Capítulo 17

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Capítulo 17

La pesadilla no acaba, es tan tormentosa como cuando estuvimos en el colegio. Will sigue fastidiándome la vida, ya hasta creo que le voy a decir sus cuatro cosas en su cara. Ya me tiene cansado y no necesito más estorbo. Necesito paz, armonía.

Phill y yo nos vamos a nuestra habitación y nos repartimos el pastel que el idiota me regalo. Al menos tenemos algo en el estómago, ya mañana nos toca comer en el comedor y nos darán un carnet de identificación para usar las instalaciones de la facultad. Hay mucha gente interesante y se ven buena gente, solo espero que ninguno sea gay y que no me obstinen la paciencia. Además, debemos conocer al entrenador y cuadrar los horarios para la práctica.

—Britt vendrá el próximo mes, ya quiero verla —comenta Phill en voz de enamorado. Al menos me contenta que tenga alguien a parte de mi con quien charlar, no suele ser muy sociable no porque no le guste la gente, sino por su personalidad y timidez. Debo decir que, aunque él sea así, es más valiente que yo.

Bajamos a una cálida bienvenida y me escondo con un suéter de capucha para que nadie me vea. Paso inadvertido por un grupo de chicos y luego veo a otro grupo en donde está William conversando con los demás, hay una mezcla de chicos. Ojalá que se enamore de un chico y me deje tranquilo. Lo deseo con toda mi alma.

Nos sentamos en el césped y saco mi celular a ver qué hay de bueno en las redes. Mi ex novia monta fotos con su novio y se ven felices juntos. Me da un remordimiento en el corazón porque una vez sentí algo por ella muy fuerte, pero es como si desearía que fuera una amiga para no sentirme tan solo.

Voy pasando las imágenes y veo el Instagram de Scott. Está lleno de seguidores, me gusta y otras cosas. En las publicaciones de abajo veo que sale con un tipo alto y rudo como él, supongo que son compañeros de equipo. Después hay otra publicación en la que sale con un chico delgado, Scott le besa la frente y en la descripción coloca: " Así es el amor"

—Idiota. Ya sabía que tenía un novio, maldito imbécil —comento en voz átona.

Phill se me queda mirando y ve lo que estoy observando. Después se empieza a reír y me da un trago que agarro no sé de dónde, y está buenísimo.

—¿Estás celoso? ¿Tú? Eso es nuevo.

—No estoy celoso. Solo estoy viendo.

—Cris, te conozco desde siempre y créeme que jamás te había visto así.

—Solo estoy molesto, si te soy sincero. Voy a dormir, no quiero seguir aquí.

—Hey, Cris —es William—. Quédate, prometo portarme bien.

—No estoy de humor.

—No te creo. ¿Quieres algo?

Niego con la cabeza. Will toma mi mano y no me lo suelta.

No me deja ir y vamos hacia dónde están sus nuevos amigos, que son menos tontos que los anteriores. Phill se dispone a verificar sus redes sociales ignorando al resto de las personas.

—Obviamente.

Sigo bebiendo y bebiendo y bebiendo...

Macho pecho peluo © (BORRADOR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora