Our Secret || El Mariana

4. Madison

24, Enero de 2021

Madison Pov's

—Las invitadas de hoy son... Ari de los gameplays — anuncio Sam a nuestra amiga — Y Madi.

Ari y yo aparecimos bailando atrás de la rubia.

Estábamos en una tienda haciendo compras de último minuto.

Hoy es mi cumpleaños, voy a hacer una pequeña reunión con amigos en mi departamento, pero el outfit que iba a llevar esa noche no pudieron entregármelo, así que vine de compras con Ari y Sam para que me ayudarán.

A mi mejor amiga se le ocurrió la idea de hace un directo.

—Solo los reales reconocen a Madison — hablo Ari al estar leyendo el chat.

Habían preguntado quién era yo.

—Madi es mi mejor amiga — explico Sam — Y hoy estamos de compras porque es su cumpleaños y no tiene ropa para la fiesta que organizo.

Ari empezó a reírse de fondo.

—Es que no me entregaron mi outfit de hoy — informe.

—Porque dio mal la fecha — aclaró Ari riéndose y la golpee levemente en su hombro provocando que riera más alto.

—Hoy estamos buscando algo simple, pero de colores neones porque esa es la temática — mencioné al estar cerca del teléfono de mi mejor amiga.

Sam y Ari me mostraban opciones y yo me las probaba, así pasamos por casi dos horas.

[...]

El departamento estaba más o menos lleno, la música no estaba tan fuerte porque la mayoría estaba conversando entre sí.

El patio estaba cubierto de luces de colores, mientras que adentro la luz ultravioleta alumbraba la casa reflejando los tonos fosforescentes de la ropa de todos.

En la cocina los mesones estaban llenos de cubetas con hielo seco donde estaban las bebidas heladas para que la gente nomás las tomará.

Estaba en el patio junto a unos amigos de mi Universidad cuando veo a Sam a la distancia, venía del brazo junto a Felix.

—Discúlpenme — murmure para mis amigos.

Cuando alce mi mirada note la presencia de otra persona detrás de ellos dos.

Oh no, esto debe ser una broma...

Camino hacia ella.

—¡Feliz cumpleaños Madi! Ya eres súper vieja y señora, me tienes que mantener — comenta mi mejor amiga.

Raramente me da un abrazo

Rio levemente y me aferró unos segundos a su cuerpo.

Cuando recargo mi cabeza en su hombro lo veo.

Se empuja levemente los lentes y me mira fijamente.

No sé lo que piensa exactamente, pero me parece fastidioso por algo no lo había invitado.

La rubia me suelta y toma mis hombros.

—Te traje el mejor regalo que te puedan regalar — me entrega una caja morada.

Felix me abraza.

—Señora Madison, ya se te notan los 21 años eh, ya pensiónate o algo — rio ante el comentario del novio de mi mejor amiga.

Lo golpeo el hombro y él ríe.

Conozco a Felix desde que empezó a salir con Sam y se con certeza que se aman tanto.

Al soltarlo, se hacen un espacio entre los dos y me quedo mirando fijo al alto.

—Osvaldo — exclama Samy casi en un susurro.

Él suelta un bufido.

—Feliz cumpleaños, Madison — dice entre dientes.

—Gracias.

Los tres me miran.

—¿Qué hace el aquí? — interrogo.

Él rueda sus ojos y se cruza de brazos.

—Se los dije, mejor me voy — menciona Osvaldo.

—No te iras, Osvaldo y tu Madison —Sam suspira —Lamento haberlo traído, pero…

Niego.

—Está bien, mientras no haga mucho problema — hable directamente para él.

Sinceramente no quiero pelear hoy, no en mi cumpleaños y menos con alguien tan desgastante como Osvaldo.

Paso mi brazo por los hombros de Rivers y tengo que agacharme levemente porque ella es más bajita que yo y la conduzco hacia los demás dejando a Osvaldo atrás.

Felix viene del otro lado y ríe al escuchar el comentario que hace Sam porque me burle de su estatura.

[...]

Osvaldo Pov's

Ni siquiera sabía qué hacía aquí, Sam me había traído y parece que a la fuerza espera que Madison y yo nos llevemos bien.

Aldo está a mi lado, a él si lo habían invitado, no como yo.

Mi amigo me habla sobre una chica que había conocido en aquella reunión cuando mis ojos siguieron a la estrella de esa noche que había pasado frente a mí.

Estaba saliendo al patio parece que fue por otra cerveza, charlaba muy animadamente con Rocío y Alana.

No sabía de que se reían tanto, pero no podía dejar de verla, la verdad es que se veía muy linda esa noche.

Sus mejillas se sonrojaban cada vez que reía por algo que decían sus amigas y se la veía algo tierna a mi parecer, también...

Una mano paso frente a mis ojos y parpadee dos veces.

—¿Estás bien? — pregunta Aldo — Parece que disociaste por unos minutos o ¿Estabas viendo a alguien? — interroga mi mejor amigo con burla.

El moreno gira su rostro para ver a quien estaba mirando, pero tomé su rostro con mi mano derecha y lo detuve.

—Solo era una mosca — mencioné.

—¿Por qué te pones nervioso? — se ríe.

—No estoy nervioso — niego y me levanto — Mejor vamos adentro, aquí no hay nada interesante que ver.

Solo esperaba que Aldo no se diera cuenta de que estaba viendo a Madison, además, ella no me llamaba la atención de esa forma, ¿Nosotros juntos?, Eso nunca.