Maratón 3/3 💙🥕
Aleck
Una sensación molesta me remueve el estómago al ver a Jay tan cerca de Lina, él no debería estar aquí. ¿Por qué demonios está aquí? Clavo mis ojos en la pelirroja mientras la escucho hablar con Jay, reparo con mucho cuidado cada zona de su cuerpo; la manera en cómo su cabello cae despreocupado por su espalda, es un naranja precioso... y pensar que dicha cabellera puedo haber terminado enrollada en mi mano, tirando de ella con fuerza, lo suficiente como para que Lina se viera en la obligación de besarme.
Mi ceño se frunce ante la ola de enfado que me golpea, ¿Por qué siempre que estoy por besarla pasa algo? Carajo.
—Jay, ¿Tú no tenías novia? — comento de forma arisca. No obstante, Jay sonríe satisfecho.
—Sí, es una castaña con rulos rebeldes, temperamento volátil, pero completamente preciosa. Gracias por recordármelo, Alecksito— su tono burlón no pasa desapercibido, pero me distraigo al oír la pequeña risa que Lina emite.
Aprieto mi mandíbula obligándome a ignorarla. Si Jay viajó hasta acá es por una razón, y lo que sea que deba decirme no lo hará con ella aquí.
—Lina, debes irte. — le digo con seriedad, ella me observa con una ceja levantada, pero no replica, la veo ir por sus cosas y despedirse de Jay, para luego cruzar la puerta de la biblioteca con firmeza, sin dirigirme ni una última mirada. La indignación se asienta en mi pecho, hija de...
—No sabía que te gustaran con tanto fuego en las venas, hermanito— murmura el pelinegro ocultando una sonrisa.
—Eso a ti no te importa. ¿A qué carajos viniste? — cuestiono con brusquedad.
Jay suspira cansado, pero no me responde, se toma su tiempo y justo cuando va a decir algo, un sonido lo corta. Frunzo el ceño frustrado, ¿Quién coño me llama? Sin embargo, cuando me muevo para alcanzar mi móvil, me doy cuenta que no es el mío el que está sonando, es el de alguien más.
[Llamada entrante]
Eritza Di Fazio.Elevo mis cejas sorprendido. La zanahoria ha olvidado su celular, pero no es eso lo que me sorprende, Lina es tan distraída que perdería su cabeza si no la tuviera pegada al cuerpo, es la persona que la está llamando. No sé en qué momento Jay dejó de estar sentado en el sofá, para estar detrás de mí, pero su voz pronuncia la pregunta que mi boca se ha negado a articular.
—¿Por qué la cabecera de la familia más peligrosa está llamando a tu noviecita?
Quise refutarle y decirle que no era mi 'noviecita', solo que mi mente estaba enfocada en una cosa. Fuera cual fuese el nexo que Lina tuviera con los Di Fazio, iba a quebrarlo, porqué ella no podía terminar salpicada en esto.
Ella no.
[...]
Lina
No volteo a mirarlo cuando salgo de la biblioteca, principalmente porque me echó de una manera muy poco disimulada y porque no puedo creer que deje que eso pasara. Si no hubiera sido por Jay, Aleck me habría hecho quién sabe qué cosa, y yo me habría dejado, que era lo peor.
Joder.
¿Dónde queda Aaron en esta historia? Dios, soy una persona horrible.
Se supone que lo amo, ¿Cómo era capaz de dejar que esto llegara tan lejos? Me había puesto un límite antes de venir, incluso antes de siquiera volver a estar cerca de él, pero no, viene y me habla bonito y mando todo al caño.
El sentimiento de culpa me consume a medida que avanzo por el pasillo y bajo por las escaleras, sin embargo, cuando estoy a punto de llegar a la puerta principal, una voz que me resulta familiar inunda la entrada de la cocina.
ESTÁS LEYENDO
El encanto de Lina
Teen Fiction**Este es un borrador, contiene errores** Imagínate dos mundos completamente diferentes; uno es radiante, osado, rebosante de luz, alegría y diversión... En cambio el otro es un tanto más distinto; reservado,oscuro, cuidadoso y muy, pero muy, amarga...