Sarah— Son novios? Es genial, hacen una muy linda pareja—. Al contrario de Conrad, Liv parecía ser la primera persona contenta.
— Desde cuándo?
— Oh aún no lo hemos formalizado como tal pero pronto lo haré de manera oficial—. Le respondió Liam con una pequeña sonrisa.
— Entonces no son novios, Iancito.
— Es Liam, Steven—. Lo miré seria.
— Ajá ajá, el punto es que aún no son nada formal, solamente son mmm... amigos?
— Bueno, los amigos no se besan—. Me sonroje ante la respuesta de Liam.
Conrad apretó con fuerza el mantel y su mirada parecía querer matar a mi acompañante de mil maneras posibles.
— Los casi hermanos tampoco y sin embargo estoy seguro de que Sarah y Conrad adoraban hacerlo.
— Steven!
— Qué? Solo digo la verdad, perdón si te estoy ofendiendo Ian.
— Liam—. Lo corrigió en un murmuró.
— Ajá, eso.
— No es insesto eso que acabas de decir? El que sean casi hermanos y eso.
— Oh no mi querida Liv, además si adoras la relación no relación de Sarah y Liam estoy seguro de que adorarías más la de nuestro Connie y Sarah.
— Puedes parar ya? No es nada gracioso lo que estás haciendo y estás siendo muy grosero.
— Perdón, Sarah.
Bufo como un niño pequeño y se sentó al otro lado de mí cruzandose de brazos como si de un berrinche se tratara.
Paso un rato hasta que Jeremiah, Belly y Taylor llegaron. Al ver a esta última me acerque a darle un pequeño abrazo de bienvenida, belly parecía consternada al saber lo que Taylor venía a hacer aquí.
— Creo que es la cita de Steven—. Murmuró mirándolos fijamente.
— Recuerdas lo que hablamos? Las decisiones que tomen no te deben de afectar a ti, son cosas de ellos. Sé que es de tus mejores amigas pero no puedes interponerte.
— Ajá. Veo que llegamos justo en el momento del drama.
— Estoy a nada de matar a tu hermano.
Miramos desde nuestro lugar el como se saludaban, desde aquí podía sentir la incomodidad de Liam quién empezaba a buscarme con la mirada.
— Veo que tu romeo no se la está pasando muy bien que digamos.
— Con Steven de por medio es imposible, solamente está logrando incomodarlo.
— Me mandó un mensaje hace rato diciendo que tenía que ponerme de su lado y ser team Conrah.
Negué riendo y ambas nos acercamos a la mesa, Belly saludo a Liam para después sentarse de un lado de Jeremiah.
— No sabía que volverías, Taylor.
— Oh no, pero belly y steven me invitaron, después Steven me comentó de la cena y aquí estoy—. Me respondí contenta a lo que le devolví la sonrisa.
— Tú también eres parte de la tradición que hacían?
— Mmm no tanto como ellos.
Liam asintió.
— Ah no los presente; Taylor, él es Liam es un chico con el que estoy empezando a salir—. Abrió los ojos con sorpresa para después sonreír contenta—. Y Liam ella es Taylor, otra alma del grupo.
— Encantado de conocerte, creo que eres la única de la que no me ha hablado mucho.
— Debería sentirme ofendida, Sarah—. Entrecerro los ojos hacia mí—. E igual es un gusto conocerte.
— Yo soy Olivia, pero puedes decirme Liv, la chica con la que Conrad sale—. Todos, menos Taylor nos giramos sorprendidos hacia la chica quien se acababa de poner roja.
Conrad se giró hacia ella a lo que la chica respondí entrelazando sus manos y poniéndolas en su regazo.
— Entonces hay personas nuevas aquí, que genial.
La cena empezó con un silencio algo incómodo que Steven se encargaba de llenar con malos chistes ganándose un golpe por debajo de la mesa por parte de Taylor cada que decía una estupidez.
— En dónde conseguiste que te hicieran la cena? Esta espectacular—. Hice una mueca al ver a jeremiah hablar con la boca algo abierta.
— Yo la hice, está genial, no?
— Steven, hermano, no me hagas escupir la comida de risa—. Negué riendo.
— Ojalá que ustedes dos—. Nos apunto a Jeremiah y a mí—. se intoxiquen y no puedan salir del baño por dos días enteros.
Todos rieron ante su estúpida amenaza.
Después de eso todos platicamos aunque sea un poco, está vez no hubo momentos incómodos en el que Steven hiciera comentarios sobre Conrad y yo. Incluso cuando todo acabo Liam me miró con una sonrisa cálida.
— Creo que salió mejor de lo que esperábamos—. Posó sus brazos en mi cintura—. Será extraño volver a la habitación y que no duermas conmigo.
— Lo sé, pero no puedo romper nuestra tradición.
— Sí, lo entiendo—. Beso mis labios de manera corta—. Tengo que irme, cariño.
— Quieres que te lleve? Fue muy tonto venir en mi auto.
— Tenías que traerlo de vuelta y además también estaba la opción de venir por separado pero me gusta ir contigo en el auto.
— Te gusta que cante a todo pulmón las canciones de Taylor Swift?
— Ajá, me gusta todo eso de ti.
Volví a sonrojarme y está vez fui yo la que lo bese de una manera más lenta.
— Vamos, te llevo.
— Oh no, acabo de pedir un taxi, descuida.
— Aún puedes cancelarlo—. Me retracte al instante que ví al taxi.
— Creo que no—. Sonrió volviendo a abrazarme, dejando un beso en mi cuello—. Nos vemos, te quiero novia.
Reí ante la estúpida broma de que éramos novios.
— Nos vemos.
Subió al auto y me dijo adiós con la mano desde ahí, justo cuando iba a volver a entrar la puerta se abrió y salió Liv y Conrad quienes al mirarme borraron la sonrisa que llevaban.
— Fue encantador tenerte aquí, Liv—. Me despedí con una amable sonrisa.
— Gracias, digo lo mismo.
— Buenas noches—. Respondí por última vez siguiendo mi pasó hacia el interior de la casa.
Aunque no dí ni tres pasos cuando Conrad me sostuvo por el brazo para impedir que siguiera caminando, note como su cita se tensaba.
— Podemos hablar? Solamente iré a dejar a Liv y vuelvo a casa.
— Qué? No te quedarás a dormir? Pensé que habíamos quedado en eso.
— Podemos hablar después, Conrad—. Me sentí incómoda al ver qué Liv fruncia el ceño.
— No, necesito que sea ahora. Espérame en la cocina, sí? No tardaré, lo prometo.
Asentí apretando los labios al ver la mirada casi mortal que su pareja me aventó.
Es muy temprano para que me odie...
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The Story of Us || Conrad Fisher
Fiksi PenggemarDespués de aquel verano nada volvió a ser igual. Fingir no conocer a la persona por la cual tienes demasiados sentimientos puede ser algo doloroso, pero vivir con la ausencia de un ser querido puede doler más. ¿Sabrán volver a la normalidad aún cuan...