⚠️Contiene escenas sensibles para algunos, se recomienda discreción.
La verdad se revela al cuestionar más allá de apariencias.
Mientras que los vampiros eran bien organizados con su sistema de jerarquías, los hombres lobo no la tenían tan clara. Entre los clanes vecinos siempre había problemas por el territorio y el poder, y eso terminó dividiéndolos y fragmentando su sociedad.
Silvana y Darius habían recorrido el mundo durante siglos, destruyendo a los clanes de hombres lobo dispersos que encontraban a su paso. Era pan comido.
La traba surgió al llegar a Esequiba, no esperaban que ese clan estuviera tan fuerte y unido. Se la estaban viendo negra en la pelea, pues el exceso de confianza de los vampiros comenzaba a jugar en su contra, a medida que la lucha se alargaba.
Darius se había vuelto loco al ver que podían perder. Nunca les había pasado eso. Fijó su atención en Aurora, la hija mayor de los alfas. Como era una lobata apenas, era un blanco fácil. La atrapó con la guardia baja, y clavó la espada de plata en su cuello, ni siquiera le dio tiempo de gritar. El vampiro soltó una carcajada satisfactoria al ver el cuerpo caer al piso.
El lobo alfa Luciano, horrorizado ante la mirada vacía de su pequeña, sintió una ira súbita que le nubló la razón. Se le fue encima a Darius, queriendo vengar a su hija a como diera lugar. Lo que siguió fue un combate feroz entre ambos líderes en la que el rey vampiro salió malherido, pero victorioso.
Denise estaba en lo suyo, despachando otros vampiros. Levantó la vista y allí vio a Silvana sosteniendo a su hijo pequeño, de apenas año y medio, en alto como si fuera un trofeo. Casi le da algo al notar que las puntiagudas garras de plata de sus anillos se hundían apenas en la carne del pequeño, cerca de la yugular.
—Tu hijo también morirá como el resto de tu familia —siseó la vampiresa con una sonrisa macabra.
Fue entonces que cayó en cuenta de la tragedia que acababa de sucederle a Luciano y Aurora. Había perdido demasiado aquella noche, sin embargo, proteger a su hijo era lo primordial y no podía dejar que esa sanguijuela le quitara lo único que le quedaba.
Aulló con desesperación y un coro le respondió, enseguida, una manada de lobos llegó y rodearon a Silvana en un círculo amenazante, gruñendo y enseñando los colmillos. Ella retrocedió perpleja al verse superada en número. Una de ellos actuó rápido y le arrebató el bebé de un zarpazo limpio, poniéndolo a salvo.
Cegada por la ira, Denise embistió a la reina de los vampiros, tumbándola. Abrió sus poderosas fauces y las cerró en la cabeza de la mujer. Otros lobos la despedazaron para que no pudiera regenerarse.
Con su sed de venganza aún insatisfecha, Denise dirigió sus pasos decididos hacia Darius. Lo localizó al borde de un claro del bosque y se lanzó silenciosa sobre él, pidiendo fuerza a la luna llena. La loba demostró su superioridad en la lucha y poco a poco fue acorralando al rey vampiro.
Aunque herido y sangrando, Darius no iba a dar su brazo a torcer tan fácil. En el momento que Denise se le tiró encima de nuevo, ejecutó un giro ágil y la esquivó por los pelos.
Fue entonces que una figura pálida como la nieve surgió de entre los árboles. Se movió como un gato y se interpuso entre Denise y Darius.
—Nuestras bajas son demasiadas, no venceremos —susurró ella—. Es hora de retirarnos para volver más fuertes.
—La victoria es suya esta noche, pero esta guerra no ha terminado. Volveremos —advirtió él antes de perderse.
Pasaron muchos años, pero Denise no olvidaba esa primera gran batalla. Tras la muerte de Luciano, ella quedó como la nueva alfa del clan.
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Eterna Oscuridad: La vida después de la muerte ✔️
Paranormal🌟Historia Finalista Wattys 2023🌟 Sara nunca ha podido llevar una vida estable. Tiene pesadillas inquietantes y escucha voces que la atormentan. A pesar de todo, intenta vivir como una adolescente normal. Pero una noche es convertida en un ser de o...