Elena
Dejamos a los gatos en su casa, y mientras él les da comida yo busco vendas en mi habitación. Al regresar, me doy cuenta de que el gato negro le ha tomado cariño a Leo ya que no lo deja tranquilo. Él intenta alejarse, pero el gato se acerca cada vez más rozando su pequeña cabeza en su pierna izquierda.
-Eres muy pegajoso, gato. -Lo escucho refunfuñar tratando de quitárselo de encima.
-Creo, que él cree que eres su madre -le digo, sosteniendo las vendas para curar a la otra gata.
-¿Madre? -Arruga la frente.
Sin darme cuenta se me escapa una pequeña risa.
Me siento en el suelo y coloco las vendas en la pata delantera de la pequeña con cuidado, pues maulla y saca las garras de vez en cuando.
-Ya está -suspiro y acaricio a ambos gatos -.Deberían tener un nombre.
-Para qué si no nos quedaremos con ellos.
Tiene razón. Y si pudiera solo me dejarían tener uno. Tendría que llevarlo a escondidas, mamá odia a los gatos. Lo veo meditar unos segundos y luego toma al gato negro en sus brazos, hago una mueca al verlos enrojecidos por los arañazos.
-Yo me quedaré con este, al fin y al cabo le caigo bien.
-Entonces yo me quedaré con la otra.
-Bien.
¿Por qué es tan serio? Jamás había visto a alguien que no sonríe.
-¿Cómo le pondrás? -pregunto.
-No lo sé.
-Podrías ponerle Luke.
-¿Luke? -Inclina la cabeza y vuelve a repetir el nombre unas dos veces. Si no me equivoco para oír como suena.
En realidad siempre quise ponerle así a mi mascota, desde pequeña. Me parece un nombre lindo para él.
-A la tuya deberías ponerle Blue -opina -. Combina con sus ojos.
«Blue».
-Es un bonito nombre.
Y ahí vamos otra vez. No sé que tienen sus ojos que me encuentro tan perdida en ellos. Su oscuridad me hace querer mirarlos por un largo rato y son tan profundos que pienso que puedo atravesarlos si me quedo observándolos un poco más. Él parpadea y centra la vista en los gatos al darse cuenta de que ya han pasado más de diez segundos mirándonos fijamente. Seguro me he puesto de mil colores.
Parezco tonta.
-Bue-bueno ya me tengo que ir, adiós. -Tomo a Blue en mis brazos y me levanto del suelo llena de nervios.
Y extrañamente con el corazón acelerado.
~*~
-¿Elena donde estabas? Te he estado buscando por todos lados.
Jessica me ve cuando entro por la puerta de atrás, y luego mira a mis brazos cubriéndose la boca con las manos con una sonrisa.
-¡Ay, un gatito!
-¡Shh! -Pongo un dedo en mi boca indicándole que haga silencio -.Baja la voz.
-A mamá le dará un ataque, mejor déjalo bien escondido -susurra acercándose a mí y acariciando a mi nueva mascota.
-Es hembra -corrijo -.Se llama Blue -le informo, recordando que el nombre se lo puso Leo.
-Pues eres hermosa, Blue. -La carga y comienza a hacerle caras divertidas.
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Vulnerables I: GIRASOL
Teen FictionElena vive en un mundo perfecto a los ojos de otros. Para los otros lo tiene todo, no merece lo que tiene por ser una persona horrible, por hacer que las personas se vayan de su lado. Todos creen en su vida perfecta, pero es solo un espejismo; algo...