La Herida Del Corazón ©

CAPITULO 21

STELLA

La noche de ayer no resulto ser del todo un desastre como creía. Aunque a decir verdad Xander, se avergonzó mucho, hubo varios momentos en donde estaba sonrojado como tomate.

Hoy tendría que ir a cenar con su madre, a decir verdad, estaba nerviosa, a diferencia de ayer, hoy conoceré a la madre de él. Es después de todo la persona que me dio la vida.

Xander, dijo que era una buena persona, pero que tal y es de esas madres que son tan sobreprotectoras con sus hijos, que casi le escogen las parejas a sus hijos o que tal y hago algo que no le agrade, quizás yo no le agrade.

Stella, deja de pensar tonterías.

Debo parecer patética, aún faltan un par de horas, quizás lo que debo hacer es apurarme a barrer, que aún me falta el piso de arriba y debo aprovechar que no hay nadie en casa, me preguntaría donde esta Abril, pero desde temprano salió con Logan. Siempre vi química en ellos dos, aunque pensé que tomaría más tiempo para que ambos se dieran cuenta.

<<Cuando existe química entre dos o más personas, nada ni nadie puede hacerte creer lo contrario.>>

Papá tenía razón al decirlo, me pregunto si él y mamá eran así, supongo que sí, tuvieron tres hijos, debieron amarse mucho. Me hubiera gustado conocer su historia y aunque nunca llegaron a contármela, espero algún día conocer al menos una parte de esa historia.

Quería ponerme un vestido, pero estamos en pleno invierno a pocos días de navidad. Así que opto por ponerme unos vaqueros negros y una blusa blanca en forma de v, me pongo unos tenis blancos con decorados violetas.

Me he peinado, me he hecho una coleta y unas ondas, unos mechones quedan algo sueltos, pero ese es el punto, me pongo mi perfume favorito, que huele dulce, como a fresa, desconozco mucho de olores, pero este me encanta, me coloco unos aretes en forma de osito y tomo el dije que cuelga de mi cadena, me pregunto qué opinaría papá, supongo que estaría feliz.

Xander pasaría por mí, espero que el peinado no haya quedado muy elaborado, aunque es sencillo se ve elegante y que pasa si es más casual el asunto. Espero no arruinar la noche.

Estaba acomodándome la blusa, deje de hacerlo cuando vi la silueta de Abril por el espejo.

—Stell, estás preciosa —ella se acerca a mí.

Me sentía algo avergonzada, no me considero preciosa, se que la belleza es subjetiva, pero nos hemos acostumbrado tanto a un estándar de belleza, que aquello que sale de aquel margen nos parece horrible y suponemos que se debe cambiar, si no tienes culo, tetas o una cintura bien definida, la sociedad no te considera bella.

Aun así, tengo inseguridades con mi cuerpo, como todos, a veces me siento más linda que otros días, en ocasiones pienso que parezco una abuelita y a veces mis facciones tampoco me gustan; no me gusta sentirme fea.

El día de hoy me gusta como me veo y se que a Xander también, su mirada no puede ocultar ese brillo cuando me ve. Su mirada dice mucho porque es como si en él, viera todo lo bello que hay en mí, nadie me ha mirado así antes.

La casa de Xander es de una sola planta, pero es hermosa, tiene un jardín común, no tiene demasiadas plantas, pero si un espacio grande, quizás en el futuro pueda plantar algunas rosas por aquí, ciclámenes, etc.

Xander me toma de la cintura, esta nervioso, no sabe ocultarlo, las expresiones de su rostro se tensan y su mirada decae cuando se encuentra nervioso.

—Estas nervioso, cariño.

—Si —contesta con un timbre de voz muy tenue.

Me acerco a él, lo abrazo y beso su mejilla, quiero asegurarle que todo saldrá bien, pero algo me dice que no y espero equivocarme. Aunque en los libros cuando la protagonista tiene presentimientos así, es porque algo malo si pasa, solo que aquí, espero que el personaje (o sea yo) se equivoque.