Lena Snow es una joven estudiante de sociología, además trabaja en una cafetería, sin embargo los ingresos no le son suficientes y necesita a un compañero de Departamento.
Evan Peters es un joven actor en ascenso, que acepta un nuevo proyecto en una...
Evan acompañó a Lena hasta la habitación de Ian, donde le ayudó a recostarse. -Ire a buscar al doctor.
Lena salió del lugar, dejando a un incomodo Evan con Ian.
El joven le miró y sonrió. -Tu debes ser el compañero de departamento del que me habló Lena, verdad?
Evan sorprendido, pensó en negarlo pero era muy obvio. -Si...
Ian suspiró. -Que haces aquí? Eres famoso, no deberías estar con gente de tu entorno?
Evan estaba reacio. -No, mi lugar es con Lena.
-No deberías estar tan enojado, estaré máximo un mes más con vida, después de eso, Lena será libre.
Evan lo miró confundido. -Porque eres tan amable?
Ian se acomodó en la cama. -Me muero, cada día que pasa me muero. Se que Lena está a mi lado para que no me sienta solo estos últimos días, es su forma de ayudar y aunque es vergonzoso, lo acepto. No quiero que sienta rencor por no ayudarme.
Evan se cruzo de brazos. -Aun así la obligas a mantenerse preocupada por ti.
-Tu estas aquí por obligación o porque ella te importa?
Se quedó en silencio. Lena no se quedaría con alguien por obligación, no era de esas personas y no perdería su tiempo con alguien que no le importaba. Ian rio. -A mi me queda un mes máximo. A ella, 6 meses. En verdad espero que encuentren a un donador antes de morir, quiero saber que ella va a vivir.
Mientras ambos conversaban, Lena fue a buscar al doctor pero no lo encontró. Por un momento sintió que su estómago estaba revuelto, le costaba respirar y tragar.
Fue hasta la habitación de Ian y por la ventana, pudo ver a los jóvenes hablar tranquilamente, lo que le alegró.
Se le hacia extraño ver a Evan en persona. Durante ese tiempo, estuvo viendo entrevistas de él para saber si estaba bien, así pasaba sus días, animanda al ver que él estaba cumpliendo su sueño.
Después de un año, su amor seguía intacto. Lena sintió que le volvía a faltar el aire. Tapó su boca pero no pudo aguantar. El sabor ferroso de la sangre le invadió la boca. Había vomitado sangre.
Evan escuchó un alboroto fuera. -Que ocurre?
Ian igual se preocupó al ver a las enfermeras correr hasta su puerta pero no entrar. Evan abrió la puerta y vio a Lena cubierta de sangre. -Estoy bien, solo vomite...
Lena trataba de convencer a las mujeres pero estas estaban alteradas.
Evan estaba helado, no sabía cómo ayudar. Un hombre le pasó un bote a Lena, quien estaba calmada. -No es...
Volvió a vomitar sangre, esta vez en el bote. La sentaron rapidamente en una silla mientras ella, blanca como papel, repetía. -Estoy bien.
Ian, sin saber cómo, estaba frente a ella sujetando el bote. -Lena, respira, te van a ayudar.
-La llevaremos a hacer unos exámenes. Debe ser una respuesta a la quimioterapia.
-Puedo ir?
Ian estaba preocupado. -No, Ian, debes mantener reposo. Confía en nosotros.
La mujer llevó a Lena hasta el ascensor.
Evan no se movía, solo se mantuvo de pie, mirando a Lena alejarse. Ian le miró. -Es normal quedarse así, debe ser difícil.
Evan miró el suelo manchado en sangre y recordó cuando la vio en el baño con las venas cortadas. El mismo sentimiento de impotencia lo invadió. -No puedo ayudarla.
Ian le dio una palmada en la espalda. -De eso te quería alejar, ese sentimiento de culpa, de impotencia... Lena sabe que puede consumir el alma de cualquiera. Si no te sientes preparado para verla morir, vete.
Hans llegó corriendo, vio a Evan y fue hasta él. -Que paso?
Ian al ver que Evan no reaccionaba, contestó. -Lena vomitó sangre, la subieron a escáner... y este no reacciona.
Un enfermero se acercó al grupo. -Ian, debes volver a la cama. Te acompaño.
El joven, enojado hizo caso, Hans miró a Evan y lo sacudió. -Evan!
Evan pestañeo. -Si, si...
-Se que es difícil, pero Lena nos necesita de pie, frente a todo. Crees que puedes hacerlo?
Evan frunció el seño y apartó las manos de Hans. -Porque todos me preguntan eso? Creen que soy tan débil? Lena me apartó de ella por un año, ese tipo moribundo duda de mi y tu igual? Estoy cansado de esto. Yo estuve con ella cuando trató de matarse, sostuve sus muñecas evitando que se desangrarse, estuve con ella, cuando ni siquiera tú estabas, aguanté no saber si estaba viva o muerta solo porque ella me lo pidió... ella es la mujer que amo y haré lo que me pida.
Hans sonrió a pesar del enojo de Evan. -Vamos.
Ambos fueron hasta el quinto piso, donde le estaban haciendo unos estudios a la joven.
Tardaron solo unos minutos, ya que los médicos sospechaban lo que podía haber pasado. -Doctor, es muy grave?
El hombre sonrió. -No, tiene úlceras en el estómago por los medicamentos, eso, junto con la quimioterapia, hicieron que su estomago sangrara, pero tiene tratamiento.
Evan sonrió, por fin una buena noticia. -Ella está?
-En la sala despierta.
Evan quiso entrar, pero el Doctor lo detuvo. -Hans, llegaron los resultados de la muestra de compatibilidad, es parcialmente compatible con Lena. Si puede venir lo más pronto posible, haremos el transplante de medula.
Hans se quedó de piedra y Evan, confundido le tomó el hombro. -Que dijo?
Hans dijo en un susurro. -Tenemos un donador...
Evan se tapó la boca de la emoción y gritó, había un donante para Lena. -Y quien es?
El hombre le miró algo preocupado. -Emily, su madre...
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