Después de la conversación con Luca, solo quería escapar, salir de esa habitación que se estaba cerrandose a mi alrededor.
Camine para calmarme. La playa fue mi escape, sentir la arena en mis pies, la brisa del mar golpeándome directo en mi rostro fue lo que me ayudó a tratar de aclarar mis ideas, para poner en orden mi cabeza.
Para pensar sin intervención de otras personas. Sin las opiniones de personas que me aman y solo quieren mi bien, y eso condiciona su opinión.
Después de mi caminata, ya con una decisión tomada, llamé a mis amigas para que me encontrarán en la playa. Evite llamar a Cristobal, lo quería fuera de esto, ya que como iban las cosas, el seguiría en la vida de Harper y Luca.
No quería que se formará una opinión de Luca sin siquiera conocerlo. Y conociendo a mi amigo, sería una mala opinión
Ellas llegaron de inmediato. Siempre lo hacían, siempre que las necesitaba dejaban lo que estaban haciendo y corrían a verme.
Mientras miraba como el sol se iba en el horizonte, se sentaron una a cada lado, en silencio esperando pacientes hasta que decidiera hablar, ellas eran todo para mi, sabían como estar siempre para mi.
Mientras decidía hablar recibo una llamada de Cristobal.
- Aló Tobal.
- ¿Donde estas?
- En la playa, estoy con Pao y Nachi.
- ¿Quieres que vaya?
- No amigo, no te preocupes. Disfruta, solo necesito un poquito de compañía y ya la tengo. Gracias
- Después igual hablaremos Peque. Luca estaba preocupado, preguntando donde estabas.
- Ya, amigo. Yo le mando un mensaje.
- Ya Peque, te quiero mucho.
- Si lo se bebe, yo igual.
Le envié un mensaje a Luca diciéndole que estaba bien. Y me recosté en el hombro de Ignacia mientras Paola me tomaba las manos.
- El me dijo que no quería nada serio conmigo, que solo podía darme lo que teníamos, que no quería romper mi corazón.
》Pero como le explico que eso ya es tarde. Que ya se rompió. - les digo sin quitar la mirada del horizonte.
- ¿El alguna vez te hizo promesas que te ilusionaran? - me pregunta Paola
Niego con la cabeza, tratando de bajar el nudo que se alojo en mi garganta. - no, nunca, sola me ilusione, es que se sentía diferente - comienzan a caer lagrimas sin poder detenerlos - e incluso el trato que alejarme pero yo insisti, yo me enamore sola, siempre sus señales fueron claras.
》Pero este corazón que no me hace caso, siempre fue tan selectivo, tan precavido para amar. Pero cuando lo conoció se enamoro aún con la claridad que esto era para el solo para sacarse las ganas, que el me quería solo para vivir el momento, que nunca se proyectaria conmigo, que nunca seré más que la niñera poco experimentada con la cual se acostó.
Ambas me miraron con sus mejores rostros de impresión - ¿Perdiste la virginidad con el, bebé? - me dice Ignacia
Asiento - y lo peor es que no me arrepiento, lo elegiría una y otra vez, lo amo tanto, que siento que estoy dispuesta a aceptar lo que el quiera darme, cualquier migaja. Lo pensé y quiero todo lo que pueda entregarme, jugar en sus reglas aun sabiendo que cuando esto termine, quedare destruida y no podré volver a armar mi corazón de nuevo.
- Pero si sabes que ese será el final por que quieres hacerlo, protégete, amate, ponte tu primero. - Ignacia me mira casi suplicando - corta ahora con esto, no queremos que quedes destruida en un país lejos de nosotras.
ESTÁS LEYENDO
Mil Besos Tuyos
RomanceIsabella El es un hombre gruñón, 9 años mayor que yo, no cree en el amor y esta comprometido además de ser mi jefe. Pero es demasiado caliente, su cuerpo su cara, la forma en que me mira como si me deseara, solo me hace pensar en saltar arriba suy...