24. Sin palabras

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23, Octubre de 2022











Rodri, Spreen habían venido desde Argentina a México por cosas de trabajo, pero como ya era su último día en la ciudad decidimos hacer una pequeña fiesta, la cual había planeado Ari, Juls y Ama.

Quacks y Ada estaban conmigo en uno de los sofás charlando, hace poco habían confirmado su relación ante las redes sociales y se los veía muy felices juntos.

—Hola — saluda Carre llegando y sentandose a mi lado — Madi, vamos a bailar con los pibes.

—Esta bien.

Rodri me extiende su mano y la tomo, me conduce a la pista donde están varios de nuestros amigos y me quedo entretenida por unos largos minutos hasta que mis pies ya no pueden más.

Vuelvo a dónde estaba anteriomente, ventiendome el rostro por el calor que hacía.

—Hola — saludé al ver que habia más gente en los asientos.

Los demás saludan y me acercó a una chica castaña ya que había un espacio desocupado a su lado.

—Disculpa.

—No, tranquila — se pega más a Roberto que está a su lado y este pone su mano en su cintura.

—Madi — llama mi atención Roberto y le sonrió — Te presento a Yomi, mi novia.

La chica extiende su mano y la tomo.

—Un gusto, Madi — le sonrió de vuelta.

—Y ella es Mar, su mejor amiga — señala a otra chica que está al otro extremo del sofá — Es la novia de Roier.

La más alta se acerca a mi y me saluda.

—Nos han hablado mucho de ti — menciona la chica que conozco como Mar — Roier, te quiere mucho.

—Yo también lo quiero, es un gran chico — musito y ella asiente — Que lindo es conocer a gente nueva y ustedes tranquilas que yo le aviso cualquier cosa, son mis amigos, pero no acepto ese tipo de cosas.

Ambas me sonríen.

—Eres muy linda — comenta la chica junto a mi.

Me quedo un rato hablando con ellas hasta que Becc va por mi para volver a bailar.

Estaba siendo una noche genial...

Spreen que está a mi lado pasa su mano por mis hombros.

—Me caiste re bien, boluda — menciona el argentino.

—Y tu a mi, pero aún necesito que me den de probar el fernet, ya me lo prometieron — señaló a Rodri y a Spreen y ellos ríen.

Y al fin después de tamtas horas por fin lo veo.

Osvaldo está frente a mi con una cerveza en su mano, su cabello desordenado y con una camisa negra que tiene doblada hasta los codos y dos botones de arriba abiertos, pasa una mano por su cabello provocando que moviera su mirada y así está chocará con la mía.

Él se queda serio y camina hacia nosotros o eso es lo creo... Hasta que pasa por nuestro lado y me mira de reojo.

Me volteo unos segundos para verlo y veo que está con Beth.

¿Qué le pasaba?, ¿Por qué no me saludo?

—¿A quién miras? — pregunta Spreen mientras se gira al igual que Rodri.

Veo a todas las personas y menciono la primera excusa que viene a mi mente.

—A Juls, me gusta mucho el vestido que trae — menciono con seguridad.

Our Secret  ||  El Mariana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora