Caer en su juego [Serie Juegos. Libro I]

3. Emmaline.

Me preparo para la maldita fiesta. He tenido que pasarme horas hablando con mi madre para tranquilizarla un poco. Después de lo de J tiene aún más miedo que salga. La entiendo, una madre jamás dejará de preocuparse por su hijo aunque estos estén grandes.

Busco en mi armario un vestido para ponerme. Independientemente de aquel gris que me regaló Jade tengo otro rojo ajustado con un gran escote en forma de V. Elijo ese.

Dejo mi largo cabello rubio ondulado y me maquillo guiándome por un tutorial de los que Jade y yo veíamos constantemente. Me coloco mis sandalias de tacón.

Cuando salgo de mi cuerpo y hago el ademán de cerrar la puerta, no me di cuenta que mi madre venía con una bandeja en la mano y terminé con el contenido de esta sobre mí.

Mierda.

—Disculpa hijita. Quería que comieras algo. No te he visto probar bocado en todo el día.

Mi mamá quiere evitar que salga a toda costa. Esto es una forma de entender que la noche será un desastre. Pero, ¿qué más puedo hacer?. Todavía no tengo la posibilidad de entrar a esa escuela y aún no tengo nada relevante en contra de nadie sobre la muerte de Jade.

—No te preocupes mamá, ya me cambiaré —tomo un panecillo que había quedado en su mano. El refresco está vertido sobre mi vestido.

—Te traeré otro refresco —comenta regresando a la cocina.

Mi mamá hace que me coma hasta el último trozo de pan y me tome todo el refresco. Después de ello me ducho nuevamente pues hasta mermelada había en esa bandeja.

Cuando voy a arreglarme me doy cuenta que agoté mi cuota de vestidos para fiesta de la élite. Asistía anteriormente a insistencia de Jade y en esas ocasiones ella me ayudaba con el atuendo.

Veo las bolsas que me había dejado Jane hoy. Al parecer mi madre las ha traído a mi habitación, pues yo no lo hice.

Tomo un vestido que le encantaba a Jade. ¡Mierda!, me siento demasiado incómoda con este vestido. Debería no asistir a esa estúpida fiesta. Desde usar este vestido hasta ver cómo intentarán reemplazar a J, todo está mal.

Pero, ¿qué demonios puedo hacer, cuando esta es la única forma de investigar más a esa gente?

El vestido es verde esmeralda. Con un escote en forma de V pronunciado, acompañado de cadenas. En el muslo izquierdo tenía otra gran apertura, que igualmente contenía cadenitas.

Volver a ondularme el pelo y maquillarme me tomó mucho tiempo. Han pasado veinte minutos de la hora que declaraba en la invitación, pero, ¿quién dice que yo sigo requerimientos de alguien?

Pido un taxi y le doy la dirección del local donde celebrarían tan estúpida fiesta. Después de entregar la invitación paso, encontrándome con muchas personas de espaldas a mí concentrados en algo o mejor dicho en alguien.

—Jade era un chica perfecta ¿verdad?. Pues, quién ocupe este sitio que hoy damos la oportunidad, deberá tener mucho de ella. Esa personalidad que arrasa por donde pasa. Una belleza notable. Deberá llamar la atención sin ni siquiera quererlo. Ser inteligente, carismática, espontánea y hasta loca, también tenía un poco de ello. Todos han presentado sus propuestas, las hemos revisado con lupa todas y cada una. Independientemente de lo que contaban en su referencia hicimos nuestra propia investigación. Aquí tenemos a las cinco candidatas elegidas.

Es Jacob hablando. Los imbéciles de Jasper y Jordan están situados detrás de él. Conseguir a una chica como Jade será complicado. No es mentira lo que dice Jacob, Jade llamaba la atención sin ni siquiera quererlo.
Mientras más me acerco al escenario que han montado tengo una vista mejor del panorama. Los ojos de las tres J se posan en mí, imagino que por ello todos los demás dentro de este salón también me observan.