El diablo, Jordán; la musa, azafrán; el canto, Dorian; la noche, Corán. Mis ojos iluminan a Narciso, mis coros de impreciso; ¿quiso el Erizo plantar flores de Lis o dejar caer sus rizos?
Sosegado, con paz; abrumado, alcatraz; alocado, incapaz; condenado, por cachafaz. Servidumbre, alumbre deforme; meticuloso y audaz, zafiedad inherente; tertuliano inconforme, mercenario de ideas.
Salido del Sheol, hambre incalculable; armado de valor, muerte galopante; tenaza de hierro, miedo de visitante; moneda de cobre, corazón de león. Némesis de Dios, arcángel desleal; lamentaciones y alaridos, quejidos eternos; sorda dama en Nazaret, vestigios de su existencia; arrodíllate y venera a tu salvador.
Eo ut interficias Deum
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ANTOLOGÍA: RASGADOS DE NUREÑA
PuisiLos Libelos de Diego, los "Rasgados de Nureña", un camino de escritos que conectará sus mundos con el mío; con el arco final.
