Ni siquiera sabía que podía hacer eso.

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~Advertencia de contenido sexual explícito~

~Narra Jungkook~

Despierto sin saber donde estoy, quien soy y que hago aqui, como si hubiera despertado de un sueño muy profundo, pero sin haber descansado en lo más minimo. Conforme mi cuerpo toma conciencia de mi alrededor, rapido me doy cuenta que me encuentro en mi habitación.

Con quejidos como los de un cachorro siendo despertado por su madre, me levanto de la cama, listo para comerme al mundo. Me siento a orillas de la cama y busco mis sandalias golpeando el piso con mis pies descalzos.

Con pesadez en los ojos me levanto y camino hasta la sala con la coordinación y equilibrio de un recien nacido. Apenas llegar me encuentro con la sorpresa de ver a mi pareja dormido en el sofá, sus zapatillas estan en el piso y puedo detectar un aroma fetido a alcohol por toda la casa; eso me lleva a preguntarme a que horas de la madrugada llegó.

Decido no despertarlo y en su lugar preparar algo para que recupere sus energías. Reproduzco en mi celular un pequeño podcast que estoy comenzando mientras vierto la pastilla para la resaca dentro del vaso con agua, esta se disuelve lentamente.

Necesito un consejo. Mi esposa me confesó que le gusté porque me parezco a su mamá de joven, no se como reaccionar, ¿Que hago?. Conforme uno de los conductores leía la pregunta de una fan, mi boca se abría de par en par con sorpresa y asco. Ahora exijo ver a la mamá, jajaja.

Me carcajeo en silencio por el comentario tan fuera de lugar de uno de mis conductores favoritos, pensando que en verdad me causa curiosidad el parecido entre la nuera y la suegra.

Tampoco debe ser mucho el parecido, a lo mejor solo se parecen en el cabello... De abajo, jajajajaj. Responde el que lo acompaña, haciendo aún más graciosa la situación, me esfuerzo mucho por no reir a carcajadas y despertar al pelirosa.

Con el podcast de fondo el tiempo cocinando se me pasa rapido, y en menos de lo que dura un parpadeo ya tengo listo el desayuno. Me detengo a ver la panceta de cerdo frita bañada en gravy, el arroz integral con kimchi y verduras salteadas y me doy cuenta que cocinar todo eso no fué solo un parpadeo.

Lo acomodo todo estéticamente sobre la bandeja y con cuidado lo transporto hacia mi bello durmiente, quien sigue durmiente. Me arrodillo, pongo la bandeja sobre la mesa de centro y pico el hombro y la mejilla de mi novio para despertarlo.

— Amor... — le susurro, pero no reacciona. — Jiminshi~

Mi delicado intento por despertarlo no funciona, asi que opto por sacudirlo un poco.

— ¿Que? ¿Que...? — Jimin se despierta y en cuanto nota que se trata de mi, hace un puchero y me da la espalda, con toda la intensión de volverse a dormir. — ¿Que hora es?

— Diez veinte. — tomo asiento a orillas del sofá, junto a los pies del Omega. — ¿Como estuvo la fiesta? ¿Te divertiste?

Ante mi pregunta, Jimin se acuesta boca arriba y estira sus brazos con pereza. Tiene el maquillaje corrido por el calor de la noche y sus rosas cabellos más revueltos que nido de ave.

°EL ERROR°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora