Roptura

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"Deberiamos terminar." Esas fueron las primeras palabras que salieron de la boca del novio de Andrea.

"...¿Qué?", preguntó confundida.

Su novio la había llamado a una cafetería de repente para hablar, pero ella no espero esto...

El novio Andrea evito su mirada mientras volvía a hablar.

"Se que esto es repentino per..."

"¡Claro que es repentino", unterrumpió Andrea mientras veía fijamente el rostro de su novio.

Él continuó evitando su mirada, como si estuviera avergonzado de lo que estaba por decir.

Él respiró hondo antes de continuar.

"He estado reflexionando mucho sobre nuestra relación y siento que mis... "necesidades" no están siendo satisfechas. Sé que hemos hablado sobre esto antes y acepte esperar hasta que este segura de querer hacerlo pero no hemos encontrado una solución que funcione para ambos."

La boca de Andrea se abrió ligeramente ante las palabras de su novio.

"¿Me estas dejando porque no estoy lista para tener sexo?", preguntó sin rodeos.

Él asintió y Andrea soltó una burla de incredulidad.

"Realmente eres un cerdo..." Se levantó de su asiento y lo fulmino con la mirada.

"Si tan deseoso estás, ve y busca una prostituta. No quiero tener nada mas que ver contigo." Con estas palabras ella salió enojada de la cafetería.

Ella entendía que era normal que chicos de su edad quieran tener sexo con su pareja... pero ella aun no se sentía segura sobre eso.

Mientras caminaba por las calles, ella vio su reflejo en el cristal de una tienda.

Ella era hermosa, tenía un sedoso cabello rubio pálido y bellos ojos verdes.

...Pero su belleza no fue suficiente para hacer que su ahora exnovio esperara un poco hasta que ella se sintiera lista para hacerlo...

Ella soltó un suspiro de molestia y continuó su camino.

Mientras caminaba sacó su celular y le marco a su amiga para que se reunieran en su pub favorito.

Andrea llegó antes al pub y comenzó a beber sola mientras esperaba a su amiga, mientras esperaba muchos chicos intentaron hablar con ella, pero todos fueron alejados por la lengua afilada de Andrea.

Amelia, la amiga de Andrea llegó al pub y su unió a ella en la barra mientras platicaban.

"Entonces, ¿qué paso?"

"...¿Qué quieres decir?", preguntó Andrea a la defensiva.

Amelia suspiró y señaló la botella de vino a medio terminar que tenia Andrea.

"Es miércoles y me llamaste para beber, eso es raro."

"...Solo quiero beber con mi mejor amiga..."

"¿Es eso así?", preguntó Amelia con los ojos entrecerrados.

Ante la mirada de su amiga, los ojos de Andrea comenzaron a ponerse llorosos.

Amelia no sabia si era por el alcohol o si había pasado algo que hiciera llorar a Andrea... pero viendo como ella la había llamado aquí de la nada, supuso que fue lo último.

"Bueno... ¿qué paso?"

Andrea comenzó a sollozar mientras le explicaba a Amelia que había terminado con su novio.

Los ojos de Amelia se abrieron con sorpresa ante la explicación de Andrea.

Después de que Andrea terminó de hablar, le dio un gran sorbo a su copa y enterró su cabeza en la barra.

Amelia salió de su estupor y dijo:

"Tu y ese chico solo tenían dos meses saliendo, ¿verdad?"

"...Sí."

"¿Y ya queria tener sexo? ¿¡Esta loco!? ¡Hiciste bien en dejarlo!"

"...Pero yo no lo deje... él me dejo a mí..."

"Ah... bueno, son detalles, igual hiciste bien en separarte de ese animal."

"Hablemos de otra cosa..."

"¡Ah! Tu hermanito, él cumplirá 16 años pronto, ¿verdad? ¿Ya decidiste que le vas a regalar?"

"Ugh, no quiero hablar de Mikaela..."

"¿Qué? ¿Por qué?"

'¡Porque acabo de romper con mi novio y mi hermano es lo último en lo que quiero pensar!"

"¿Y por qué? Bueno... ¿cómo va tu proyecto de fin de semestre?"

Andrea levantó la cabeza y vio a Amelia con sorpresa y algo de molestia.

"Mi hermano y la universidad son de las últimas cosas de las que quiero hablar ahora", dijo mientras vertía el resto del vino de su copa en su boca y se servía más.

'Bueno, no tengo de que mas hablar, como dije antes, hoy es miércoles y no deberiamos estar bebiendo."

Andrea chasqueo la lengua ante la negativa de Amelia de embriagarse con ella.

"Si me hubieras llamado un viernes o sábado, tendría algo de que platicar."

Al final ellas conversaron de forma ociosa sobre temas de Internet y del trabajo de Andrea.

Media hora después, Amelia subió a Andrea a un taxi y le envió a su casa.

Ya era algo tarde pero no tanto, así que marcó a un número en su teléfono.

[¿Hola?] Una joven voz masculina habló del otro lado del teléfono.

"Hola Mika~"

[No me digas así, ¿qué quieres?], preguntó Mikaela del otro lado del teléfono.

"Eres muy grosero para alguien tan lindo como tú, justo como tu hermana. Hablando del diablo, la envié en un taxi a su casa."

[¿...Taxi? ¿Estuvo bebiendo?]

"¡Sip! La basura de su novio la dejo, así que se desahogo bebiendo"

[¿La volvieron a dejar?] Suspiro [Ya veo, gracias por cuidar de ella, la estaré esperando.]

"De nada~ Para eso estan las amigas, pero si te siente agradecido, ten una cita conmigo cuando seas mayor de edad."

[Claro claro] Con estas palabras, Mikaela colgó la llamada y Amelia soltó una risita mientras llamaba a un taxi para ella.

***

Parado afuera de una gran casa estaba un chico alto y esbelto de cabello rubio pálido con ojos verdes y un pequeño lunar debajo del ojo izquierdo.

Él estaba esperando a que su despechada y borracha hermana mayor llegara a casa.

Después de unos minutos, Mikaela vio a un taxi detenerse afuera de su casa.

Del taxi salió Andrea caminando con pasos tambaleantes, Mikaela se apuro a poner un brazo alrededor de su hermana y ayudarla a entrar a la casa.

Él le agradeció al taxista y cuando estaba por pagar la tarifa, descubrió que Amelia ya la había pagado.

Mikaela entró junto a su hermana mayor a su casa y cerró la puerta de la entrada.

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