Había pasado una semana y yo seguía encerrada en estas cuatro paredes que llamaba cuarto. Me daba vergüenza tratar con los chicos y con la gente en particular.
Mis padres preguntaban el motivo de mi estado y les respondía que cólicos. A los chicos los ignoraba.
Me levanto de la cama directo al baño, una ducha y de nuevo a mi propio castigo impuesto.
-Hija -llama mi madre tras tocar la puerta-. Tienes visita.
-Mamá me siento mal...-no terminé de hablar cuando Jordan entra a mi cuarto.
-Los dejo para que hablen -comenta mi madre y se marcha cerrando la puerta.
-Cree que estás así por nuestra rotura -expresa-. Le he pedido por favor, que me trajera a ti porque te he extrañado demasiado.
-Jordan, no quiero hablar con nadie.
El pelinegro se sube en mi cama y se acuesta a mi lado.-No tienes por qué sentir vergüenza de lo que pasó, panaderita. Todas las semanas aparece un vídeo nuevo a los que los demás le dedican atención. El baile fue muy sexy mi diablillo.
Le doy un manotazo que estoy segura que ni sintió.
-Para ti es fácil Jordi, pero soy yo la que es la burla ahora y hasta que no salga otro, lo seguiré siendo.
-No te preocupes han salido dos -comenta-. El tuyo pasó de moda.
-¿Qué?.
Me extiende el móvil y pone play al primer video.
Es de Selena, borracha. Hablando abiertamente de su vida, de como es la relación de sus famosos padres, de como ella se las apaña para enamorar a Jasper. En fin, de toda la mierda que le preocupa. Estoy segura que a partir de esto, aunque mi vídeo siga rondando, ella quedará destruida, porque su idea de ser perfecta para los demás se esfumó.
El más difícil y crudo fue el de Pya. Mostrando como se relacionaba con su querida amiga. Este ni siquiera lo terminé de ver, es un asco.
-¿Han tenido que ver ustedes cierto? -indago.
-Nadie puede hacerte daño Emmaline -asegura Jordan.
Me quedo mirando sus labios mientras hablas y esa bonita sonrisa que emite al terminar la frase. Las ganas de besarlo se apoderan de mí y yo me entrego a ello.
Nuestros labios danzan a la par y mi cuerpo actúa por propia voluntad. Me acuesto sobre él y me muevo repetidas veces.
-Panaderita, será mejor que pares, porque si lo dejas en mis manos va a ser muy difícil contenerme.
-No lo hagas -respondo y vuelvo a besarlo.
Me levanto de la cama y le pongo seguro a la puerta. Estoy seguro de que mi madre no vendrá a comprobar el estado: si abierta o cerrada, pero quiero ser precavida.
Me deshago de mi ropa y la lanzo a cualquier sitio del cuarto. Jordan hace lo mismo mientras deja su mirada fija en mí. Me siento a horcajadas sobre él y retomo el movimiento de mis caderas. Mi sexo roza con su erección incrementando aún más mis ganas.
Sus manos agarran mis caderas con la clara intensión de llevar él el control.-Dejarás tu manos quietas, Jordi. Te follaré yo -declaro.
Jordan sonríe y cruza sus manos sobre su cabeza. Introduzco poco a poco su erección. La sensación de sentirme llena vuelve a recorrerme. Me muevo sobre él, como mi cuerpo por si solo me indica. No soy una experta, pero Niall me enseñó a tener seguridad sobre mí y mi cuerpo.
Apoyo las palmas de mis manos en el pecho de Jordan. El placer me aviva, me domina, atrae. Dejo de ser la Emmaline con la vida sexual dormida, a esta Emmaline que disfruta enormemente de follar.
ESTÁS LEYENDO
Caer en su juego [Serie Juegos. Libro I]
RomanceCaer en su Juego, es la primera parte de la Serie Juegos. Es necesario leer esta parte para proseguir a las demás, pues aquí saldrán los personajes que protagonizarán los posteriores libros. HISTORIA NO ROSITA Y ERÓTICA _____________________________...