Artur y Príncipe hacen una competencia de quién llega primero a la entrada de la escuela, una tierna imagen de ver. Roxy y yo seguimos caminando admirando el bello bosque, ayer recibí un mensaje de las Musas confirmando que Stella ya conoció a Bloom y que todo está saliendo tal como lo planeado, en estos momentos creo que nuestras hadas del sol y de la llama del dragón se están despidiendo de los padres de la pelirroja.
- Casi se me olvida, papá te envío esto. - Un chasquido de dedos de la pelirosa hizo aparece un vaso de plástico con un líquido de color morado. - Batido de uva con fresa y moras, tu favorito para empezar el día. - Me da el vaso y yo lo acepte con gusto.
Lo mejor que me pudo haber pasado hoy, un batido del señor Klaus, son energizantes y me mantienen activa lo suficiente para pensar y analizar cualquier cosa.
Llegamos a la entrada de Alfea y pude ver una gran cantidad de chicas aspirantes a hadas, entre esa multitud pude reconocer a una chica de piel canela y cabellera castaña clara, como olvidar esa vestimenta rosa y verde.
- "Hada de la naturaleza a la vista." - Mi vista recorrió a otras cabelleras reconocibles entre ellas está Alice, una hada que en el futuro sería acusada falsamente por intentar matar a nuestra querida Flora.
Otros de los eventos que tendré que evitar, la verdad, esa chica me dió algo de pena, pero del poco tiempo que la ví realmente es una chica agradable.
Entre otras chicas también pude reconocer a nuestra querida hada de la tecnología, con ese típico cabello corto que la hacer lucir como una hacker, y por supuesto, su vestimenta morada y verde.
Pude notar que Roxy está ahora más nerviosa, yo igual lo estoy. Una cosa es soñar que vengas a una escuela de magia, ya sea de hada o brujas, pero otra cosa es experimentarlo y sentir muchas emociones al mismo tiempo.
Inhalé y vote el aire que contuve.
- Vamos Roxy, es hora de cumplir nuestro sueño. - Un brillo de esperanza e ilusión apareció en sus ojos y no pudo ocultar una sonrisa.
Príncipe apareció y se montó en mi hombro, lo entrene para que pudiera ocultar sus alas por un tiempo, Artur apareció y se mantuvo al lado de la princesa de las hadas terrestres como perro guardian que es.
Mi vista se fijó en la entrada de la escuela, nuestras princesas llegaron, ahí está la princesa de Solaria con su inolvidable vestimenta playera, porque si, cuando la ví con esa ropa creí que iría a la playa y no a una escuela, porque, ¿Quien en su sano juicio va a una escuela con minifalda y una camisa sin mangas que parece un bikini?
Yo no juzgó, pero enserio, no sabía cómo ver a Stella en ese momento, era muy inocente para darme cuenta de que todas se vestían mostrando mucha carne, todas menos Musa, Tecna y Bloom.
Y hablando de nuestra pelirroja favorita, ella igual está usando la misma ropa con la apareció en el primer capítulo.
Suspiré aliviada y más tranquila, ahora viene la parte difícil.
- ¡Muy bien hadas! - Se oyó la voz de Griselda, como olvidar a nuestra subdirectora favorita y ese carácter duro y rígido. - ¡Formen dos filas! ¡Vamos, es para hoy! - Ordenó y tanto Roxy como yo nos colocamos en una fila al azar.
Tengo entendido que aquí aceptan tener a nuestros amigos peludos, así que Artur y Príncipe pasarán sin ningún problema.
Me di cuenta de que Bloom y Stella están a cinco chicas delante de nosotras, así que aquí empieza el pequeño problema.
- Buen día señorita Griselda... - Saludó Stella con una sonrisa angelical manteniendo su mano en el hombro de Bloom.
- Pero si es la princesa Stella de Solaria, creí que nunca volvería a verte. - Que no se note el sarcasmo en su voz. - Después de lo que pasó el año pasado, me sorprende que nos conceda tu presencia... - Fijó su vista en la lista que tiene en sus manos. - Otra vez. - Finalizó sin mirarla, en su voz se nota que no soportaría otro día en Alfea con la presencia de la rubia.
ESTÁS LEYENDO
¡¡¡¿YO SOY MUSA?!!!
FanfictionNaty, una jóven normal que tenía una vida normal, era fanática de la famosa serie animada Winx Club, su hada favorita de la serie es Musa, la hada de la música. Un día, mientras ella iba corriendo para llegar a la universidad, no se fijó por sus al...