La biblioteca.

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~Narra JJM~

Apenas cerrar esa puerta, el peso de mi propia consciencia hace que lluevan mis pupilas, y en mi intento por evitarlo, accidentalmente provoco una hiperventilación. El aire entra y sale de mis pulmones rabiosamente, coloco una mano en mi pecho he intento regular mi respiración, pero no funciona.

Mi garganta se cierra y me hace doler con cada exhalación entrecortada y agresiva, entonces busco las sábanas y me refugio en ellas para, con impotencia, encestar un unico golpe a la almohada sobrante.

He llorado tantas veces las últimas horas que a comenzado a pasarme factura en forma de dolores recurrentes de cabeza, mi primera reacción es acostarme boca arriba y tratar nuevamente de tranquilizarme.

La hiperventilación no a cesado y el dolor físico y mental se extiende por todo mi cuerpo, tan malditamente insoportable que el único escape que encuentro es gritar con todas mis fuerzas hasta quedarme sin ellas. Es entonces que Jungkook irrumpe en la habitación, derribando la puerta y haciendo temblar los cimientos de esta cabaña.

— ¡N~no quiero verte ahora, largo! — salto de la cama a toda prisa, aún con las sábanas rodeando mi cuerpo.

No, tenemos que hablar. Insiste, dando un paso hacia mí, y por alguna razón, la forma terca en la que actúa me hace rabiar.

— ¡¡Dije que no quiero hablar contigo!! — me hago del primer objeto a mi alcance, lo que resulta ser un cuenco de madera en el que me habían servido sopa, la cual lanzo hacia él.

La madera se estrella contra su ojo y el animal gime del dolor, me congelo de inmediato al reparar en lo que he hecho. Afortunadamente la sopa estaba fría porque no había comido nada de ella.

— ... Jung... Y~yo no quería... — trato de explicarle que no era mi intención hacerle daño, pero entre gruñidos, avanza hacia mí de forma amenazante. — ¡E~espera! ¡¡No quise~!!

Y antes de poder decir nada, la criatura abre sus fauces y se abalanza hacia mí.

— ¡¡No!! — ruego por mi vida, cierro los ojos con fuerza y me tiro al suelo para tratar de esquivarlo. Pero es más rápido que yo y en un par de segundos percibo como sus enormes dientes abrazan mi cintura y presionan mi cuerpo.

Tiemblo, pensando que este es mi final, pero nada pasa, sus dientes siguen allí pero no se cierran para desgarrarme. Abro los ojos lentamente y me doy cuenta que estoy siendo llevado entre sus fauces cuidadosamente a través del bosque.

Estoy tan confundido que he quedado mudo, ni siquiera puedo preguntar a dónde me lleva.

Camina apaciblemente a través de la hierva y los pinos, alejándonos del pueblo. Y cuando nos adentramos en la profundidad del bosque y encuentra una planicie, me suelta sobre un monto de hojas suaves, dejando mi ropa impregnada de su saliva.

Se sienta frente a mí y clava su mirada de brillante ámbar en mis ojos, es como si leyera mi alma, lo que me provoca incomodidad, incluso miedo.

Lamento si fuí un poco rudo, no me diste otras opciones. Comienza diciendo. Ahora que estamos solos, ¿Podemos hablar?... Estoy cansado de este circo, persiguiendo mi cola como un tonto.

— No lo sé... Yo no...

“Yo”. Gruñe molesto. Estoy harto de este “Yo”. Jimin, somos pareja ahora, ya no se trata solo de uno de nosotros, sino de ambos. Por favor, no me gusta verte así... Comparte conmigo todo lo que tengas en tu corazón.

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⏰ Última actualización: Oct 07 ⏰

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