Durante la mañana como siempre se arreglo sin prisa pues para eso se levantaba temprano, mientras se maquillaba José Luís salía del baño en toalla, aunque en teoría debería de apurarse porque era Don mil vueltas para escoger que ponerse, decidió quedarsele viendo por un rato.
– Se te va hacer tarde
– No desayunaste
– Probé el jugo y le hizo una llave de luchador a mi estómago
– ¿Es de naranja?
– Ujum — se pone el labial
– ¡Pues por eso amor!
– Estás bajo mucho estrés, tienes el estómago sentido, no le puedes lanzar un cítrico así como si nada
– Es que no pensé que fuera de naranja
– Llevatelo al menos para comer en la oficina
– Me voy a pedir algo, tranquilo, mejor desayuna tú a la par que escoges camisa porque te conozco, vas a tardar un buen rato
– Me gusta verme bien
– Eso lo sé — levanta su cabello en una coleta — Pero debes aprender a economizar tu tiempo, un empresario respetable no llega tarde a trabajar
– Está bien — ríe y camina al closet — Por cierto ¿Te hiciste la prueba?
– No me la voy hacer, quiero esperar otro poco
– Llevamos dos semanas sin hacernos una
– ¿Llevamos? Soy la que las hace
– Bueno pero estamos juntos en este proceso, anda, hazte una
– Luís — suspira — No quiero ver un negativo, tengo mucho trabajo y debo estar concentrada
– De acuerdo, cuando regreses entonces
– Mejor el fin de semana, así tengo dos días para deprimirme por no engendrar un bebé apesar de los grandes esfuerzos de mi cervix
– Muy buen cervix por cierto — toma una camisa
– Pues claro, soy producto de buena calidad — se pone de pie mientras coloca ba sus aretes — Es por eso que no entiendo porque tardamos tanto en concebir
– Porque lo bueno se hace esperar, nada más por eso — reaparece — ¿Crees que la camisa va con este pantalón?
– Si, se te verá bien — concuerda — A mi se me hace que es algo más, no puede ser que no quedemos, lo llevamos haciendo sin interrupciones ya un buen rato
– Paciencia — se pone el pantalón
– Es justo lo que no tengo — mira su reflejo una vez más — Bueno voy a La Constructora
– ¿Almorzamos juntos?
– Yo te aviso, depende de cuanto trabajo tenga porque hoy estoy cargada de juntas
– Cualquier cosa te llevo algo de comer, nos quedamos en tu oficina y ya
– No es mala idea pero deja que te avise ¿De acuerdo?
– Bien, dame un beso entonces ya que te iras temprano y me dejas aquí abandonado
– Ay pero que exagerado — se acerca dándole un buen beso — ¿Contento? — sonríe
– No, ahora quiero llevarte a la cama — la hace retroceder un par de pasos
– Luís... Tengo que ir a trabajar — ríe al ganar besos — En serio... Oye
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Nuestro Convenio
FanfictionAñadela a tu biblioteca, te vas a enganchar, ya lo sabemos JAJAJA