Después de aquel verano nada volvió a ser igual.
Fingir no conocer a la persona por la cual tienes demasiados sentimientos puede ser algo doloroso, pero vivir con la ausencia de un ser querido puede doler más.
¿Sabrán volver a la normalidad aún cuan...
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Sarah
Había pasado ya una semana, y las cosas con Conrad habían mejorado de sobre manera; últimamente era la persona con la que más estaba ya que los chicos salían.
— Mamá me dijo que vendrían la próxima semana junto con Laurel—. Me tiré en su cama.
— Ya hace falta un poco de orden maternal aquí, cada día los tolero menos.
Reí ante su comentario a lo que él se unió con una pequeña risa.
— Gracias, Connie, yo también te quiero.
— Sabes que tú no vas incluida en esos comentarios, a ti te he tolerado muchos veranos y sigues sin hartarme.
Me sonroje sintiendo unas cosquillas en el estómago, por un momento había extrañado esa sensación que por años me había acompañado y justamente con él.
— Yo tampoco me he hartado de ti—. Deje un beso en su mejilla.
— Más te vale, porque aún tengo muchos veranos por pasar contigo.
Sonreí asintiendo.
— Oye Connie...
— Mhm?
— Puedo preguntarte algo? Sobre tu no relación con Liv.
— Claro, aunque depende que sea lo que vayas a preguntar.
Me quedé en silencio un momento pensando si era buena idea preguntarle.
— Cómo te diste cuenta que solamente te estabas engañando con respecto a los sentimientos con Liv?—. Cedí al fin.
Me miró sorprendido aunque después pareció comprender hacia donde iba encaminada.
— Porque aunque sí la quería, o bueno, aunque sí la quiero, lo que sentía por ella no era ni remotamente parecido a lo que sentí por ti—. El que haya sido así de directo me dejó sin palabras—. Además había ocasiones en las que estaba con ella y me era inevitable no compararlo con momentos contigo, pensé que no me estaba siendo del todo sincero si aún estando con ella yo pensaba en ti.
Lo miré sin poder decir nada, pensando en las veces que había pasado lo mismo con Liam.
— Y porque recientemente me dí cuenta que estaba prefiriendo pasar tiempo contigo a estar con ella.
Un nudo se formó en mi garganta, porque yo sabía a quién verdaderamente quería, y me dolía saber que esa persona no era Liam.
— No pensé que fueras tan directo con respecto a este tema—. Murmuré.
— No tenía caso que inventara a terceras personas porque aún así sabrías perfectamente que hablaba de ti. Y porque ya no quiero repetir la historia en la que no podía admitir que te quería o incluso que te amaba, ya me cansé de ocultar las cosas.
