¿Un fútbol monocromo? (Blue lock × Reader)

43.- Primer partido de la Liga Neo-egoista.

Y los días siguieron. Mi actitud era completamente diferente. Ahora me centraba en mí, lo que hacían los demás ya dejaban de afectarme personalmente. Puede centrarme en mi trabajo. Los informes a los entrenadores, las juntas con Ego, las estadísticas y los análisis de los jugadores... Todo fluía como la seda.

Era más alegre ante todo. Obviamente mantenía mi escepticismo en algunos aspectos como en mi interacción con personas como Kaiser o Kunigami. Pero lo tomaba todo de forma más racional. Era divertido pasearse por las ligas. Aunque no era muy fan de ir a la liga francesa. Shidou y Rin en el mismo equipo no es una buena combinación, o eso es lo que me dicta la experiencia.

Mi relación con los chicos seguía siendo bastante cercana y me encantaba que siguiéramos siendo tan amigos. Me tomé el tiempo para conocer a Kurona, a Sendou, a Hiori, a Kaiser y a Ness... Intenté acercarme a Kunigami pero no hubo suerte. En fin... Los días pasaban con tranquilidad mientras yo disfrutaba de hacer mi trabajo con gente a la que amo y aprecio.

...

En estos momentos estaba atendiendo el partido Barcha VS Bastard München. El único titular de Blue Lock en el Bastard era Kunigami. En cambio, en el Barcha, tanto Bachira como Otoya jugaban como titulares.

Yo me senté en el medio del hueco entre las bancas de ambos equipos. Tenía a Lavinho en el lado izquierdo y a Noel en el derecho. Yo empezaba a escribir sin parar las predicciones de este partido bajo la mirada desinteresada de los entrenadores.

Aún faltaban varios minutos para que empezará el partido y los titulares de Blue Lock en el Barcha se acercaron a saludar.

– ¡Holaaaa! -- Bachira era el más enérgico como siempre.

Yo dejé de escribir para atenderlos ya que no me molestaba. Aunque los maestros parecían confusos ante la interrupción.

– Hola Bachira. -- Respondí mirando al de mechas rubias. – Otoya. -- Saludé al ninja.

– ¿Después del partido vendrás a jugar? -- Preguntó con emoción Bachira.

El y yo solemos jugar en los ratos libres que pasó en las instalaciones de la zona española. Jugamos al escondite, al pilla pilla, a fútbol... De todo un poco. Es como un niño y, aunque a mí no me gustan los niños, me gusta Bachira que es lo que importa. Otoya a veces se une pero su naturaleza de mujeriego siempre termina estropeando los juegos o subiéndolos de tono.

– No, Bachi. Después de partido necesitarás descansar y ducharte. Tienes que saber cuándo parar, querido. -- Cuando se ponía modo niño hiperactivo siempre le terminaba con ese tono más maternal y calmado.

Él asintió algo decepcionado porque enserio quería pasar más tiempo conmigo, pero yo lo relaje diciendo que a lo mejor nada más terminar el partido no pero después de unas horas podría hacerle compañía.

Entonces se acercó el otro. Otoya... Todos estaban mirando. Bueno, casi todos... Sólo Isagi, Hiori, Kurona, Yukimiya, Gagamaru, Raichi... La mayoría de Blue Lock más algunos curiosos como Kaiser o Ness. Los maestros estaban literalmente a menos de 3 metros a mis costados...

Os preguntaréis, ¿Porque había tanta gente cotilleando mi conversación con Bachira y Otoya? Pues, más que por Bachira, era por el mujeriego de Otoya. Casi todos conocían que tan salido era el chico cada vez que veía a una mujer.

– ¿Que tal, cariño? -- Preguntó cogiendo mi mano para depositar un dulce beso.

Noel se veía algo disgustado mientras que Lavinho solo levantaba sus pulgares hacia sus jugadores. Yo reía ante las diversas reacciones de los maestros.

– Estoy bien, gracias. -- Respondí con amabilidad.

– ¿Y que tal un beso de buena suerte, hmm? -- Él se acercó buscando robarme un beso.