Vulnerables I: GIRASOL

TE AMO

Leo

-¡Tres a cero! -grita Max cuando Elena cae al agua de nuevo. Festeja con Jessica aún en sus hombros.

Elena sube a la superficie, está sonriendo de verdad, y eso me alegra.

-Tu turno Leo -. Tony me llama y nado hacia ella para cargarla en mis hombros.

-¿Segura que puedes conmigo?

-No seas machista, Max. -Jessica lo golpea en el hombro.

Comienza el juego de nuevo, pero mis ojos se desvían inconscientemente hacia Elena, que observa todo desde una esquina. Me esquiva desde hoy en la mañana, ni siquiera me ha dejado hablarle de lo que pasó ayer. Tiene un leve sonrojo en las mejillas cuando choca la vista conmigo, y luego mira a Tony, y se ríe y...

-¡Leo, enfócat...!

El agua me salpica en la espalda cuando mi hermana cae.

-¡Cuatro a cero! -Jessica celebra con Max.

Maldigo por lo bajo. Tony me da un golpe en la espalda.

-Tonto -murmura cuando se va nadando lejos de mí.

~*~

-Estás... te queda bien el traje de baño.

«Demasiado bien».

Trago en seco jugando con el agua. No sé hacia donde más van a mirar mis ojos, siempre se desvían hacia abajo. Me paso la lengua por los labios, mierda, debo concentrarme.

-Gracias. -Ella también desvía la mirada, también me ha estado viendo -. Sobre... lo de hoy en la madrugada -Suspira -. Yo... Necesito contarte la verdad de todo, la verdad de ese vídeo y...

Sacudo la cabeza.

-Antes déjame decirte algo. -Coloco ambas manos en sus hombros tratando de que se calme.

Está temblando y las lágrimas amenazan con salir de sus ojos. No me sienta nada bien verla asustada, ni hoy en la madrugada tampoco. Sí me enfadé al principio, pero tenía que ver quién había mandado el maldito vídeo regodeándose y entendí todo. De inmediato quise ayudarla y así lo hice. Cobró sentido para mí su comportamiento en la escuela y con los demás, y todo lo que había escrito en ese papel.

-Quiero que te sientas cómoda conmigo, Elena. Que no te importe nada cuando estás conmigo, y que confíes en mí. -Le subo la mirada. Le cuesta verme a los ojos y me entristece que por culpa de ese cabrón de mierda esté retrocediendo -. Me importa una mierda ese vídeo, quiero que te quede claro eso.

Nada más de acordarme de ese imbécil ex novio de ella y de la perra trastornada del hermano me hierve la sangre.

Aguanta.

Cuenta.

Elena está contigo.

Ella te necesita.

«Blue me necesita».

Ella suspira con alivio al escucharme, y veo cómo una de sus lágrimas se mezcla con el agua de la piscina.

-Para mí es muy difícil confiar en alguien, Leo -se le quiebra la voz -. Pero contigo es diferente. Contigo, cuando estoy contigo, siento la seguridad que no había sentido con nadie. Lo que pasa es que esto era justo lo que estaba deseando que no pasara. No quería que lo supieras, al menos no así. No quería que pensaras lo que no era. Ni siquiera tenía idea de que aún quedaban copias de ese vídeo.