"A una edad determinada las personas reciben audífonos por donde podrán escuchar la voz de su amor verdadero"... Suena como una gran idea, ¿verdad? Pero, ¿qué pasa si llegas a escuchar la voz del novio de tu mejor amigo con esos audífonos? Es ahí do...
Quizá para ti no ya que el tiempo pasa diferente para cada mundo, pero aquí ya han pasado unos meses (estamos a finales de año). Las vacaciones acabaron (unas vacaciones exitosas y un poco demasiado intensas, ya sabes), la vida de todos cambiaron, y en un momento te lo contaré todo porque las nuevas vacaciones han llegado. Las últimas para Hyunjin y para mí.
¿Por dónde comienzo? Bueno, Changbin, Chan y Jisung lograron ingresar al internado de sus sueños. Aunque creo que eso no es sorpresa para nadie. Mi mejor amigo no es bueno con las despedidas, y creo que yo mucho menos, pero aun así, junto con mis hermanos y mamá, le organizamos una fiesta para felicitarlo y despedirlo. Lo consolé tras su despedida con su madre y lo acompañé hasta el taxi. Quise ir con él a la parada, donde tomaría el tren, pero me dijo que quería hacer esa parte solo, y aunque al principio insistí en acompañarlo, luego lo acepté y lo dejé ir. No pude evitar llorar mucho durante el resto del día, por lo que Hyunjin se quedó esa noche a dormir en mi habitación.
Esta fue la última foto que me tomé con él.
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Otra cosa interesante que pasó en lo que restaba de las vacaciones, fue que Jeongin fue a mi casa y me pidió disculpas.
— No tenía por qué enojarme contigo cuando no tenías nada que ver con mis problemas. Tuve que arreglar yo mismo mis cosas con Jisung. Amenazarte y aprovecharme de tus secretos fue ridículamente inmaduro... Lo siento mucho, Seungmin. — tras ello me miró, pasó saliva y lo vi ciertamente apenado, como si no supiera si estaba pidiendo disculpas de la forma correcta. — Fui un completo idiota por querer esconderme detrás de ti y que hicieras las cosas más fáciles para mí, cuando desde un principio debí darme cuenta de que nada de lo que hacía valía la pena. No servía para nada. Supongo que, en medio de mi amargura, no quería que nadie fuera feliz y que las cosas le salieran bien a alguien o, quizá, sólo quería ver que alguien estuviera más jodido que yo, porque... — su voz se quebró y me sentí repentinamente conmovido. — Perdón... Tengo el corazón destrozado. Siento que me han arrancado el corazón del pecho. No debí desquitar mi frustración contigo, caer en la trampa de Chan y ser manipulado por mis propios sentimientos, estuvo muy mal. Perdóname, Kim Seungmin.
— Oye, está bien. Es decir, no estuvo bien, sí que me jodiste mucho, pero ahora ya todo está bien. — sonreí para aligerar el ambiente y le di un pequeño golpe en el hombro. — Pude arreglar mis cosas con las personas que amo, tuve el valor por primera vez, y es bueno que te hayas dado cuenta de tu error, lo aprecio mucho de tu parte. Ahora sólo nos queda dejar todo eso en el pasado, volver a la escuela, ya que es nuestro último año y...
— Yo me voy a mudar. — me informó y por un momento recordé a Hyunjin y su mudanza. Por alguna razón me hizo sentir triste. — Junto con Yuna y nuestros abuelos, hemos decidido mudarnos. Es lo mejor para todos. Además, nuestra abuela anda un poco delicada de salud y a donde nos vamos hay un hospital cerca.
