La matriz de mis sentimientos carece de desviación, se ha propuesto a interpretar cualquier prospecto dignificador como el ápice de los malditos, como la consecuencia a ultranza del pecado y la resignación.
No le basta con conceder falacias a los que moran en la disyuntiva de la existencia y la perpetua salvación, sino que también asume muerta la esperanza de alguien que roto reside entre paladines azules.
Salvaguardar la doctrina de adeptos abyectos que trituran entre sus pantanosas mandíbulas peyorativas a los que ennegrecen su espíritu; no es sencillo inmortalizarse en el tiempo de los querubines de alas púrpuras.
Los vestidos lujosos acaecidos en el mismo averno para la dama de rubia cabellera, de ojos carmesí y de blanca piel; la que es y será siempre, por los siglos de los siglos, la mayor ramera del campo santo; bebe en su coctel, del más ostentoso oro, el vino que endulzó los paladares de tantos crédulos e ingenuos.
Las puertas del Sheol se abren para el deleite visual de los espantados hijos de Eva, la madre ilustre de la civilización; asomándose en el pozo de sangre hirviendo está su réplica: Babilonia y su dragón; un hito de proporciones bíblicas él contemplaba.
Y en menudencia quedaban, deshilachados, troceados y desmembrados; presenció el mayor espectáculo visceral de la historia humana: "Esto es una pesadilla... Definitivamente no puede ser real... Yo no te entiendo Morfeo, no vislumbro tu ira, sobrepasa mis límites... ¡Quiero despertar ya! ¡Déjame en libertad!"
Centro de Rehabilitación Mental Número K120A78, Nueva Jerusalén.
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ANTOLOGÍA: RASGADOS DE NUREÑA
PoesiaLos Libelos de Diego, los "Rasgados de Nureña", un camino de escritos que conectará sus mundos con el mío; con el arco final.
