Mil Besos Tuyos

Luca

Las cosas con mi manzanita esta semana han avanzado rápido, de solo poder mirarla, soñarla e imaginárla mientras me masturbaba, ahora la tengo en mis brazos, he probado sus labios, he visto y tocado sus increíbles tetas que quiero hacerles muchas cosas diferentes.

Pero sobretodo ella me ha dado el valor para acercarme a ella romanticamente, deseando lo que nunca quise en una pareja. Haciendo lo que nunca hice para una pareja.

Ella me hace perder la cabeza, amo cada parte de ella. Desde su hermoso y perfecto cuerpo hasta sus sentimientos y forma de ser.

Quiero tenerla solo para mi siempre. Despierta en mi este hombre posesivo el cual la quiere solo para el, que nadie la mire ni la toque.

Pero a pesar de todo esto, nuestra diferencia de edad me sigue complicando, no me imagino llevándola a una reunión con mis amigos o a comer en el club, menos presentándosela a algún socio en alguna cena de negocios. En esas situaciones me veo con Melina ella es más adecuada.

A veces pienso que mi gusto por ella es algo que una vez acostándome con ella lo sacare de mi sistema.

Por que aunque quiera hacerme el rebelde con mi abuela e ir contra la corriente, se que lo correcto en edad, vestimenta y forma de ser, es Melina. Ella seria lo correcto para mi en la posición que me encuentro como hombre de casi 30 años presidente de 2 de las empresas más importantes de Estados Unidos y padre de dos hijos.

En el fondo se que lo mío con Bella es solo pasión. No quiero que mis sentimientos se me vayan de las manos, lo nuestro tiene fecha de caducidad y de algún manera debo hacer que ella entienda eso para no tener corazones rotos.

O al menos eso me digo tratando de convencerme ya que se que con lo del tiempo que me dio la abuela lo debo respetar.

Ruego para que ella acepte estar esas 6 semanas conmigo, ya que no puedo prometerle más. Tampoco quiero dejarla ir.

Ella me mira mientras le acaricio su cintura y espalda en circulos relajantes y paso mi nariz por su mejilla para que se relaje, esta tensa en mis brazos hoy, la siento nerviosa.

- Ey... te noto tensa bebe - ella baja la vista evitando mi mirada - ¿pasa algo?

- No, nada solo estoy nerviosa - me dice mientras muerde el interior de su labios inferior, y se ve jodidamente linda.

Comienzo a besarla, me decido por un beso tierno, para quitarle los nervios, pero pronto ella abre ligeramente la boca en señal que quiere mi lengua, yo si poder resistirme a ese gesto meto mi lengua dentro de su dulce boca.

Nuestras lenguas ya no quieren separarse y se envuelven en caricias. Nuestro beso se vuelve caliente en cosa de segundos, donde nuestras manos no pueden dejar de recorrer el cuerpo del otro con desesperación.

Ella mete sus manos en mi cabello y se siente tan bien, comienzo a besar su largo cuello, me encanta como se marca su garganta y el perfil de su mandíbula donde voy dejando besos y pequeñas mordidas, mis manos se van a sus muslos y comienzo a subir su vestido hasta que la miro buscando su aprobación para sacarlo, ella asiente.

Saco su vestido y queda con su lencería que es más transparencia que encaje y termina de ponerme duro ya que se ve jodidamente caliente, sus tetas se ven aún más grandes y tengo una vista directa y privilegiada a su suave coño que muero por probar. Quien diría que mi manzanita usa este tipo de ropa interior que la hace verse jodidamente sexy.

La miro ahí sentada en mi regazo en solo ropa interior y es un sueño - Eres tan hermosa -le digo y ella me da una sonrisa traviesa.

No espero que responda y vuelvo a sus labios, y los gemidos que suelta mi manzanita cuando atrapó su labio inferior y lo chupo es el cielo, quiero más de eso. Mis manos comienzan a bajar desde sus mejillas hasta sus tetas las ahueco en mis manos y las amaso lo cual hace que crezca más mi excitación.