Capítulo 6 Primer día

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Los primeros rayos de sol ya se dejaban ver. En un barco de la marina, el vicealmirante Garp, observaba el amanecer. No podía evitar que la preocupación lo invadiera. Estaba tan preocupado, que nisiquiera despertó a los demás marines a gritos. Ahora solo podía pensar en una cosa: ¿Como le iría a su pequeña Silvia en su primer día de instituto?

Narra: Silvia

Me despertó el sonido de mi despertador. Cuando lo apagué, dude entre levantarme o quedarme en la cama. Pero no tardé en comprender que, si no me levantaba yo, Luffy se encargaría de hacrlo, y eso empeoraría mi estado de ánimo. Me levanté de la cama y fuí directa a ducharme. Tras vestirme,bajé a la cocina y me sorprendí de no ver a nadie. Descubrí una nota junto a tres platos de tortitas. La cogí y la leí.

Buenos dias Silvia. Espero que hayas descansado, porque te espera un largo día. Te pido que me disculpes por no estar en casa, pero esque me ha surgido un asunto urgente que debo atender. Os he dejado el desyuno preparado y, porfavor, despierta a Ace y a Luffy, si no llegareis tarde al instituto. Confio en tí.

Mucha suerte, Sabo.

Suspiré para mis adentros y me guardé la nota. Decidí que lo más sensato era desayunar primero y después despertar a Ace y a Luffy, no fuera a ser que me quedase sin desayuno.

A Luffy fue fácil despertarlo, solo me hizo falta mencionar el desayuno para que se levantase de un salto. En canvio, a Ace, fue bastante más difícil despertarlo, pero tras unos gritos y un par de golpes se despertó.

Los dos hermanos desayunaron en la cocina, mientras yo arreglaba mi cama.

-Silvia-gritó Ace- haz mi cama también.

-Que te lo has creido-respondí-Tu cama te la haces tú.

Cuando regresé a la cocina Ace ya no estaba. Luffy me dijo que se había ido a trabajar. A mi parecer, esa no era una buena escusa para no arreglar su habitación. Pero si pensaba que se la iba a arreglar yo lo llevaba claro.

Luffy y yo salimos de casa y este regresó con una bicicleta.

-Sube Silla- me dijo señalando su espalda.

-Que te crees tú que me voy a subir yo ahí.

-Pues claro que te vas a subir-respondió agarrandome del brazo- porque sino llegaremos tarde.

Al final acabé subiendo a la bici. Aun es un misterio el como llegué ilesa al instituto. Luffy se fue a merodear por los pasillos en busca de sus amigos dejandome sola. Intenté llegar a mi classe, sin exito. De repente choqué con un chico. Era alto , lucía una pequeña perilla y bajo sus ojos se adivinaban unas ojeras.

-Lo siento. No miraba por dende iba.

-No te preocupes-me respondió-Parece que no te aclaras con el mapa.

-¿No me digas que tu también te has dado cuenta?-dije de forma brusca. No me gusta que la gente me recuerde lo que es obvio.

-Tampoco hace falta ponerse así-me respondió con tono de reproche.

-Quizás no haga falta, pero no me gusta que la gente me recuerde cosas que ya sé.

-Dejando de lado el tema. ¿A donde tienes que ir?

-Pues...-revisé mi papel por enesima vez-Tengo que ir a la classe del señor Franky.

-Ya veo. Sube al segundo piso y es la tercera clase del primer pasillo.

-Gracias.-dije con una sonrisa forzada.

-Espera-me dijo el chaval- No me has dicho tu nombre.

-Me llamo Silvia

-Yo soy Law. Encantado.

Tras la conversión con Law me dirigí a mi clase. Gracias a las indicaciones de Law, consegí llegar sin ningún problema. Por suerte el profesor aun no había llegado.

Me senté al final de la classe pegada a la ventana. Yo no soy una persona que preste especial atención en classe, de hecho, no pego palo al agua. Ví a Luffy en una esquina de classe hablando con un grupo de alumnos, entre ellos el narizotas y el renito. No me molesté en acercarme a ellos. Para conocer gente rara, prefería no conocer a nadie.

Cuando entró el profesor tuve que ahogar una exclamación de asombro. El señor Franky, era un individuo que se salía de lo normal. Iba vestido con esmoquin de cintura para arriba y de cintura para abajo sólo llevaba un tanga. Pese a lo extravagante de aquel tipo, preferí no hacer ningún comentario, ya que los demás alumnos actuaban como si el que el peofesor fuese así vestido fuese algo normal.

-Buenos SUPER días a todos-dijo el profesor poniendo una pose muy extraña-Espero que os encontréis SUPER bien.

Yo sólo rezaba para que el profesor no me pidiese presentarme delante de toda la clase. Rezar no sirvió para nada.

-Hoy tenemos una SUPER nueva alumna. Por favor-dijo mirándome-¿podrías presentarte?

Con un suspiro me levanté de mi asiento y bajo la atenta mirada de todos me presenté.

-Me llamo Iruka D. Silvia. Nací en East Blue, pero nunca he tenido un hogar fijo, por así decirlo. Me he pasado toda la vida viajando de isla en isla y eso es prácticamente toda mi vida.-terminé de hablar y me senté. Algunos alumnos me miraban de forma extraña, otros pasaban olímpicamente de lo que acababa de decir, y luego estaba Luffy, que me sonreía desde la otra esquina de la clase. No había querido mencionar nada acerca de mi familia y eso incluía no relacionar a Luffy conmigo.

Tras mi corta presentación el señor Franky se puso a dar clase. Yo, sinceramente, no le presté gran atención. Estuve toda la clase contemplando el paisaje que me ofrecía la ventana.

Y así pasó una clase, y después otra, y otra, y otra... Hasta que sonó la campana que anunciaba el final de las clases.

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Hola a todos, aquí tenéis el capítulo 6. Este capítulo se lo quiero dedicar a mi hermano, que hoy celebra su cumple, y aunque sólo tiene 6 años, ve One Piece conmigo todas las semanas. Felicidades enano.
También quiero desearos a todos unas felices vacaciones de verano. Y a los que aún no habéis acabado el colegio o el insti o simplemente tenéis que ir a recuperación ¡¡ANIMO QUE YA QUEDA POCO!!
Bueno y me voy a despedir ya que me enrollo mucho.
Feliz verano otra vez, se despide onep1052.

Descubriendo el mundo (One Piece)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora