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Me incorporo pasando mi mano por mi pelo. Mi cabeza dolía, quizás por la cantidad de lágrimas que había derramado ayer en horas hasta que llegamos a este hospital.

Miro hacia la ventana. Jungkook estaba sentado sosteniendo documentos y carpetas a las que miraba con atención. Estaba herido y seguía trabajando. Miro hacia abajo, ¿Por qué estaba en la cama? Estaba segura que me había dormido en el sofá. Suspiro levantándome y acomodando mi vestido.

Él gira su rostro a mirarme.

— ¿Por qué trabajas en un momento así? —le abrazo dejando un beso en su cabeza, la cual deja sobre mi pecho cerrando sus ojos.

— ¿Qué es un momento así? Yo había venido aquí a trabajar —niego mientras miraba hacia la mesa.

— ¿Eso son dulces? —sonríe mientras me acercaba.

— Los trajo tu padre temprano... también te ha traído ropa —miro la bolsa al lado.

Saco un dulce y me acerco a él. Tomo asiento en aquella ventana también. Dejo mis piernas frente a mí para dejar mis brazos allí y mirarle fijamente.

— ¿Por qué me miras así? —sonríe cerrando la carpeta.

— Es que me alegro de verte —sonríe estirando su mano a mi cabeza— De verdad pensé que no volvería a verte —siento mis ojos escocer de nuevo— No sabía si quizás ese idiota te había hecho más daño.

— Estoy aquí —sonrío apoyando mi rostro en mis brazos. Mi corazón se sentía muy cálido— Así que no pienses más en eso —asiento— Me dejarán irme en un par de horas.

— Ah... —le doy una mirada triste— Entonces creo que debería avisar para que preparen mi vuelo de vuelta.

— O tal vez... —se levanta. Deja los documentos en la mesa y agarra un dulce de arroz para morderlo— ...podrías quedarte, ahora que he anulado las reuniones de hoy, para que paseemos por Okinawa —me levanto con una sonrisa.

— ¿Enserio? —asiente.

— Podemos marcharnos mañana, los empresarios a los que iba a ver me dijeron que entendían esto y que vendrían a Corea a verme cuando me recuperara.

Sonrío con ilusión corriendo hacia él para abrazarle. Estaba segura de que mis padres también se quedarían para pasar su aniversario en este lugar, y Jungkook había anulado su trabajo para tener tiempo también.

Era el primer viaje en el que estaríamos juntos, quería hacer demasiadas cosas aunque sólo estuviéramos un día.

***

El amigo de Jungkook se marchó en cuanto les dejaron salir del hospital. La policía no había puesto impedimento en que salieran del país gracias a los abogados de Jungkook, pero esos idiotas que los habían atacado pasarían un tiempo en el calabozo hasta el juicio.

Aunque no había visto a mis padres en todo el día ya que ellos habían hecho otros planes juntos, había disfrutado mucho con Jungkook. Había visto Tokio varias veces, pero hoy había sido más especial que el resto. Incluso las luces parecían brillar más.

— Sigo defendiendo la idea de que Tokio en invierno es mejor —sonrío cambiando la venda de su pecho.

— En primavera —le corrijo— Los cerezos están florecidos y todo es más bonito así.

— Pero en invierno todo está lleno de luces navideñas —deja sus manos en mis piernas a sus lados— Y hacen dulces en todas partes.

— No me vas a convencer —sonríe— Primavera y punto —le miro— Ya estás listo.

Elastic Heart  ©JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora