novio tóxico ✧ haobin

capítulo 4O.

Creo que vestir de manera diferente a la de siempre, en verdad llamaba la atención de los demás, porque podía jurar que sentía sus miradas... o ¿era alucinación mía?

Matthew se había empeñado en que me pusiera una playera negra sin mangas, dejando ver así mis brazos que a pesar de no hacer ejercicio, no eran delgados ni débiles. Me puse unos pantalones ajustados del mismo color y una gargantilla sin dije.

Matthew dijo que me veía sexy y bonito y si, yo realmente me sentía así.

—¡Zhanghao, te ves increíble!— me halagó Yeonjun con una sonrisa— Me encanta, queda con tu nuevo color de cabello.

—Muchas gracias, que dulce.

—Bueno, póngase cómodos, hay alcohol gratis y lugar para que bailen hasta que les duela los pies— hizo una pequeña reverencia— Con permiso.

—Adiós.

—¿Viste? te dije que te verías muy bien— habló Matthew— Está noche conquistarás muchos corazones.

—Es cierto, te ves muy bien— dijo Jiwoong y yo comencé a sentirme apenado de tantos halagos.

A pesar de que había tantas personas, no podía evitar mirar a todos lados para ver si me encontraba a Hanbin. Pero no, hasta ahora no lo había visto y en cierto punto agradecía aquello, verlo me haría sentir... raro.

—Bebamos esto— Matthew nos entregó un shot de vodka a cada uno— Por Zhanghao y lo sexy que se ve hoy... ¡salud!

Yo rodé los ojos por ese comentario, pero no dije nada, solamente bebí el shot de un solo trago e hice una mueca de asco al sentir el líquido quemar mi garganta.

Y ese no fue el único.

Bebí uno y otro y otro shot hasta perder la vergüenza y comenzar a bailar junto a Matthew y Jiwoong al ritmo de la música. Los tres la estábamos pasando bien, por un momento deje de preocuparme en Hanbin y decidí divertirme.

Hace mucho que no sentía lo que era bailar sin miedo a que Hanbin se enojase porque según, los demás me miraban con deseo. Creo que al final de todo, estar soltero no era tan malo, solamente tenía que aprender a disfrutarlo.

—Iré por una cerveza, ¿quieren una?— les pregunté a ambos y ellos negaron con la cabeza—Bien, ahora vuelvo.

Caminé entre las demás personas hasta lograr llegar a la cocina, saqué una cerveza de la nevera y la destapé para darle un trago.

—Hola, Zhanghao— me saludó haciendo que me sobresaltará del susto.

—Dios, Kuanjui— me llevé una mano al pecho— Me asustaste.

Él sonrió y se acercó más a mi. —¿Te diviertes?

Lo miré con desconfianza, ¿a caso Hanbin le había enviado a espiarme o algo así?

—¿Hanbin te envío conmigo?

—No, él está... por ahí— se encogió de hombros— Te vez realmente bien hoy.

¿A caso me estaba coqueteando? no... era él mejor amigo de Hanbin, no lo haría...

—Gracias.

—¿Con quien viniste?

—Con Matthew y Jiwoong.

—Ah, con ese idiota— rodó los ojos y bebió un trago de su cerveza.

—No le digas así—. dije con un poco de enojo.

—Como sea, quiero decirte que en verdad te ves muy sexy — acarició mi mejilla y mis labios, haciendo que yo entrará en pánico—Espero verte de nuevo.

—¿Eh?— pregunté aún sin poder creer que me estuviese diciendo eso.

—¿Me darías tu número?

Ok, aquello ya era muy raro. Kuanjui estaba traicionando a su mejor amigo de esa manera y estoy seguro de que jamás sospecharía de que fuese capaz.

—¿Qué diablos?... no.—fruncí el ceño y salí de la cocina totalmente extrañado.

Me dieron ganas de ir al baño, así que camine para buscarlo, pues realmente no conocía la casa de Seungmin. Finalmente lo encontré y vacié todo el líquido que ya había bebido en está noche, cuando terminé me lave las manos y me miré al espejo. Me veía diferente, no me veía tierno y femenino como siempre, esta vez me veía sexy, mis rasgos se veían masculinos.

¿Si yo era tan guapo porque nunca fui suficiente para Hanbin?

¿Por qué siempre busco más?

¿A caso nunca fui capaz de llenarlo por completo?

Joder, dije que no pensaría en él, pero es que es inevitable. No puedo evitar pensar en ese tonto que tanto amo, ojalá el tiempo pase rápido y yo pueda olvidarlo de una vez por todas.

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¡gracias por leer!