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NARRA JUNGKOOK.
Gracias al dinero que había conseguido ahora tenía un apartamento bastante grande y había comprado un vehículo. Mi secretario volvía a trabajar para mí, casi lloraba cuando le pedí que volviera a ayudarme, él se preocupó bastante cuando tuve que pedirle que dejara de trabajar conmigo porque no podía pagarle.

Ahora volvería a invertir en otras acciones que había en aquella lista, aunque no solo yo, ahora todos mis amigos estaban invirtiendo en los mismos lugares.

Adentro mi vehículo en aquella enorme casa recibiendo miradas de los chóferes que había allí. No sabía que el ticket que le regalé a ________ era para dos personas, pensaba que tenía que ir sola pero me había invitado a ir con ella.

Esto se sentía como una cita, incluso teníamos que arreglarnos porque el lugar era bastante exclusivo.

Apago el motor para salir de mi coche nuevo. Era la primera vez que compraba algo en mi vida con dinero propio, y se sentía bien poder decir que era mío.

Miro a mi alrededor esperando a que _________ saliera de aquella enorme mansión. Me había alegrado que a ella le hubiera gustado el regalo, aunque yo no estaba orgulloso de ello. Tal vez debería hacer algo más, pero no sabía qué podía ser.

Ella seguía superándome en todo.

— Es bonito... —me giro al escuchar la voz en mi espalda. Mis ojos chocan con su padre— El coche —lo mira— Me gustan bastante los coches —me mira— Y a ________ también.

Camina hacia mí. Me inclino en una reverencia. Él parecía frío y distante mientras me observaba sin escrúpulos. Ya le había visto muchísimas veces, pero era la primera vez que me hablan directamente.

— Mucho gusto, señor Moon —me mira— Soy Jeon Jungkook.

— Lo se, hijo —mira hacia la casa— Supongo que has venido a buscar a __________.

— Sí, vamos a ir a cenar —asiente mirando hacia mi ropa.

— Chico —señala mi corbata— La tienes mal anudada.

— Ah, lo siento, aún no me acostumbro a hacerlo solo... —llevo mis manos a ella.

— No la cambies —le miro deteniéndome— Ella se dará cuenta y lo hará por ti —bajo mis manos— Es una buena forma de que se acerque un poco —elevo mis cejas mientras él sonreía— __________ es una mujer increíble.

Aprieto mis labios mirando hacia la misma dirección que él. Tenía razón pero no solo era increíble, era perfecta en todo.

— Es preciosa... —me mira de forma fría— E-Es decir... —miro hacia el suelo— Lo siento, no estaba pensando —sonríe.

— ¿Aún no le has dicho que te gusta? —le miro. Niego con vergüenza.

Mierda, era su padre, y él parecía haberse dado cuenta. En realidad todos lo sabían, menos ella, y yo ya comenzaba a enloquecer.

— Me he insinuado... pero ella solo me ve como un amigo —comienza a reír a carcajadas.

— Siempre pensé que mi niña era un poco lenta para eso de los sentimientos... se parece a su madre —se burla— ¿Sabes cuántas veces me rechazó? Doce —abro mi boca— Sí, y una de ellas me golpeó con las flores que le regalé solo porque le daba vergüenza.

— Tal vez no le gusto —suspiro— Pero está bien... al menos no me aleja.

— __________ nunca haría eso —frunce sus cejas mientras cruzaba sus brazos— Mi hija tiene un gran corazón, pero no confía mucho en los demás —golpea mi hombro— Si le agradas es por que ve algo especial en ti, chico —me mira con sus cejas fruncidas— ¿Haces deporte? Incluso estás más fuerte que yo.

Elastic Heart  ©JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora