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—Sabes que no tiene nada de malo que lo llamaras "bonito". Te gusta y es normal.

Jisung intentaba calmar a Seungcheol que parecía entrar en crisis. Había pasado una semana desde que Sakura se había ido y su amigo parecía estar más sensible de lo usual.

—No lo entiendes, no entiendes la gravedad del asunto.

Mientras Seungcheol iba de un lado a otro con las manos en la cabeza, Nayeon comenzaba a tener una lucha interna entre golpearlo o patearlo para que se calmara. Y por medio de las cámaras, Jongin y Ong se preguntaban si quizás mandarlo a una ronda en el fuerte frío le ayudaría a enfriar sus pensamientos.

Enero se estaba yendo muy rápido y Seungcheol por primera vez había decidido contarles sobre la fiesta de fin de año. La historia estaba divertida para todos, pero en algún momento creyó recordar algo y sólo comenzó a repetir que no debió haberlo hecho.
Media hora después, Nayeon señalaba un agujero invisible que había hecho Seungcheol sobre el suelo por tanto caminar.

También había pasado una semana desde que Seungcheol había plantado a Jeonghan, y una semana desde Joshua tuvo el primer recuerdo.

Como en los viejos tiempos, Joshua y Jeonghan, habían decidido salir a caminar. Una noche fría que solía amar Jeonghan solo porque de esa forma podía estar pegado a la espalda de Joshua.

—Tu espalda es muy cálida...

Joshua podría intentar contar las veces que Jeonghan le había dicho esas palabras y ninguna fue cuando tenía buenos momentos. Se encontraban en un parque solitario, y los copos de nieve comenzaban a caer.
Sintió la pesada respiración de su amigo y quiso preguntar, lamentablemente también lo conocía bien como para saber que no respondería.

—¿Te gusta alguien?

El murmullo de Jeonghan lo tomó desprevenido y su único acierto fue quedarse quieto, logrando sacar una risita del contrario.

—¿A qué viene esa pregunta?
—Desde que te fuiste... Solo hablamos poco y lo último que supe fue que tenías una novia llamada Kyla, también llevas el piercing de cruz y eso no suele ser bien visto en las comunidades religiosas.

De todo lo que pudo decir Jeonghan, solo notó que tenía buena memoria, él no había mencionado el nombre de su ex prometida en la reunión.

—Creo que hay muchas personas lindas a mi alrededor.
—¿Soy lindo?
—¡Yoon Jeonghan!

Tras el grito pudo sentir el frío en su espalda. Entre risas Jeonghan se había alejado y parecía un niño con juguete nuevo saltando sobre la nieve que caía después de escucharlo.

—¡Siempre supe que creías eso!
—Estás sacando malinterpretando mis palabras.

Intentó excusarse.

—Soy una persona a tu alrededor, no hay excusa.

Finalmente Jeonghan tenía razón, Joshua había aceptado su sexualidad y no podía negar que le parecía lindo.
Mirándolo con atención, Jeonghan llevaba el cabello hasta los hombros y de color negro; un beanie de color rojo que combinaban con su nariz ahora que había estornudado.

—¡Dios! ¡Debemos volver!

Un Jeonghan resfriado no era bonito para nadie. Acercándose sacó un pañuelo y limpió la nariz del mayor con sumo cuidado. Joshua no sabría que el sonrojo en las mejillas de su amigo era por la atención recibida y no por el estornudo.

Mientras para Joshua era solo un simple detalle, para Jeonghan era un poco más que eso. Los recuerdos de su adolescencia volvían y con ellos una ligera confusión.

Joshua ya no era ese niño delgado y un poco tímido que conoció. En la fiesta se había fijado en aquello y ahora que sus manos estaban juntas mientras regresaban a su departamento sintió sonrojarse. Pensándolo mejor, Joshua entraba en los límites de su tipo ideal y con esa idea en mente decidió que necesitaba una pareja, Jeonghan no se permitiría perder una amistad.





—Entonces quieres un novio...
—O novia.

Completó Jeonghan sacando algunas carcajadas de su ex novia. Después de despedirse había llamado a Jeongyeon y ésta no tardó mucho en llegar a su departamento.

—Hannie, ambos sabemos que necesitas un novio en este momento. No tienes cabeza para lidiar con una chica, quieres ser consentido y mimado a más no poder.

Jeonghan no quería admitirlo, pero resistiría lo que pudiera. Con un ligero puchero miró a la mujer que se paseaba por la cocina en busca de preparar chocolate caliente para ambos.

—Recuerdame por qué te llamé en primer lugar.
—Porque soy la persona que más te conoce en esta vida y porque me quieres mucho... También porque necesitas de un "Chocolate caliente de Jeongyeon no resuelve mis problemas, pero me hace sentir feliz"
—Te quitaré las llaves de éste lugar.

Las risas no se hicieron esperar y el chocolate estuvo listo más rápido de lo que creyó. Sentado en la mesa suspiro y con una sonrisa agradeció a su amiga cuando vió la taza frente a él.

—No necesitas una pareja, necesitas ser honesto contigo mismo. Joshua solía gustarte y ese momento te trajo recuerdos, es lo mismo con Jihoon.
—Sería gracioso que terminara siendo pareja de Seungcheol.
—Yo creo que se verían bien.
—Estás loca.
—Eso dicen siempre.

Jeonghan se arrepintió. Yeon le hizo ver que Seungcheol encajaba perfectamente en su tipo ideal cuando se trataba de hombres, ahora tenía tres bonitos problemas con los que lidiar durante mucho tiempo y no deseaba lo mismo para alguien más.



—Si te gustan los tres puedes tener una relación abierta.
—Esa no es una solución.

Jeonghan no supo cómo terminó contándole sus problemas a alguien en la sala de espera. El hombre de lentes esperaba el certificado por un fuerte resfriado.

—¿Qué hay de pedirle al último tipo ser novios? Dices que a él le gusta alguien más, así que podría saber si hay interés en esa persona y tú podrías evaluar la situación con tu amigo extranjero; nadie quita la posibilidad de que tambien le intereses y que gracias a eso lo note.

—Es la peor idea que puede existir.
—Pero podría funcionar.

Jeonghan se puso de pie y se dispuso a continuar con su trabajo, pero a los pocos pasos se encontró considerando la posibilidad de hacerlo.

—¿Cuál es... Tu nombre?

Preguntó al dar media vuelta, pero el hombre ya no se encontraba.

Cuando Jihoon (2JiHanCheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora