Capítulo 28

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Lucero:

///Como sonreía al tenerlo frente a mi de un día para otro, es increíble como un sentimiento puede cambiar y apenas darte cuenta. Él, ese hombre cambió mi vida y yo no le di permiso, el solo dijo Que gusto conocerte. Y desde ese momento mis días grises tomaron colores, tantos, que vivir la vida ya no me parecía tan rutinario y aburrido.///

Levanté mi vista de una de las páginas de ese próximo libro que algún día saldría para mostrarse al mundo... Desde que José Manuel me lo entregó diciéndome que me iba a gustar y tantas cosas más, me dio la curiosidad. El sabe mis gustos, esos que hoy por hoy lamentablemente no recuerdo. Y si el dice que me gustaría no tengo porque decir o pensar lo contrario. Siento que él es la única persona que me conoce por completo por obvias razones, fue mi pareja entonces creo que por eso tengo que creerle poco a poco.

Recordando sobre eso... . Me besó, lo besé. Me volvío a besar,le correspondí.... Lo hizo con suavidad, con ternura, con tranquilidad. Sentí nervios, muchísimos. Pero al corresponder, lo hice porque no me sentí mal con sus labios tocando y acariciando los míos. Sentí una especie de remolino en mi estómago que recordarlo me hace sonreír hasta parecer una adolescente. Bueno, hoy por hoy es mi primer beso, recalcando que no recuerdo si antes de Jose Manuel hubo otro hombre. Cosa que hoy o almenos ahora, no me importa.

En fin, volviendo al tema del libro. Desde que dejó en mis manos lo escrito he llegado a sentir esas sensaciones que la chica describe mi interior. Describe perfectamente como después de la tormenta si puede llegar la calma por más imposible que parezca. Aunque luego de la calma venga un huracán o lo que sea. Muestra que si llegamos a ver la luz al final del túnel. Y lo bonito es que a pesar de ser una historia muy personal, también toca el valor de la amistad, aunque justo estoy viendo como de una amistad en específico, con su "grillito de la suerte" —como esta escrito— está naciendo un sentimiento, que quizás ella no sabía que estaba en su vida desde que ese hombre llegó para ayudarla. Parte de sus alegrías son gracias a él y me gusta. Es un amor sano, bonito, sin ningún daño entre ellos.

*Te lo juro, todo se dio tan orgánico, que no nos dimos cuenta como de una amistad, ya era imposible dejar de vernos, no besarnos por equivocación. Las horas que pasaba sin verte eran tortura. Pero un día, el día en el que te iba a confesar que me había enamorado sin darme cuenta de ti. Tu lo hiciste primero*

Cerré el libro y miré a la pared con sorpresa. La voz de José Manuel llegó a mi cabeza. ¿Y si el tiene razón, nuestra relación fue así, bonita?. Quiero creer que si, ya el no me está pareciendo un mal tipo, ya me doy cuenta que su forma de ser es así. Y ya no me causa tanta molestia, a pesar no habernos visto mucho. Itatí y Chantal me han contado un poco y solo por eso quiero creer que Jose Manuel fue una buena presencia en mi vida pasada y en ésta de ahorita también.

—Adelante —respondí después del toque y veo que es Toño, mi hermano que se me acerca y deja un beso en mi frente—

—Como dormiste ayer después de la visita de Manuel?

—Bien, me dejó esto —le enseño la libreta— Pude dormir bien después de leer un poco

—Y por lo visto sigues

—Si. Está interesante. Parece un diario. —sonrío ante lo que digo mirando la mesita de mi costado donde tenía otra libreta— Igual que lo que estaba escribiendo yo

—Puedo leer?

—No —miro hacia la puerta después de escuchar la negativa de Manuel y mi hermano hace lo mismo— Buenos días Lucerina —besa mi mejilla dejando en la otra una pequeña caricia— Le hice prometer a la persona que lo escribe que solo Lucero lo leería

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