•Capitulo 12•

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Narrado por Pierce

Me despierto con el ruido de mi madre, que es insoportable por las mañanas y no me deja dormir en paz.

—¡Hijo!—dice muy escandalosa al entrar a mi habitación.

—¿Qué? Déjame dormir —le digo mientras me coloco la almohada en los oídos.

—¡¡Hace unas cuántas horas deberías de haber estado en el instituto, hoy son las reinscripciones e inscripciones y no fuiste!! —dice un poco alterada.

—Y qué, igual pasen todas mis materias, no me voy a quedar repitiendo y soy el mejor de mi clase. ¡Déjame dormir, voy mañana!

—Haces lo que te da la gana, estoy cansada de decirte lo que tienes que hacer. ¡PIERCE! ¡¡¡LEVÁNTATE AHORA MISMO!!!—dice gritando.

—Bueno, déjame dormir.

—Si no te levantas ahora mismo, te voy a enviar a un internado en Londres, y vas a quedarte ahí hasta que cumplas la mayoría de edad. ¿Me oíste?—dice ella gritando.

Mejor te levantas, hermanito, porque no quiero irme a un internado lejos de Elena y mis amigos. Así que levántate ahoraaaaaa.

—Cuento uno y llevar dos.

—Okey, Okey, ya me levanté —digo, levantándome de mi cama con mucho sueño y molesto. La verdad es que no quiero ir a un internado, no lo aguantaría y sin Elena me moriría.

—Bueno, así me gusta, hijito lindo. Te espero abajo, vamos a ir al instituto —dice y sale de mi habitación.

Mi madre es así de insoportable y cuando se le mete algo en la cabeza nadie se lo saca, ni mi padre la soporta, pero igualmente se aman. Nunca los he visto pelear en mis 17 años, pero no me importa. Y si fuera por ella, me enviaría lejos, solo porque no le hago caso, pero aún así la quiero y no querría irme de esta ciudad jamás.

La otra vez que estuve en casa de Elena, tuve que irme de prisa porque mi querida madre no me creyó cuando le dije que estaba en casa de Marcos. Ella llamó a casa de mi gran amigo y le dijeron que no estaba allí, así que tuve que inventar una gran mentira para hacer que mi madre me creyera y, bueno, funcionó; pienso mientras me doy una rápida ducha.

También estoy algo triste por lo que le dije a Elena, que solo somos amigos y no es cierto, porque apenas nos estamos conociendo y no quiero cometer una estupidez. Ella es muy especial para mí y no quiero romperle el corazón. Si Lucrecia dice tonterías y ella se las cree, luego quedo como un mujeriego. Tengo que hablar con Elena sobre Lucrecia y decirle que está un poco loca, que no le crea nada y que no quiero hacerle daño.

Si tú eres el culpable de decirle amigos, ey, eso es algo que tú te crees y también ella....Tonto

Me arreglo para ir al instituto, me pongo mi chamarra, cojo mi celular y me calzo los zapatos.

—¡Hijooo! ¡Muévete, no tengo todo el día! —dice mi madre apurándome.

—Voy —digo bajando las escaleras.

Me encuentro con mi mamá en la puerta porque el chófer nos estaba esperando. Subo al auto y luego entra mi madre.

—¿Y mi padre? —le pregunto.

—Se tuvo que ir a un viaje de negocios y por eso voy contigo al instituto. Él siempre va contigo, ahora me toca a mí —dice poniéndose sus gafas.

Me quedo en silencio y solos digo:'Okey'.

Mi papá es más agradable que mi mamá. Con él soy un libro abierto, pero con mi madre siempre me reprocha todo lo que hago y dejo de hacer, y también tiene esa loca obsesión de querer que me junte con Lucrecia. Pero, ¿qué más da? Es mi madre. Ella me manipula como una madre obsesionada por su hijo, pero a veces se pasa y no la aguanto.

Después de unos minutos, llegamos al instituto. Bajo del auto y luego mi madre.

—Wow, hacía tiempo que no venía desde el año pasado y ha cambiado mucho este instituto, dice sorprendida.

Dramática.

—Yo veo el instituto igual o peor que el año pasado —dije sarcásticamente.

—Ah, bueno, pues respeta a tu madre.

—Ok.

Ojalá vea a Elena.

—Voy a la dirección a hablar con mi vieja amiga Leonora, así que no te me pierdas y no te juntes con esos nacos, no sé por qué aceptan a esa gente pobre aquí. Este instituto es muy prestigioso.

Esto realmente es el colmo.

—Okey mamá, mira, a mí me agrada estar con las personas o como tú dices nacos. Sí, ya soy grande para que me digas con quién debo salir o no. —Le digo un poco molesto y me voy, dejándola hablando sola.

—¡Mira, Pierce!... ¡Pierce! No me dejes hablando sola, muchacho grosero. Te voy a quitar la moto y además no vas a volver a salir nunca más. —Dice alterada.

No le digo nada y me voy al campus.

Estoy cansado de mi madre, la verdad.

En ese momento veo a Marcos y se acerca.

—Ey bro, te estuve llamando y no me contestabas—dice.

—Hola bro —le digo—Estaba ocupado.

—Siempre estás ocupado... Cambiando de tema, no me digas que tu mamá te sacó de tus casillas jejeje, tu mamá es un caso perdido —dice.

—Sí, hoy decidió venir a reinscribir, ¿puedes creerlo? Mi padre era el que se encargaba de eso.

—Sí, pero es tu mamá y se preocupa por ti bro.

—Sí, demasiado.

—Ay ya bro, no te pongas así, oye, temprano vi a alguien — me dice.

—¿A quién?—pregunto intrigado.

—Oh, mira cómo cambia tu semblante jejeje.—me dice—Vii...aaa...

—Dime ya, bro—le digo algo desesperado.

—A la chica del restaurante¿te acuerdas? Estaba con Verónica es algo confuso—me dice.

—En serio, y todavía está aquí, voy a buscarla—le digo dirigiéndome a buscarla.

—Espera, bro, ella ya se fue con Verónica, ¿puedes creer que ella es su hermana? Me enteré hasta mañana y no podía creerlo.

—Sí, sí, ya lo sabía, Elena ya me lo había dicho.

—Ok, bro—dice —No sabía que se llamará así.

Luego de hablar con Marcos por un rato, me dirijo a pasear por los pasillos del instituto y me encuentro con mi mamá. El enojo se le pasó rápidamente después de hablar con la directora, así que ya me reinscribieron y estoy listo para empezar las clases el lunes. Después de un rato, nos fuimos a casa y mi madre no paraba de hablar sobre la fiesta que iba a hacer, diciendo que sería la mejor del año y muchas otras cosas más.

Llegamos a casa, me bajé del auto y me dirigí rápidamente a mi habitación porque mi mamá se vuelve insoportable con su parloteo y no quiero seguir escuchándola.

Me acuesto en mi cama y pienso en Elena, en aquella noche en la que fui a su casa y la asusté... me golpeó muy fuerte.

—Jeje—me río, recordando lo que pasó aquella noche.

«Necesito verla»

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Holissss✨🦋

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•Un amor incondicional•(En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora