Kim JongIn

402 45 3
                                    

La noche siguiente, estoy luchando a muerte contra Lay en un intenso juego de Ice Pro cuando Suho entra en la sala de estar sin camisa y descalzo. Se pasa una mano por el pelo rubio y de punta, antes de ponerse cómodo en el sillón que hay junto el sofá.

—Escucha, necesito hablar contigo de
tu estudiante de primero.

—¿Qué estudiante de primero? — Lay suelta la pregunta mientras sus ojos permanecen pegados a la pantalla. Los míos hacen lo mismo.

—¿Te refieres a Kyungsoo? —le digo ausente. Mi equipo está pateándole el culo al de Lay, probablemente porque el idiota se niega a jugar con nadie que no sea Dallas, que ha sido eliminado de los playof  ¿cuántas veces?, ¿un millón de años seguidos?

Yo, por supuesto, juego exclusivamente con los Bruins de Boston, porque es el equipo con el que crecí, al que sigo desde niño y en el que siempre me he imaginado jugar algún día.

—Sí, me refiero a Kyungsoo. A menos
que haya otro estudiante de primero a la
que hayas llevado al cine y le hayas estado succionando la boca toda la peli.

—El comentario de Suho rezuma Le doy al pause en el juego para tomar un sorbo de mi Coca-Cola. Sí, Coca-Cola. Todavía estoy haciendo un esfuerzo para rebajar el ritmo de fiestas. Bueno, eso y que mi primer examen es mañana y no quiero aparecer con resaca.

—Yo no lo he llevado al cine — respondo—. Nos encontramos con ellos allí, ¿recuerdas?

—Oh, vaya que si lo recuerdo. También recuerdo la parte de la succión de boca. En serio, hermano, cada vez que me daba la vuelta, le estabais dando como si fuerais estrellas porno.

Menos mal que no le he contado lo que hicimos en el armario. Probablemente no habría parado de hacer comentarios.

—Espera un momento, ¿estás saliendo
con uno de primero? —La expresión de
Lay es ilegible, pero estoy bastante
seguro de escuchar cierto tono de alivio
en su voz.

—Naah, no estamos saliendo.

—Mejor —dice Suho, asintiendo enérgicamente—. Esas chicas y donceles tan jóvenes son demasiado dramáticos. Lay se ríe.

—¿Dramático? ¿Así es como llamamos ahora a Bethany? Porque eso no es drama, tronco. Eso es ACOSO en toda regla.

—Fue un coñazo, eso es lo que fue —
murmura Suho—. Y muchas gracias por
recordarme lo de esa tía. Esta noche voy a tener pesadillas. Cabrón.Resoplo.

—No te preocupes. Kyungsoo no es así.
Nada de dramas con él.Precisamente, esa es una de las razones por las que me siento tan atraído por él. Es el chico más sencillo que he conocido jamás. Además, cuando estoy con él, no pienso en Minseok en absoluto, lo cual es…

¿Así que lo estás utilizando para no pensar en Minseok? La acusación vuela en mi cabeza como un equipo de hockey a la ofensiva. No. Por supuesto que no lo estoy
utilizando.

¿Lo estoy haciendo? ¡No! Eso es una locura. Me gusta Kyungsoo de verdad, y joder, ME FLIPA enrollarme con él. Pero… es cierto que sirve de gran distracción de toda la movida de Minseok.

¿Una gran distracción? Dios de mi vida. Soy un puto cabrón. Mientras la culpa inunda mi
estómago, de repente asimilo la cabronada irrefutable que he hecho. Y en ese justo instante, me doy cuenta de que no puedo ver más a Kyungsoo.

¿Cómo podría, cuando una parte de mí lo ve como una DISTRACCIÓN? Cuando todavía experimento ese horrible nudo en mis entrañas cada vez que veo a Chen y a Minseok juntos… Cuando todavía estoy consumido por la envidia y la ansiedad y tanto odio hacia mí mismo.

Le envié un mensaje a Kyungsoo con mi
número antes, y estaba pensando en preguntarle si quería salir mañana por la
noche, pero ni de coña puedo hacer eso
ahora.

He podido ser un cabrón por usarlo como diversión de forma no intencionada, pero ahora que soy consciente de mi CABRONADA, me niego a dejar que continúe. No sería justo para Kyungsoo.

—¿Nada de drama? —repite Suho, sacándome de una sacudida de mis pensamientos problemáticos—. Sí, siento decírtelo, pero el tren del drama ya ha salido de la estación. Eso es justo lo quería decirte.
Frunzo el ceño.

—¿De qué estás hablando?

—¿Sabes quién es Yehun?

Lay resopla.

—¿De verdad hay que preguntar eso?

TODOS sabemos quién es Yehun. La arruga de mi frente se hace más profunda, porque si Yehun está involucrado en lo que Suho está a punto de decir, significa que no va a ser bueno.

Yehun es el «conejito» número uno, el hincha de hockey perseguidor de jugadores mayor del reino. También está la hostia de bueno, por lo que la mitad de los chicos de nuestro equipo se han acostado con el.

Logro del que, por cierto, está increíblemente orgulloso y feliz, y no tarda en anunciar a los cuatro vientos. Desde luego, yo no tengo ningún problema con eso.

Cada vez que escucho a alguien referirse a el como un puto, amenazo con soltar una hostia porque, ¿qué coño?, la mayoría de los tíos que conozco han follado a diestro y siniestro en su paso por la universidad y nadie pestañea CUANDO lo hacen.

Así que, no, no voy a juzgar a Yehun por su
vida sexual increíblemente activa. Pero con lo que sí que tengo un problema es con el hecho de que él es un capullo integral, que propaga rumores horribles y más cotilleos que una revista del corazón de Hollywood.

—He estado por ahí con Niko esta tarde y me ha dicho que Yehun ha estado soltando mierda sobre tu chico de primero —dice Suho con rotundidad. Mi columna se pone rígida.

—¿Qué?

—Sí, al parecer, el hermano pequeño de Yehun es amigo de Kyungsoo, y supongo
que Kyungsoo le contó lo de vuestro lío.
Pero, por alguna razón, el hermano piensa que está fardando de algo que no es verdad.

—¿Me lo estás preguntando o me lo
estás contando? —pregunto.

—¿Ambas cosas? No lo sé. He renunciado a tratar de entender las complejidades de los donceles.

—Vaya novedad —dice Lay con tono solemne. Suho hace un ruido ronco en el fondo de su garganta.

—Todo lo que sé es que Yehun está soltando por ahí que un patético estudiante de primero miente al contar que se ha liado contigo, algo que es obviamente absurdo ya que he podido disfrutar de un asiento en primera fila de vuestro rollo ayer por la noche, ya sabes, cuando tu lengua se puso a intentar pescar manzanas en la parte posterior de su garganta…

—El cine estaba lleno de estudiantes de Briar. Si nos viste tú, estoy seguro de que otras personas también lo hicieron.

—Oh, claro que te vieron, amigo.

—Entonces, ¿por qué hay gente que se
cree la mierda que está soltando Yehun?
No es que estuviese intentando ocultar
nada.

—Tronco, si uno cuenta trolas con seguridad, la gente se las cree. —Se encoge de hombros—. Bueno, yo solo pensé que debías saber que Yehun está haciendo de Yehun una vez más.

También está tuiteándolo todo; eso dice Niko. Ha creado un hashtag bastante cruel sobre tu chico.¿QUÉ? Pillo mi teléfono de la mesa de centro y abro mi Twitter.

—¿Cuál es el hashtag?

—Ni idea. Estoy seguro de que lo verás si te metes en la cuenta de Yehun.

Escribo rápidamente el nombre de Yehun en el cuadro de búsqueda, hago clic en su perfil y empiezo a leer los primeros diez o doce tuits de la página.

Cada uno de ellos provoca que la ira en
mi interior se temple, se caliente y hierva, hasta que finalmente se desborda y hace que me ponga de pie,tambaleándome, de pura indignación. Dios. No puede ser.

Hay no ya la va a cagar JongIn.

Gracias por leer y sus estrellitas.

Nos leemos en un rato.

💋

Tu y yo (Kaisoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora