Just me & you... and the baby

18

El sol entró por las cortinas claras que cubrían la ventana. Louis se quejó por ello, estaba seguro que eran aproximadamente las 6 de la mañana y el sol ya estaba sobre sus ojos pero lo que lo terminó de despertar fue la ronca voz de Harry sobre su cabeza.

— Buenos días, Lou.

— ¿Ya no soy amor? Está bien, buenos días, Hazz — contestó riendo ante la posesiva mano que se instaló en su cintura.

— Louis, estuve pensando unas cosas el fin de semana y tengo que decirte algo. Sé que ya pasaron días del fin de semana pero no me sentía listo para decirte— el Omega lo escuchaba atento sin saber a qué quería llegar— y pues pasa que lo más seguro es que mi celo llegue entre mañana y pasado mañana.

— Oh, entiendo. Supongo que lo quieres pasar con alguien— se sintió tan tonto, es obvio que el alfa por eso reaccionó a él la noche pasada, lo hubiera rechazado. Era obvio que no estaba interesado en él y eso lo estaba haciendo sentir muy mal.

— Sí, bueno quería. Desde la primera vez que estuvimos juntos iba a buscarte para ver si querías ayudarme pero ahora no te lo puedo pedir, no quiero lastimarlos.

Louis no sabía qué decir. ¿Por qué lo estaría buscando antes? No quería hacerse ilusiones, menos pensar que le gustaba al alfa así que prefirió callar y acomodarse en el espacio que Harry hacía entre su brazo y su torso.

— ¿Entonces vas a buscar quien quiera pasarlo contigo? — no sabía si quería saber la respuesta, pero ya estaba preguntando así que no había marcha atrás.

— No, estoy tratando de decirte que si puedes marcar algunas cosas con tu olor y si no es muy descarado, pedirte que lubriques un poco y marqués una sábana con él— sus mejillas estaban muy rojas y Louis estaba... no sabía definirlo, estaba halagado, presumido, apenado y... caliente.

Por alguna razón las palabras que dijo Harry lograron encender la lujuria en su interior. Su lobo estaba regocijándose de placer y admiración. Su alfa de algún modo lo estaba reclamando y eso le encantaba.

— ¿Alice está en casa?

— No, ella fue a trabajar.

— Entonces trae esa sábana, hoy no me voy a contener.

Y sí, logró hacer que su lubricante saliera con sólo ver al alfa ahí acostado. Tuvo que masturbarse con sus dedos para que el líquido saliera sin resistencia. Sus gemidos no se hicieron esperar y eso excitó a Harry que quería tomarlo ahí.

Louis estaba sólo con la playera que le había prestado el alfa para dormir así que eso hacía que Harry quisiera aún más estar con él.

Luego de marcar algunas prendas con su olor y hacer un pequeño nido para el alfa en su cama se fue a bañar. Tendría que regresar a su casa para cambiar su ropa y pasar por algunas tareas que tenía ahí.

Fueron caminando así que había tiempo para platicar.

Si bien, los padres de Harry le habían insistido en qué con ayuda de los tres se comprara un auto, él no quería porque era un gasto innecesario y que podrían aprovecharlo para el futuro. Ahora esa idea le empezaba a tentar, necesitaba proteger a Louis y su cachorro, lo platicaría después con sus papás.

Caminaban no tan apurados, apenas eran las 7 de la mañana y si bien, Harry entraba a las ocho, le daba tiempo para ir a dejar a Louis a su casa y él irse a la escuela.

— ¿Harry? — llamó su atención luego de un largo silencio en el que se sumieron.

— Dime

— Lo que pasó hace un rato me dejó pensando un poco— comenzó sin saber cómo abordar el tema o si sería lo correcto — y estuve recalcando que me gusta mucho pasar tiempo contigo y quisiera que eso fuera así incluso después de nuestro bebé— Harry asintió sin saber qué es lo que quería decir Louis.