SORPRESAS.
El timbre del departamento sonó. Milly abrió los ojos aturdida, miró hacia el reloj en la mesita de noche, eran media noche, frunció el ceño ante la insistencia. Se levantó buscando la bata rosada y su zapatillas, levantó sus brazos aplacando los rizos de su cabello y fue hasta la puerta principal de su departamento. Encendió la luz y se asomó por la mirilla, en la puerta estaba 'Akil con una expresión furiosa y con una espesa barba que lo hacia parecer algo desaliñado.
Milly sintió que su corazón daba un vuelco, por instinto cubrió su vientre. ¡Oh Dios! ¡Max! Suspiró intentando tranquilizarse pero el repentino sonido del timbre la sobresaltó. Giró la llave y deslizó la cadena antes de abrir la puerta, mientras pensaba en lo que 'Akil estaba a punto de decirle; seria posible que...
'Akil la miró de arriba a abajo con desprecio en sus ojos oscuros.
- ¿Por qué lo has hecho? - Demandó mostrándole los papeles del divorcio.
Milly abrió los labios sin poder decir nada ante la sorpresa de su visita. Él paso al departamento sin ser invitado, Milly se sostuvo en la puerta por unos momentos antes de tomar fuerza para enfrentarse al amigo de su ex esposo.
- No creo que sea buen momento para una visita príncipe 'Akil - cerró la puerta y le miró cruzando los brazos sobre su pecho -, es medianoche y...
- ¡He hecho una pregunta y quiero la respuesta! - exigió arrogante.
- ¡Mi vida privada no es de su incumbencia majestad! - replicó indignada ante su actitud.
- Lo es, creeme - se acercó a ella mirándola molesto -, lo es si con esta acción lastimas a personas que les tengo gran estima.
La joven sintió gran sorpresa al escuchar esas palabras en boca de 'Akil, se irguio y curiosa levantó la mirada hacia él.
- Georgie vino a verme llorando por lo que encontró en la habitación de terapia intensiva - le dijo -, no podía creer que fueras capaz de hacer eso estando Max en coma.
- No hay nada que hacer - respondió Milly yendo hacia la cocina -, no está en manos de nadie las desiciones que Max y yo hayamos tomado en lo concerniente a nuestro matrimonio.
- ¡Demonios! - fue hasta ellos tomándola del brazo para enfrentarla -, ¡Max está en coma! ¿Cómo pudiste hacer eso si sabias que él no tenia ninguna oportunidad?
- ¿Qué quieres decir? - Demandó Milly retándolo con los ojos -, ¿Crees qué yo fui la que metió la demanda del divorcio? Estas equivocado príncipe 'Akil, Max lo hizo, yo sólo he aceptado su voluntad, él... - pasó saliva y se soltó de la mano morena -, quería su libertad y yo se la he dado, es lo menos que puedo hacer.
Sus ojos se llenaron de lágrimas y bajó la mirada ocultándola de él. Suspiró sintiéndose muy agotada.
- Él me lo pidió el mismo día en que fui secuestrada - le confió con voz ronca -, yo sólo estoy haciendo lo que él quería, es lo único que puedo hacer. Para mí es su ultima voluntad, para que cuando salga del coma al fin pueda hacer su vida. Volver a empezar.
- Aún así creo que esto deben arreglarlo cuando Max este en condiciones para poder firmar los papeles - arrojó los papeles a la encimera de la cocina -, se lo debes Lady Mildred.
Milly le dio la espalda recargándose en el fregadero mirando por la ventana
- Como ya le he dicho a mi padre y ahora a ti, Max tomó su decisión y yo debo de respetarla, se lo debo. Tiene derecho a ser feliz.
- ¿Y crees que esto lo va a lograr?
Milly se volvió mirándolo con algo de sorpresa. Bajó de inmediato la mirada moviendo la cabeza negando sus palabras.
ESTÁS LEYENDO
la bestia y la bella
RomanceMaximilian Blackthorne era conocido como la bestia en el mundo de los negocios. Nunca permitía que nadie se aprovechará de él, mucho menos un contador cualquiera. No le importaba que fuera por momentos de vida o muerte. Joseph Mathews iba a pagar po...