Imperio [Poder #2].

29. Criaturas extrañas.

31 de diciembre de 2223

- ¿Como se supone que haremos esto? - Me interroga Edward inseguro de todo esto, pero aun así dispuesto a apoyarme.

- A unos 5 kilómetros de distancia comienzan los túneles de Lennox. Los guardias ya revisaron el panorama y mandaron un dron a través de la unión de los túneles que fueron construidos en estos días aquí en Salvatore y los antiguos túneles de Lennox, y parece ser que todo está despejado, lo cual nos hace saber que probablemente Iván aún no sabe sobre la existencia de los túneles.

- ¿Acaso dijiste 'parece ser' y 'probablemente'? - Cuestiona Alexander al borde de una seria crisis existencial.

- No se puede dar nada por hecho, querido Alex - Le digo mientras acomodo mis guantes de cuero negro, que combina con el resto del conjunto que me hace ver como una soldado, o, mejor dicho, como una espía.

Hoy es el día, regresaremos a Lennox a través de los túneles. Durante los últimos sietes días varios de nuestros más leales trabajadores construyeron túneles en México con nuestra ayuda y supervisión. Túneles que se han entrelazado con los de Lennox y nos permite la entrada desde nuestro reino sin riesgos de ser vistos por el enemigo.

- ¿Te planchaste el pelo? - Me vuelve a cuestionar juzgándome con la mirada - ¿Y eso es labial rojo?

Lo miro con mi sonrisa más cínica - ¿Crees que perderé el glamour?

- ¡Literalmente podemos morir!

- Pues al menos moriré viéndome bonita.

Ya me quitaron demasiado, no les daré el gusto de verme completamente derrotada si llegan a quitarme la vida. Tal vez es un mecanismo de autodefensa, el intentar verme bonita en el exterior cuando en realidad estoy aterrada de volver a tocar territorio Lennoxe después de todo lo que sufrí. Ocurrió hace apenas unas semanas y siento que voy a asfixiarme de solo pensar en regresar, pero no tengo otra alternativa.

Emma y Valery se han quedado en el palacio con mis hijos. Están monitoreando todo y están listas para atacar en caso de que algo salga mal, porque sé que no podía pedirles que vinieran conmigo después de todo lo que han pasado.

De todas maneras, no nos podíamos arriesgar todos. Necesitamos a personas que queden vivas en caso de que nosotros no lo logremos. Emma es parte de la realeza británica, así que si William muere el imperio británico pasará a manos de los Sutherfield, o sea a la familia de Emma, convirtiéndola en reina, y al ser nuestros aliados más cercanos hemos firmado un permiso que la convertirá en reina regente de Salvatore hasta que mis hijos cumplan la mayoría de edad.

Yo no podía quedarme, por más mal que me sienta, por más ansiedad que me carcoma, por más pánico que me paralice y por más dolor que me inunde debido a lo recientes que aún son todos los sucesos, esta sigue siendo mi lucha. Nadie más que yo tiene que liderarla, y nadie más que yo tiene que ir al frente.

No me queda otra alternativa que enfrentarme a mis más grandes miedos, a pesar de que lo único que quiero es esconderme en una esquina de mi alcoba detrás de las grandes, gruesas y protegidas paredes del palacio en Washington.

No me queda otra alternativa que doblegar mis más tormentosos y ruidosos miedos a mi favor, reírme de ellos, convertirlos en mi fortaleza y después matarlos sin dejar ni un solo rastro de que siquiera existieron.

Ya he sufrido demasiado, ahora solo quiero venganza, y la tendré. Juro por mi hermano que la tendré, y no descansare hasta tener la corona y el trono que por derecho de nacimiento me pertenece, porque por más que le arda y les duela, yo si soy una autentica Lennox.