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—¿Cuáles son las posibilidades de que Jihoon se vuelva novio de alguien?
—Así como vamos.... Son nulas.

Jihoon ya no tomaba importancia a lo que sus amigos pensaran, sabía que no cambiarían de parecer, es por eso que se encontraba mirando como Minghao y Jun hablaban de su inexistente vida amorosa mientras Seungkwan estalkeaba el Instagram de Jeonghan. La Coca-Cola zero le era más entretenida en ese momento.

Ya estaban a finales de enero y las cosas no habían mejorado, pero tampoco les iba mal.
Jihoon había regresado a su ropa dos tallas más grandes y, por algún motivo desconocido, ya no quería cortarse el cabello.

—No pueden ser nulas, hay tres papacitos detrás de él.
—¿Por qué nos seguimos juntando con Soonyoung?
—Buena pregunta.
—¡Soy el alma de la fiesta!
—¡Esto es una cafetería!

Tampoco podía evitar que Seungkwan y Soonyoung discutieran, le gustaba pensar que podrían terminar siendo pareja.

Dió un trago más a su botella, tomó su mochila y se levantó en silencio. Para su buena fortuna, nadie lo notó; quizás Jun sí, pero no diría nada.

Tenía tiempo para llegar a la clase de Hong, pero no le importaba, quería estar antes que todos. Un pasillo, dos pasillos y tres pasillos; estaba en el salón. Tarareando en voz baja buscó el primer asiento frente al escritorio de su primer amor y se sentó.

—¿Te gustan las clases de inglés?

Y Jihoon estuvo tentado a responder: "me gustas tú". En cuanto notó su propio pensamiento se sonrojó y se excusó al decir que se había asustado.

Joshua seguia siendo un año mayor; quizás haber esperado para comenzar sus estudios universitarios fue la mejor decisión, lo volvía a ver.

Para el futuro docente las cosas habían cambiado un poco; ya no hablaba con Jeonghan y Seungcheol parecía estar ocupado siempre. Retomar una amistad nunca era tarea fácil.

—Luces como si no hubieras dormido.
—No lo hice, estuve pensando.
—¿Es difícil estar por graduarse?
—Es difícil cuando tienes cosas en las que pensar.
—Siempre eres profesional con tu trabajo.
—Jihoon.

Entonces el ruido del pasillo parecía no existir y que sólo existían ellos en ese momento.

—¿Alguna vez te ha gustado un amigo cercano?

La respuesta fue el silencio del menor.

—¿Y... Has visto a alguien desde lejos?

La respuesta silenciosa de Jihoon era, por segunda vez, afirmativa.

—Un amor no correspondido es doloroso, pero duele más vivir con la duda y pensar en las posibilidades.

Lee no lo entendía; quizás Hong tampoco.

Sin saberlo, ambos habían extrañado a la misma persona en diferentes tiempos de su vida. No era una competencia, tenían algunas cosas en común.

El menor quiso decir algo más, pero los estudiantes comenzando a entrar lo interrumpieron. La clase comenzó y no fue incómodo para ambos, poco a poco las conversaciones antes de clases se volvieron frecuentes y, sin notarlo, también incluyeron bromas, algunos chistes internos que solo los dos conocían.

Los días pasaban y con ellos llegaron las conversaciones fuera del salón, volviéndose un par de amigos cercanos. Siendo Joshua joven, para los docentes no era extraño que se volviera amigo de los estudiantes; quizás solo el director Nam estaba notando una pequeña diferencia en el trato que no sería conveniente dentro de poco.

Joshua también comenzó a sentarse en la misma mesa de Jihoon. Al final del día, también era un estudiante.

Para el trece de febrero, Jihyo, ya podía moverse por si misma; con cuidado, pero podía hacerlo y Jeongyeon se ofreció a acompañarla cuando dijo que quería visitar a sus padres.

El catorce de febrero la universidad tenía un intercambio de regalos, no era obligatorio. Jihoon no asistió, decidió pasar el día en casa y en cama.

—¿No vendrás?
—No tengo nada que hacer ahí.

Pocas palabras intercambiadas en una llamada. El celular había sonado cuando quiso ver un nuevo anime para encontrar inspiración, era Joshua.

—¿Y Jihyo?
—Con sus padres, se fue con Jeongyeon.

Nunca hubo una aclaración entre ellos y tampoco parecían recordarlo cuando hablaban. Jihoon dejó el anime en segundo plano y prefirió acostarse para continuar con la conversación.

—¿Así que el señor Lee está solo?
—El señor Lee se encuentra aburrido y sin inspiración.
—Pobre señor Lee.
—¿Verdad que sí? Pero es necio.
—¿Puedo hacerle compañía al señor Lee?
—Estará agradecido por la compañía.

Cuando la llamada terminó Joshua se sorprendió por su propio actuar y podía ver el número de Jihoon en la pantalla del celular. Inconscientemente sonrió y corrió a cambiarse de ropa, por algún motivo, quería verse bien.

Por otro lado, Jihoon estaba sonrojado y saltando sobre la cama; emocionado por la visita de Hong.
Se levantó y buscó un cambio de ropa, se duchó y arregló lo que más pudo el departamento.

Decir que no estaba nervioso sería mentir y Jihoon estaba cansado de mentirse. Se descubrió a si mismo pensando en Joshua, volvió a la ropa grande porque no estaba seguro de su propio cuerpo y, quizás, su cabello largo ahora se quedaría así porque Joshua dijo que se veía bien si lo trenzaba.

En esas semanas supo de Jeonghan gracias a Jeongyeon y ya no se sintió nervioso. Con Joshua cerca, había aceptado que muchas cosas tenían que permanecer en el pasado y era el destino para Jeonghan. Nunca olvidaría aquel primer beso, pero tampoco podía aferrarse a el y la vida se lo mostraba.

Mientras tanto, lo único que Joshua supo de Jeonghan fue gracias a un par de publicaciones en Instagram. Había dado un like a la foto en que aparecía con Seungcheol, también estaban Nayeon y Jisung, pero sólo prestó atención a sus viejos mejores amigos abrazados.
Jeonghan era hermoso, pero no podía verlo desde lejos; no cuando se suponía que retomarían una amistad.
Ese fué el día que decidió que sería solo un buen amigo y fue el mismo día en que descubrió que Jihoon también gustaba de la misma persona.

—¿Llego tarde?
—Llegas justo a tiempo para ayudarme con el almuerzo.

No se lo propusieron, pero habían comenzado a tutearse.

—Te prestaré ropa, mancharás tu perfecta camisa blanca.
—Seré cuidadoso.
—Te cambiarás de camisa.

Los opuestos se atraen; quizás era el caso. La perfecta camisa de Joshua y la camiseta de Jihoon parecían no conocerse; los pantalones formales de Hong y la pantaloneta de Lee podrían odiarse durante lo que les quedaba de vida... Pero terminaron en el mismo lugar al final del día.

—Hola, Jihoon, venía a devol...
—Sowon.

Siempre se aconseja discreción, pero Sowon no la conocía; quizás sólo olvidó ser discreta cuando vió el abdomen de Joshua...

—Puedes quedarte con el cambio de la pizza.

Y a un Jihoon despeinado envuelto en sábanas.

Cuando Jihoon (2JiHanCheol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora