Capítulo 26

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Mia

Estaba esperando que todas se fueran para salir tranquila y encontrarme con Sam, no creo que sea buena idea que nos vean juntas y se vuelva a generar el rumor, sabiendo que ahora sí era real. Y estaba claro que aún no sabía definir lo que sentía o no por ella, pero me hacía latir el corazón más rápido de lo habitual, sonreír sin poder evitarlo y querer saber de ella cada vez más.

Solo quedábamos en el vestuario Sofía, Helana Y Rachel, que después de su incidente en la última competición solo iba a venir a los entrenamientos para hacer rehabilitación con Sam.

- ¿Cómo sigues de tu lesión, Rachel?.- Pregunté con amabilidad acercándome a ella. Quería empezar la temporada sin malos rollos y sabía por Helena que tenía algo dañado el menisco y que posiblemente la tuvieran que operar. Eso para una persona que ama este deporte es una verdadera putada.

- ¿A ti qué te importa?- inquirió algo agresiva- Espero que ninguna más se lesione, porque si tienes que salvar tú al equipo...Estamos apañadas.- escupió sosteniéndome la mirada sin ningún tipo de remordimiento.

Aún me sentía culpable por haber corrido tan mal en la última competición. Me pesaba, porque estoy segura de que Sofía lo podría haber hecho mucho mejor que yo en ese momento y porque soy muy exigente conmigo misma, pero eso no le daba derecho a la Pelirosa para hablarme así y más cuando me había acercado con buenas intenciones. Estaba a punto de saltarle al cuello pero Sofía se me adelantó.

- ¿Pero de qué vas?- Se le enfrentó como un perro rabioso. Yo tiré de su brazo para que no hiciera ninguna tontería. Verla tan alterada me bajó el enfado de golpe.- Eres escoria, Rachel.

Rachel rió con ironía haciendo calentar más a Sofía, la  estaba provocando con intención de que ésta actuara. Después de nuestro incidente se habían creado algunas normas nuevas, más estrictas, por lo que si una persona comienza una pelea será expulsada. Tiré con más fuerza de Sofía. Helena estaba pegada a las taquillas observando con cierto nerviosismo, se notaba que no le gustaba enfrentarse a estas situaciones.

- Si fuera Samantha, te hubiera expulsado del equipo hace tiempo.- Se acercó más a Rachel alzando el tono de voz, tenía la vena de la frente hinchada. Sofía era una persona con carácter, eso estaba claro.

- No me ha echado y ahora me está ayudando con la rehabilitación.- señaló su rodilla con una sonrisa irónica. Lo mismo le gusto.- esto último lo mencionó mirándome únicamente a mí.

Tiré de Sofía poniéndome yo ahora frente a Rachel.

- Lárgate y deja de escupir veneno.- cada músculo de mi cuerpo estaba en tensión, ahora era Sofía la que tiraba de mí con preocupación.

Le hubiera dicho muchas más cosas pero me las estaba tragando para no darle lo que buscaba.

- Adiós, trío de inútiles.- murmuró por lo bajini y se largó del vestuario dejándonos a las tres con la cara desencajada.

Helena suspiró con fuerza, como si llevara un rato sosteniendo la respiración.

- Por fin se ha ido.- añadió más tranquila.

Sofía le dedicó una mirada que no conseguí descifrar a su mejor amiga.

- Vámonos de aquí.- dijo Sofía dirigiéndose hacia la puerta seguida por Helena que iba un poco cabizbaja.

- ¿No vienes, Mia?- preguntó Helena con preocupación, supongo que seguía en tensión por el rifi rafe con Rachel.

- No, necesito un momento a solas.- respondí con una sonrisa de lado.

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