, recibiendo suaves besos en su cuello.

—Si quieres te sobo con mi-

—¡No!

—Mano, Hannie. —Soltó una carcajada. Jisung le pegó.

—No sabía que tú aparato reproductor era una mano.

Estuvieron riendo por un rato, antes de continuar con la cocina.
Después de haber almorzado Minho fue a dejar a Jisung a su casa, pues más tarde a la noche sería la gala y tenían que enlistarse para eso. El menor tenía sus maquillajes allá y claramente todo allá, y habían quedado en un acuerdo que sería sorpresa el resultado final de ambos con trajes elegantes.

[...]

Cuando Han llegó a su casa, fue al baño de su habitación para bañarse tranquilamente y sin apuros.
Se hundió en el agua caliente que llenaba la tina, y no pudo evitar tener un flashback de lo que había hecho con Minho en la noche. Sus mejillas hirvieron pese a que ya lo hacían por estar sumergido en agua caliente, pero aún se sentía tímido por haber sido su primera vez. Como si recién hubiese perdido la virginidad, que básicamente en parte era cierto.
Después de asearse y preparar su rostro con un par de cremas, se hizo las cejas para delinearlas bien. Con una hoja de gillette se cortó los bellos que sobresalían de sus cejas, que no eran muchas pues siempre se perfeccionaba eso.

Luego de finalizar con eso, fue a su armario tomando un paquete el cual tenía su amado traje. El pantalón y el blazer de color burdeo, y este era corto llegándole hasta la cintura, por lo que le hacía relucir lo pequeña que era. Por último, su corbata de lazo negro. Llevaba una camisa blanca, y de zapatos llevaba unos Dr Martens con 4 centímetros de plataforma, de caña corta; recordaba cuando Minho lo molestaba diciendo que eran zapatos Coquette.
Cuando ya tenía todo puesto, aún no quiso mirarse al espejo, y es que faltaba lo más importante para él que era el maquillaje.
Se delineó sutilmente el contorno inferior del ojo con negro, y se aplicó sombra en los párpados. Trató de que no se viera muy cargado, algo más o menos natural.
Ya estando listo fue al espejo, sonrió contento y más que conforme y satisfecho por lo jodidamente guapo y atractivo que se veía. Solo esperaba poder cautivar la mirada de Minho.

Por otro lado, Minho ya estaba casi listo.
Después de haber dejado a Han en su casa, fue a una peluquería para cambiar su duradero color morado. Se quitó el tinte y pidió color castaño oscuro.

Decidió ir con un traje de terno clásico negro, pero con prendas extras que lo hacían lucir más. Se puso un chaleco sin mangas ajustado que era de la misma tela que el blazer solo que de un gris grafito. Y llevaba una corbata larga; ya se podía imaginar a Jisung tirándolo de esta para poder besarlo.
Se maquilló muy sutilmente, solo se oscureció ligeramente el contorno completo de sus ojos.
Se aplicó perfume en zonas estratégicas y por último se puso en la muñeca un bonito reloj con correa de cadena.

Salió de su departamento poniéndose un abrigo largo y se subió a su auto para ir rumbo a la casa de Jisung.
Cuando llegó se sintió nervioso; ver al menor con ropa formal y que sea su pareja en la gala le hacía pensar muchas cosas a la vez. Sin duda alguna estaba feliz, seguía sin poder creer al cien por ciento que se gusten mutuamente. Todo pasó de una forma tan espontánea que aún se sentía perplejo, pero estaba teniendo los mejores días de su vida que nunca pensó que viviría, pero que en algún momento los anheló demasiado.

The boy is mine. [Minsung] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora