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-¿Qué es todo este bullicio? - la tía Loon habló en un tono más agudo de lo normal.

Esos chicos movieron todos los muebles de su sala de estar rechinando todo contra el suelo y ya la habían alterado.

Con su grito los seis se detuvieron en seco, mirándola con lo que parecía miedo.

La mujer los vió como un montón de niños atrapados haciendo algo mal, y no pudo evitar reír por la imagen mental de todos esos jóvenes como unos bebés.

- Haechanie va a bailar- respondió el chico de la silla de ruedas, del cual no se había aprendido el nombre.

La rubia miró con sorpresa a Haechan.

- Haechanie, nunca te ví bailar, ni siquiera me contaste que bailas- dijo la mujer-. Nunca me dices nada.

Haechan estuvo por contestar pero la voz de Hendery lo interrumpió.

- Pues Haechanie no era muy hablador, no me sorprendería- dijo, ganándose una mirada asesina por parte del castaño.

- Tranquilo, Haechan, yo lo golpeo- dijo XiaoJun, antes de acercarse lo suficiente como para dar un sonoro puñetazo en la pierna del pelirrosa, haciendo que este comenzara a quejarse y a frotar la zona.

Tanto Haechan como la tía Loon rieron por lo ridículo de la pareja.

- Pero bien, ya que lo mencionas, me quedo- dijo la mujer, y avanzó hasta sentarse en uno de los sillones, espectante a que Haechan comience su acto.

El castaño estaba ruborizado, una sonrisa tímida se instaló en sus labios, miró hacia sus pies.

Él no estaba acostumbrado a bailar frente a un público, le parecía suficiente hacerlo frente a su profesor de baile.

- Cuando quieras- dijo Loon, en tono alegre y casi cantando.

Haechan suspiró con nervios, repasó el rápido baile en su mente y rogó porque los movimientos le salieran al menos decentes.

Le alcanzó el celular a su novio, quien le dedicó un pequeño asentimiento al tomarlo.

- ¿Listo?

Haechan asintió una vez, cerrando sus ojitos.

Mark puso play.

De nuevo, la suave melodía del piano mezclada con la del chelo comenzó a sonar, acompañado de pasos de baile de Haechan, que impresionaron a los presentes.

Complejos y algo diferentes a la melodía de la canción, los movimientos eran bastante enérgicos, en la parte más lenta de la melodía, llegaban a ser hasta sensuales.

Sin duda el cuerpo de Haechan estaba hecho para bailar.

Inconsientemente, Mark había estado mordiendo su labio o relamiendolos durante los dos minutos que duraba la coreografía, totalmente encantado con el lindo y talentoso chico frente a él.

Al finalizar, Haechan permaneció en su lugar unos segundos más, respirando algo agitado, antes de alzar la vista hacia su público, quien aplaudió con ganas, haciéndolo reír.

- ¡Y eso me estuviste escondiendo todo este tiempo! - se quejó Taeil-. Lee Haechan, debería castigarte por haberte guardado semejante baile y tanto talento por todo este tiempo.

- ¡Taeil deja al chico! - lo calló Taeyong, quien rió por la infantil actitud de su novio.

Sin más que hacer, Haechan fue hacia Mark, quien lo acomodó sobre su regazo, besando su mejilla.

- Es hermoso- dijo, se notaba el encanto en su voz.

LOUD «𝐌𝐚𝐫𝐤𝐇𝐲𝐮𝐜𝐤»²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora